La inspiración de un artista - Yoonjin/Namtae

Es el final

Estaba preocupado; Yoongi había escapado del taxi como si su vida dependiera de ver a Seokjin, y luego de pagar el transporte, no demoró un segundo más en buscarlo desesperado, siendo detenido por un agradable chico en la entrada que poco tiempo después supo que era Jung Hoseok, quién había llamado a su amigo poco tiempo antes y su único guía en ese gran hospital para encontrarlo.

—Agradezco su llamada de hoy y que me ayude a encontrar a mi amigo, señor Jung, pero ¿por qué supo quién era yo? ¿Debería preocuparme por ello?— Lo dijo como un vago intento de broma, pero le preocupaba seriamente la situación a pesar de que segundos después vio la adorable sonrisa de ese desconocido.

—No, por favor, Kim Taehyung, primero, llámame solo Hoseok, y segundo, sé de ti porque te investigué, de hecho todo lo que Seokjin y Namjoon saben de ti es por mi, no fue difícil, debes cuidar más tu privacidad y poner mejores contraseñas— Su rostro se deformó en preocupación y fue peor cuando ese delgado chico mantuvo su sonrisa siendo ahora aún mas cínica, como si no le afectará su claro terror —No te asustes, Kim, con el trabajo de Seokjin es normal que gente como yo haga cosas así...— No pudo responder, casi hasta detiene sus pasos al caminar, pero temía que fuera a empeorar la situación por contradecir de alguna forma a ese extraño que parecía tener la capacidad mental suficiente para quitarle la vida sin pensar —Vaya, por tu mirada, parece que no lo sabés, tal vez hable demás. ¡Ah! El jefe me odiará por esto y con traer a Min Yoongi aquí ya era suficiente, que pesadilla, ya no responderé nada más, si tienes alguna duda Namjoon esta...

—¿Dónde esta? ¿Está bien?— No supo cómo, pero el miedo que se veía hasta en el sudor de ese artista, se desvaneció al mencionarlo, y quiso reír por ello. Ese chico solo era otro tonto cegado por Namjoon, hasta le recordaba a si mismo.

—Él siempre esta bien, solo vino a ver a su hermano y a un viejo amigo, si sigues por este pasillo encontrarás una puerta con el nombre de Seokjin y más adelante otra que dice Jeon Jungkook, es donde esta Namjoon...

Taehyung no quiso escuchar más, ese tipo que en un principio parecía agradable y hasta atractivo, se volvió sumamente aterrador, y la compañía de cualquier otra persona sonaba mucho mejor, en especial si era la de Namjoon.

Extrañamente emocionado se acercó a esa habitación, y sin importarle quién era Jeon Jungkook o por qué estaba con su modelo, abrió la puerta como una irritable costumbre que contagió a Jimin y Yoongi, encontrándose con su adorable cariño durmiendo en una silla, mientras apoyaba su cabeza en las piernas de un hombre bastante herido sentado en la camilla, que acariciba y besaba su cabello sin pena alguna.

—Oh... ¿Kim Taehyung? que extraño verte aquí, no creí que Namjoon te hablaría sobre mi, supongo que es normal tratandose de su prometido— Casi desfallece al escuchar esas palabras y al ver el reluciente anillo que le presentaba ese herido joven alegre. A pesar de la venda en su cabeza y abdomen por graves lesiones, se atrevió a mostrarle una satisfactoria sonrisa de compasión que fue sumamente irritable en su descompuesta situación.

No tenía palabras, no encontraba su voz, sintió el mundo detenerse a su alredor y solo veía esa codiciosa mirada de burla en el rostro de la persona que declaraba la más odiosa que conoció. Su malestar sentimental y sorpresa abismal fue solo detenida por los leves movimientos de Namjoon que dieron a su despertar pocos segundos después.

—Lo siento, Jungkookie... vine a cuidar de ti y termine por dormirme ¿estás bien? ¿aún duelen tus heridas?— Él se vio atento a cada movimiento de Namjoon; notó en su voz la marcada preocupación que sentía por el chico ajeno y hasta llegó a sentir en lo más profundo, la caricia sutil que le dio a ese rostro tan molesto —¿Por qué sonríes asi? Vamos, no puedes estar tan contento luego de recibir una bala.