será nuestro secreto

imprevistos(27)

El domingo pasó rápido, para la suerte de Moa por que al fin podría enfocarse en el sinfín de archivos que su tío le había enviado para que los estudiara.
Pero a demás de ordenar su nueva vida, tenía que ordenar la antigua, esa que solo Jonathan conocía y que incluso ella luchó para dejar en el olvido.

Miró al niño. Este jugaba con unos bloques mientras escuchaba la música de algún canal infantil. Suspiró y volvió su atención a la pantalla de su Macbook.
—Basta, cariño. No puedes seguir haciéndote esto. a caso no puedes ver lo que ocurre en tus propias narices?

—yo...— balbuceó mirando el techo. —sólo envíame mí perfil psicológico. Tengo que verlo una vez más para convencerme que no estoy loca.

—ya te lo envié hace unos días. Revisa tu mail, pero te lo dije. Tienes que hablar de eso. Nuestro cerebro esconde los recuerdos dolorosos, es un mecanismo de defensa, pero a veces es mejor hablarlos, sacarlos para que deje de ser un fantasma en nuestro inconsciente. Entiendes?— habló consiliador, dulce y atento a cada una de las expresiones de la mujer.

—tengo mucha ansiedad. Mí corazón late cómo loco, el cuerpo me tiembla, me pica bajo la piel. Siento que no soy suficiente y actuo impulsivamente hundiéndome en más problemas! No sé por qué. Sólo quiero desaparecer!— se sinceró. El hombre detrás de pantalla asintió conforme con el enorme paso que su paciente acababa de dar.

—arreglas las cosas con sexo, dilo— ordenó. La mujer presionó sus dedos en un acto nervioso. Sudó —tu vida siempre fue organizada, completamente planeada. Hace años, cuando Joong había decidido terminar con su amorío, te enojaste y viniste a estados Unidos. No te molestó perderlo, te molestó que él cambió tus planes. Después, cuando Tae te fue a buscar, te acostaste con él— Moa abrió los ojos exaltada. Negó con la cabeza pero antes de que pudiera defenderse, el hombre la silenció. —lo sé. Tu lo amabas, pero... ¿Por qué no le veías antes? Te diré por qué, por que tú ya tenías otros planes— guardaron silencio un momento. Él esperando que ella asimilara sus palabras y Moa negandose a admitirlas. —cuando él te dejó, nuevamente te enojaste por lo mismo. Pero esta vez no lo arreglaste con sexo por que te echaste la culpa del fracaso. Aceptaste que fue tu error por no pensar las cosas y casarte así de la nada— suspiró, moa ya tenía la mirada en algún punto de la sala y sabía lo que eso significaba "se estaba cerrando" —cariño, cuando regresaste la primera vez, lo único en que podías pensar era en coger con Tae. Dentro tuyo creías que así las cosas se solucionarían. Y que nada habría sido en vano. Sobre todo por que tu madre estaría feliz por que estarías haciendo su voluntad.

—no metas a mí madre en la misma oración. Ella me obligó, me iba a dejar en la calle— se apuró en decir. Él sonrió sabiendo que estaba llendo por buen camino y que su madre, era el meollo del asunto.

—te dejó en la calle después de todo— aclaró —piensa un segundo. Cuando engañaste a Tae? Fue cuando se confirmó su paternidad y todo se volvió a perder. No fue antes, ni después. Al igual que ahora, comenzaste a engañarlo cuando viste en peligro la relación. Ahí comenzó todo tu verdadero problema. Nuevamente viste todos tus planes desmoronarse e hiciste las cosas esperando que se solucionen como por arte de magia. Hay algo, en lo más profundo de tu mente, que te obliga a actuar así y tienes que dejarlo salir. Por algo te rehusas a tener relaciones con Tae, lo sientes sucio, te sientes sucia y eso no concuerda con la vida ordenada que pretendías.

—dices que algo en mí subconsciente me obliga a arreglar las cosas con sexo?— sonrió altanera. Pero la expresión dolida del hombre la descolocó. —jony, no hay nada de eso. Estoy confundida con respecto a mis sentimientos. Amo a Tae y no puedo acostarme con él por que todavía me duele su engaño, sus mentiras, pero claro que me muero de ganas, el me mira, me toca y me olvido de todo. Y con el otro... Bueno, él me hace querer seguir adelante. Lo quiero junto a mí por que de alguna manera extraña estando con él siento que puedo con todo.