Capítulo LIII

328 43 26
                                    

-Llegamos- dijo Fin deteniéndose
-Gracias por traerme
-No es nada, oye pasaré por tí luego
-No te preocupes, tengo que pasar por la Biblioteca antes de ir a ver Liv
-De acuerdo, cualquier cosa... tienes mi número
-Si, lo tengo- sonrió, le agradaba lo sobre protector que se ponía Fin- una pregunta... Brian... ¿él ya sabe lo que pasó con Liv?
-Hemos intentado contactarlo pero no contesta
-Lo llamaré luego- dijo bajando del auto- nos vemos luego, gracias Fin
-Nos vemos, te cuidas- advirtió encendiendo el auto
-Sip

Cuando se fue el detective ella ingresó en el edificio, al caminar los chicos la miraban extrañados, no era algo común ver a alguien con dos mochilas y al parecer ella había olvidado que cargaba ambas mochilas. Llegó a su casillero y dejó la mochila de Liv dentro, luego siguió caminando hasta el baño donde se encerró en uno de los cubículos y comenzó a marcar al teléfono de Brian, alguien debía decirle del embarazo de Olivia. Dos llamadas y no contestaba, la campana sonó y debía ir a su aula pronto o tendría castigo al final del día. Colgó y corrió a su aula.

Contaba los minutos durante su prueba "sorpresa", sabía que Olivia estaba bien pero quería verla, quería quedarse con ella como ella tantas veces lo había hecho, la vez que se enfermó de gripe Olivia la cuidó mientras su madre estaba de viaje en París, la vez que se enfermó de varicela Olivia estuvo allí para impedir que se rascara las erupciones; Olivia siempre estaba para ella, al igual que su madre, pero con Olivia era diferente.

Por fin era hora del almuerzo y para ser honestos no estaba ansiosa por comer pasta con albóndigas extrañas, sino porque intentaría hablar con Brian de nuevo. Se sentó bajo el mismo árbol de siempre y comenzó a marcar.

-Hola, habla Cassidy, me encuentro ocupado pero deja tu mensaje y me comunico luego...
-Hola Brian... Amm, no sé si ya te dejaron algún mensaje pero... Liv está en el hospital y creo que deberías ir... ella... ella amm... felicidades, serás papá.

Dijo y colgó, era raro que él no contestara el teléfono, aunque comprensible por el trabajo de ser policía. Por un momento se desconectó cerrando los ojos, recordando el olor de las frituras, los ojos que la miraban y la sonrisa que la distraía del asunto de su tía. La amabilidad del joven la deslumbró, no cualquiera que te ve llorando, sin conocerte, se acerca para ver que sucede y mucho menos se que queda contigo en la azotea de tu edificio hasta que te sientas mejor.

La campana nuevamente, abrió los ojos y se levantó volviendo al edificio para buscar el aula de aritmética, lo bueno es que esa era su última clase, lo malo es que no le agradaba esa clase y no podía escaparse porque si lo hacía llamarían a Olivia y no quería dar problemas. Veía al maestro escribir, borrar y dibujar mientras ella se preguntaba si también le gustaba, si causaba el mismo efecto en aquel chico, si lograba siquiera despertar un poco su curiosidad. "Cuando necesites de un amigo, toca a mi puerta" "Amigo"... No había mucho que pensarle, él ofrecía amistad y eso era todo, ella se estaba emocionando de más; además no tenía porque distraerse, tenía cosas mucho más importantes en ese momento, Olivia estaba en el hospital y su padre, se había olvidado del encuentro con su supuesto padre, no podía llamarlo aún, debía esperar. Acabada su última clase salió del salón y se dirigió a su casillero donde Kathleen y Kevin la esperaban y por lo que parecía de veían molestos.

-Hola- dijo la castaña mientras abría su casillero
-¿Hola? ¿Hablas en serio Summer?- dijo Kevin con los brazos cruzados y el ceño fruncido
-Veo que están molestos y no sé ¿por qué?
-Tal vez porque nos dejaste plantados en el almuerzo- se quejó la rubia viendo que su amiga sacaba otra mochila de su casillero- ¿y eso?
-Es para Liv, iré a verla. Oigan lo siento, estuve un poco distraída
-¿Cómo está?
-Está mejor, me quedaré con ella toda la tarde mientras Elliot va a descansar
-Bien, oye saluda a Liv de mi parte
-Lo haré Kath, ¿y tú?- miró a su amigo- ¿sigues molesto?
-No, solo no te aisles
-No lo hago
-Te llamé anoche y no contestaste tuve que molestar a Kathleen para que me dijera lo que pasaba
-Okey, no volverá a pasar. Ya debo irme, hablamos luego

Huyendole Al Amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora