Huyendole Al Amor

Capítulo LXVI

-Entregué las muestras al laboratorio, solo hay que esperar
-¿Cuánto tiempo?
-Como dos semanas, tenemos un caso algo complicado y según lo que me dijo Dimitri tienen retraso en algunas muestras
-Bien- se pasó la mano por el rostro, debía esperar dos largas semanas para saber si Summer era o no su hija, la espera sería una agonía
-Oye, le pedí como favor que le diera prioridad, puede que no tengamos que esperar tanto. Solo... Liv que le vamos a decir si...
-No lo sé. No he tenido cabeza para pensar en ello, hasta hace un momento estuve con asuntos internos y Cragen tiene mi arma, otra vez
-Liv volverás a tenerla, pero ahora la prioridad es otra
-Eso lo sé, y tengo miedo- subió sus piernas al sofá y las abrazó, mientras Brian la rodeaba por los hombros
-Hallaremos la manera de salir de todo esto, solo... debemos estar preparados, para lo que sea.

***

-No puedo creerlo Summer

-Shhh, baja la voz- miro a su alrededor- no quiero que se entere toda la ciudad
-Esta bien, esta bien. Pero cómo pudiste robar ese archivo
-No lo robé... lo pienso devolver- su voz se asemejó a la de una niña pequeña al ser pillada con dulces que no debía comer- es un préstamo
-Pero tu tía no sabe del "préstamo". Y... ¿ya lo leíste?
-No, aún no. Las cosas han estado un poco tensas en casa, seguimos viviendo con Brian, no he tenido mucho tiempo de estar sola, con eso te digo todo
-Bueno. ¿Te ha vuelto a llamar?
-¿Mi papá?

La joven rubia asintió mientras mordía su manzana.

-Me ha llamado casi todos los días- sonrió ampliamente, de solo pensar en que su papá se preocupaba por ella la hacia felíz- regresa en tres días e iremos a almorzar apenas llegue
-Te veo muy feliz con él...
-No digas pero- hizo una mueca de cansancio
-Pero
-Maldición- susurró
-Sunny no quiero que...
-Él no haría nada para lastimarme- la interrumpió- verdaderamente le importo. Siempre quise un papá, tu papá es increíble y lo tuviste contigo siempre
-Summer
-Es la primera vez en mucho tiempo que me siento en serio feliz y como mi amiga deberías estar contenta por mí

Tomó la carpeta y se alejó mientras la guardaba en su mochila, Kathleen la llamó pero Summer simplemente no quiso escuchar. Entendía la preocupación de su amiga, pero ella debía entender también que era una chica ya grande y que estaba feliz de que su padre la haya encontrado. Era pronto para encariñarse, pero le fue imposible negarse a hacerlo, él era como ella, tenían tantas cosas en común en películas, gustos musicales, libros... con solo mirarlo a los ojos sabía que no mentía cuando le decía que ella era lo más valioso que tenía y que no quería perderla de nuevo.

Guardó la carpeta con el logo de la policía de Nueva York en su casillero, escondido entre algunos libros y pegado a la puerta metálica vio algunas fotos, una de ella con su mamá y Liv. Su mente se preguntaba por qué su mamá no lo mencionó, acaso se avergonzaba de que él estuviera en prisión, o pensaba que ella se avergonzaría de saber que su padre era un recluso; bajo esas fotos estaba una reciente de ella y su papá, sus ojos le aseguraban que él moría por conocerla y ser parte de su vida. Desvío su atención a su amigo que acaba de llegar, la puerta de su casillero no la dejaba verlo bien, hasta que él la cerró y entonces lo vió. Kevin tenía el pómulo amoratado, Summer se asustó y se acercó a él.

-Kev... tu mejilla, ¿qué te pasó?- extendió a la mano a la altura del rostro de él, pero no se atrevió a tocarlo, no había mucha hinchazón, pero estaba segura de que aún era doloroso
-Me caí de la bici
-Kevin...
-Summer, déjalo. No es nada

Cargó su mochila en el hombro y caminó por un costado suyo. Todas sus alarmas se encendieron, por un momento su mente hizo un listado de las veces que lo había visto golpeado o delicado y ahora, ese cambio de actitud, alguien estaba golpeándolo; y la disyuntiva era, involucrarse y tratar de ayudarlo, o ignorarlo.