Huyendole Al Amor

Capítulo VI

Preguntas, respuestas vagas, preguntas que no sabía cómo responder ya que su mente dibagaba y se perdía en el gris oscuro de las paredes de tabiques. ¿Cómo podía concentrarse con todo lo que giraba en su cabeza? ¿Cómo responder sin romperse en llanto? Dos horas encerrada con la detective Eames, que había sido paciente con Summer, algunos minutos más y el interrogatorio había terminado.

Mientras Olivia hablaba con el detective Goren y su mente iba y venía pensando en como esto estaría afectando a Summer y en como le afectaría si le contara toda la verdad.

-Olivia vamos sabes que debes decirme todo o tendré que arrestarte
-Robert sabes que hay cosas que no son fáciles de hablar
-Lo sé pero si sabes algo que quizá pienses que será irrelevante o...
-Podría ser... Hay alguien que podría... Haber sido quien mató a Amelia...
-Dime

Apuntó todo lo que Liv dijo y luego la dejó ir junto con Summer; Olivia debía volver a la unidad por lo que dejó a Summer en casa, pero antes de irse necesitaba hablar con ella.

-¿Cómo te sientes?
-Es difícil adaptarse a saber que ya no está- se sentó en el sofá acomodando un mechón de cabello rizado hacia atrás de su oreja
-Sé que es difícil perder a alguien...
-¿Sentiste lo mismo cuando murió tu mamá?- la miró y al ver que Olivia no decía nada se maldijo haber hecho esa pregunta
-Pues sí- se sentó junto a ella- pero con el tiempo te das cuenta que mientras la recuerdes ella siempre estará contigo, además de que desde donde quiera que esté estará velando por tí para asegurarse de que estés bien- acarició su mejilla- y de que no te deje subir a una motocicleta- bromeó

Le había sacado una risita, era un gran avance, luego de darle un beso en la frente de despedida y asegurarle que llegaría temprano para que cenaran juntas se fué.

Elliot había aprovechado el almuerzo para ir por sus hijos de la escuela almorzar con ellos y dejarlos con la niñera, pasaría con ellos el fin de semana y el siguiente se irían con su abuela (madre de Kathy) en el almuerzo había aprovechado de platicar con ellos para saber cómo estuvo su día y Kathleen como siempre no dejaba de hablar de las clases y como Summer le caía de maravilla.

-Papá- corrió hacia la puerta casi tropezando, sólo para hablar con su padre- antes de que te vayas... podrías hacerme un favor- dijo tímida
-Claro cariño dime que necesitas
-Es sobre Summer- empezó a jugar con sus dedos un poco inquieta y con la mirada baja
-¿Qué pasa con ella? ¿Todo está bien?- cierta preocupación se hizo notar en su rostro, era raro para él ver así a su hija y eso le preocupaba
-Es... es que está triste por lo que está pasando con... el caso de su mamá, se que no debería porque podrías meterte en problemas y es lo que menos quiero- empezó a hablar rápido de tal manera que empezaba a marear a Elliot-, eres mi papá y te amo, pero Summer me preocupa y no se si...
-Cariño! No le des tantas vueltas- sonrió
-¿Podrías seguir pendiente del caso? Sé que la tía de Summer no puede debido a la cercanía pero tú puedes y...
-Cariño nada me impedirá seguir el caso, tu no debes preocuparte por ello sí- besó la frente de su hija y la abrazó fuerte
-Pero Summer es mi amiga y me preocupa porque esto le está afectando aunque ella diga que lo está sobrellevando bien, ella sufre
-Descuida cariño todo estará bien y muy pronto podrá tener tranquilidad en su vida

Dándole un último beso en la frente y luego de despedirse de los gemelos emprendió marcha a la estación al llegar se detuvo un momento a pensar en lo que le había dicho su hija, aunque era muy joven solía hablar como adulta. A veces le impresionaba lo mucho que se preocupaba por otros y la madurez se sus palabras, estaba orgulloso no cabía duda. Antes de entrar algo llamó su atención, una motocicleta Harley negra se acercaba, por alguna cósmica razón no podía despegar la vista; no era fanático de las motocicletas pero había algo en esta. Y lo había descubierto era su compañera la que manejaba ese brillante vehículo cromado, ¿sorprendido? Claro que sí.