Tres

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Mew siguió cortando leña y mirando de vez en cuando a aquel tenaz maestro, hasta que finalmente Saint le avisó para la comida.

El granjero se fue a comer, tras soltar un molesto resoplido.

—¿Acaso ese hombre no se irá de aquí?

El moreno miró su reloj y siguió dando vueltas en la entrada de la propiedad con el móvil en la oreja.

-¿Dónde mierdas está James?-refunfuñaba pues escuchaba el contestador del agente desde hacia varios minutos.

Mientras en la cocina los cuatro hombres estaban sentados a la mesa disfrutando del asado que había preparado el castaño.

....-Pues, ¿en serio vas a dejar a ese pobre hombre ahí solo?, el sol es muy fuerte y tendrá hambre....No tiene agua, deberías hablar con él-habló Zee preocupado.

-Ya hemos hablado—dijo el granjero molesto—… quiere comprar la escuela y ya le he dicho que no está en venta.

-Pero, ¿por qué eres tan terco?, ¿De qué sirve la escuela cerrada?, ¿No piensas en que las familias tienen que gastar más, pudiendo ir a la escuela de Jan...

Mew dio un fuerte golpe en la mesa.

-¡No te atrevas a nombrarla!, ¡lávate la boca para pronunciar su nombre, Off!-gritó este para luego levantarse e irse.

-¿A dónde vas?,aún no has acabado... oye, tienes que alimentarte, no todo es el trabajo-dijo Saint intentando detenerlo.

El granjero dio otro golpe en la mesa.

-¡Que os quede claro a todos!, ¡está es mi casa!, ¡esa es mi escuela!, ¡y ésta mi vida!...¡no necesito vuestros malditos consejos, ni acepto órdenes tampoco!, ¡y si no estáis conformes, podéis largaros cuando queráis!, ¿Está claro?.

Los tres hombres asintieron y tras resoplar de nuevo, este cogió una botella de whisky del armario de la despensa y salió de allí, mientras estos negaban con la cabeza y luego siguieron comiendo en silencio.

Mew se bebió la botella de whisky en el granero, mientras lloraba abrazado a sus rodillas, él no quería haberles hablado así a sus amigos pero no podía más, nadie parecía entender su dolor.

Para él tener la escuela era una tortura, sus hijos eran dolor y vivir sin su esposa era un continuo sufrimiento que nadie respetaba.

Tras un buen rato escuchó un quejido y salió a ver que pasaba, entonces miró hacia todos lados y en la entrada de su granja vio al moreno tirado en el suelo.

Este echó a andar fuera del granero tambaleándose hasta que consiguió llegar a él, Gulf no se movía pero estaba vivo, su cara estaba ardiendo y sudaba mucho.

-¡Zee!, ¡Off!, ¡Saint!-gritó.

Los hombres acudieron veloces.

-Parece que le dio un golpe de calor, respira con dificultad, ¡Ayúdame!, ¡llamémoslo dentro!- exclamó Zee muy preocupado tras examinarlo.

Entre Off y este lo cargaron, mientras el castaño miró duramente a Mew, el cual apenas se tenía en pie.

-Rápido meterlo en la ducha, hay que refrigerar su cuerpo... Yo llamaré al médico— les ordenó Saint cogiendo el teléfono al entrar en la casa tras ellos.

Gulf se movió al sentir el agua en su cuerpo pero no abrió los ojos, mientras que Mew miraba la escena desde la puerta, entonces empezó a sentirse mal y preocupado, ya que si este se moría en su propiedad sería por culpa suya.

Era un día de mucho calor y él lo había dejado bajo este por no querer atenderlo, ni siquiera le había ofrecido algo de beber o de comer al ver que no venían a buscarlo, sus amigos tenían toda razón, el pobre desconocido estaba así por su soberbia.

Luego de esa ducha fría, los chicos lo tumbaron en la cama del granjero pues era la más cercana y le pusieron uno de sus pijamas aunque le quedaban enormes y luego esperaron al médico, el cual llegó poco después.

Tras varios cafés, Mew ya más despejado y era observado por sus tres amigos, los cuales permanecían en silencio preocupados por aquel ser humano inconsciente tendido en la cama.

El médico por fin salió de reconocer a Gulf.

-Efectivamente ha sido un golpe de calor pero además este chico es diabético y no tenía su medicina cerca....Tampoco ha ingerido nada de alimento ni bebido nada durante muchas horas, por eso ha sufrido este desvanecimiento... Esto es muy severo, la realidad podía haberse muerto.

-¿Y entonces doctor?-preguntó Saint muy apenado.

-Afortunadamente le he administrado insulina a tiempo y algo para la fiebre... Está reaccionado favorablemente pero está muy débil...cuando despierte debería comer algo y descansar mucho....ah y no dejen que se levante ni haga esfuerzos en varios días.

-Gracias doctor, le llevaré algo rápidamente- dijo el castaño yendo a la cocina.

El doctor se fue y Zee y Off se fueron a seguir con el trabajo, mientras que el granjero jefe se quedó sentado en la mesa de la cocina mirando a la nada, sin saber muy bien que hacer.

El doctor se fue y Zee y Off se fueron a seguir con el trabajo, mientras que el granjero jefe se quedó sentado en la mesa de la cocina mirando a la nada, sin saber muy bien que hacer

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8. La granja Suppasit -Mewgulf, Zaintsee y Offgun TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora