11. Acercamiento

3.8K 166 3
                                    

Por fin llegamos a mi casa, y ellos suben también. Nos dejamos caer los cuatro en los sillones. Estamos cansadísimos.

– ¿Te ha gustado Bilbao? – pregunto a mi cuñado en italiano.

– è bello. Mi sono divertito moltissimo, soprattutto grazie alla bellissima guida turistica che ho avuto. – [Es precioso. Lo he pasado muy bien, sobre todo por la guapa guía turística que he tenido.]

– ¿Qué dices de bellísima? – pregunta mi cuñada mosqueada.

Ainhoa no es tan tonta como parece.... Pero yo reacciono y contesto rápido.

–  Dice que la ciudad le ha parecido bellísima. – falsamente traduzco a mi cuñada ante la sonriente mirada de Addriano.

– Me encanta que te guste mi ciudad, amore – dice mi cuñada besándole.

Llaman al timbre y me levanto para abrir, estoy saturada de verlos comerse la boca.

– Hola – me dice Asier.

– Pasa, Asier – grita Pablo desde el salón.

Con burla, como si fuese el mayordomo de una mansión, le invito a pasar con una reverencia.

Después de que Asier babee un rato por Ainhoa y mire con cara de asco al italiano, mi querido maridito dice que ellos tienen una partida muy importante y que se tienen que ir a jugar a la play. Y avisa a navegantes, como mañana es día festivo, estarán hasta muy tarde jugando. Así lo ha dicho. Sin ningún pudor.

– Partida? – pregunta el italiano

– Si, suona alla playstation con il suo ragazzo – [Si, él juega a la Playstation con su novio] – digo haciendo rodar los ojos.

– Con il suo ragazzo? – me pregunta divertido.

– Stavo solo scherzando. Ma passi più ore con lui che con me, quindi più o meno . – le digo que es una broma, pero que realmente pasa más horas con su amigo que conmigo.

Nos reímos los dos a la vez.

– Oye, os voy a prohibir hablar en italiano, ¡eh! Así no nos enteramos de nada los demás – dice enfurruñada mi cuñada como una niña pequeña, de hecho, se cruza de brazos y simula hacer un puchero.

Addriano intenta explicarle a Ainhoa que no entiende bien español y se pierde un poco en nuestras conversaciones. Mientras que los tortolitos hablan y los otros dos tortolitos se van a jugar a la play, yo me voy a mi habitación para hacer la llamada diaria a mi hermana.

Después de quejarme como siempre de lo poco atento y cariñoso que es mi marido conmigo, y contarle lo que hemos hecho durante el día, mi hermana me invita a comer al día siguiente a su casa para disfrutarme antes de que empiece a currar de nuevo.

Escucho unos nudillos llamar a la habitación de mi cuarto. Me levanto para abrir y corroborar que es Addriano. No podía ser otro, porque ni Pablo ni su hermana llamarían antes de entrar. Y Asier no se le ocurre entrar a esta zona de la casa. Al menos cuando estoy yo.

Al ver que estoy hablando por teléfono se para, pero le hago gesto de que puede pasar.

– Ok, Mel. Mañana nos vemos entonces. Te quiero – me despido de mi hermana.

– Mel. ¿Qui es? – me pregunta con sonrisa pícara.

– Mel, es mi hermana, Melisa. –  aclaro mientras me siento en una butaca de mi cuarto.

– Ah! – dice riendo.

– Ainhoa? 

– Se fue a sua casa a por piyama. Di dormir aquí esta note.

Conociendo a mi cuñado ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora