Capítulo 20

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La luna brillaba intensamente en medio de la noche, no lo había notado antes, no lo habría imaginado. Ni siquiera recordaba cuando había sido la última vez que se detuvo para mirarla, cuando fue capaz de darse cuenta de lo deslumbrante que era ¿No era tonto? Los seres humanos eran criaturas que se movían frenéticamente por la vida y a menudo podían pasar por alto lo que ya estaba ahí.

Era realmente interesante. Kuroo se había detenido en ese momento para darse cuenta de eso, para maravillarse y sentir, una vez más, la curiosidad de un niño ansioso que había encontrado algo que quería entender.

— Kuroo ¿Qué estás haciendo ahí parado? ¿La fiesta terminó tan pronto? A penas es media noche.

Giró sintiéndose a un distante, y en lo alto de la escalera, observó la delgada figura del chico castaño cuya voz lo había llamado con cautela y curiosidad — Todos deben estar en el salón todavía ¿Vas a unirte?

Yaku frunció el ceño, se había detenido un par de metros antes de alcanzar la escalera, lo miraba con recelo, sin embargo no parecía querer atreverse a acercarse demasiado, solo lo miraba y Kuroo hizo exactamente lo mismo, en silencio y a través del tiempo que fluyó como si fuera cada vez más pesado y lento sin razón — ¿Hay algún motivo por el que estés aquí y no en el salón con Kenma? Él organizó todo esto para ti ¿Recuerdas? ¿Por qué lo dejaste solo? ¿Discutieron?

— No lo hicimos — el ceño de Yaku se profundizó aún más ¿No fue una respuesta que le complaciera acaso? — No me estaba sintiendo bien, no creo que en este momento sea buena idea que vuelva ahí; me harías un favor si se lo hicieras saber a todos.

Yaku apretó los labios. No debería ser extraño que encontrara esto sospechoso ¿Verdad? La mansión estaba prácticamente vacía a esta hora de la noche y la atención de todo el mundo debía estar en el gran salón. La presencia de una persona aquí, de Kuroo entre el silencio y la oscuridad, tan repentinamente, era demasiado irregular. Suficiente como para que quisiera dudar.

¿Qué estaba haciendo? Su aspecto era extraño ¿No estaba más sereno de lo normal? Tuvo la impresión de que era tranquilo cuando notó su presencia hace un momento; solo estaba ahí, en lo alto de la escalera, observando a través de la ventana, sin embargo él aire le pareció inusualmente pesado a medida que se acercaba...hasta que sus piernas se negaron a hacerlo más y fue más difícil respirar ¿Estaba molesto por algo?

— ¿Qué está mal, Kuroo? ¿Sucedió algo? ¿Discutiste con él?

— No me estoy sintiendo bien — repitió él, su voz era lo suficientemente suave como para que pareciera un susurro gentil, sin embargo las sombras que lo acompañaban fueron tan frías como la atmósfera — ¿Puedes decírselo por mí? No creo que pueda volver ahora.

Yaku se sintió repentinamente indignado. Apretó los puños. Este bastardo no estaba pidiéndole un favor, era una maldita orden ¿Cómo se atrevía a tratar de hacerle esto? ¿Quién demonios creía que era él? ¿No tenía derecho a tratarlo de esa manera? ¿No podía usar en él esas malditas feromonas? ¿No tenía ningún maldito derecho?

— ¿No me escuchaste? No me estoy sintiendo bien, quisiera ir a mi habitación ¿Puedes hacerme ese favor?

Ese no parecía un maldito favor. Yaku apretó la mandíbula y maldijo en silencio a los impulsos que lo empujaron a retroceder en su ira, esos que le dijeron, a gritos, que seguir adelante sería un error terrible ¿Qué estaba sucediendo con este tipo? No sé veía como normalmente, el aire aquí era más pesado, era espeso y lo suficientemente intoxicante como para que ya comenzara a tener dificultades para respirar, para que comenzara a sentirse aturdido.

The Only One [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora