The Only One [Omegaverse]

Capítulo 51

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Estaba lloviendo otra vez, el cielo era tan gris que realmente no parecía que fuera a detenerse pronto. Caía constante, se esparcía detrás de la ventana en medio de una brisa tan lenta como el tiempo que fluía un paso pausado detrás de otro. No era interesante, tampoco era entretenido o tenía algo especial. No le gustaba, sin embargo, en este momento, Tsukishima en realidad no podía dejar de mirar en silencio. Era demasiado extraño, como si estuviera y no al mismo tiempo, no podía sentir, sin embargo su corazón todavía estaba llorando, tan profundamente, tanto como el vacío y la tristeza que lo estaba consumiendo. 

— ¿Señor? — Tsukishima parpadeó, sin embargo no tuvo la energía necesaria para prestar atención a quien sea que estuviera en la misma habitación que él y emitió un suspiro que fue casi imperceptible incluso para él — ¿No se siente bien? ¿Hay algo que pueda hacer por usted?

Cerró los ojos. Podía irse o podía quedarse, ellos se lo dijeron, pero realmente no le importaba demasiado si era una verdad o un tonto engaño, ya había agotado lo poco que le quedaba antes. No podría tratar de pelar o hacer nada más que esperar, porque ahora estaba vacío, era un ser humano sin valor y estaba cansado, tan profundamente cansado que su propio destino dejó de importarle.

Tanto que solo deseaba que terminara de una vez.

— Tal vez deba tener algunas preguntas — la persona que lo había llamado antes volvió a hablar, su voz tan clara y elegante como el agua estaba llena de suave cortesía, sin embargo para Tsukishima fue como si se disolviera en la nada — El amo me pidió que lo llamara cuando despertara, a él le gustaría reunirse con usted para poder aclarar su situación...le pide que no se asuste, quiere que sepa que le ayudará si lo necesita.

— Supongo...

¿Ayuda? Los labios de Tsukishima formaron una sonrisa amarga ¿Cuánto de eso podría ser realmente cierto? Sus recuerdos todavía no eran completamente claros y había lagunas sobre lagunas vacías, sin embargo sabía que ya había escuchado algo como eso antes y había sido lo suficientemente estúpido como para creer ingenuamente que podía creerlo. Tuvo suficiente de todo esto, de todo, absolutamente de todo. Ya no importaba, no tenía ningún sentido.

Ni siquiera necesitaba preocuparse más por esto, por lo que fuera que pudiera o no suceder o la clase de persona que podría llegar a ser el hombre que lo había sacado de ahí, así que ¿Qué sentido tendría mantenerse a la defensiva?

Al final de cuentas solo podía hacer lo mejor posible para enfrentarlo. Se levantó tan pacientemente como pudo para sentarse, la cama suave amortiguó el peso de su cuerpo y las mantas cálidas le ofrecieron un poco del calor que había perdido. Prestó atención a la habitación, a lo amplia que era y lo tranquila que parecía a pesar de que no podía reconocerla en absoluto y trató de pensar en la persona que lo había sacado de ese restaurante y probablemente traído hasta aquí, sin embargo no estaba seguro de que se hubiera preocupado demasiado por reconocerlo o por echar más que un vistazo superficial a su apariencia.

Su corazón y su mente eran un caos, estaba demasiado asustado y apresurado por escapar y entender lo que estaba sucediendo, sin embargo en este momento deseó no haberlo hecho jamás...deseó que hubiera sido tan fácil como desaparecer en la nada.

— Dijeron que estabas despierto — la persona que empujó la puerta de la habitación carraspeó y se movió pacientemente a través del espacio hasta quedar frente a la cama — Parece...— carraspeó una vez más para llamar su atención y una sonrisa de esos labios llenos y rosa hizo aún más impresionante a un rostro que ya era increíblemente atractivo — Te ves más tranquilo ¿Has descansado bien?