¿Solamente amigos? (Draco Malfoy)

15

— Un placer, yo soy Enzo beaulieu.

— El placer es mío — tomé otro trago de vodka—. Cuéntame, ¿cómo va Beauxbatons?

— He sido expulsado— confesó, tomando un pequeño trago.

— ¿Expulsado? ¿Por qué? — Pregunté curiosa.

— Bueno, algunas bromas que hice, no le hicieron gracia al director y, bueno, decidieron que me expulsarían.

— ¿Y ahora qué haras?

— Asistiré a Hogwarts.— dicho eso sonreí. Bien, no lo conocía pero tenía pinta que follaba bien.

— Puesssss.... bienvenido a Hogwarts colegio de Magia y hechicería. ¿Puedes... puedes pedirme algo más fuerte? Esto ya no lo siento.

— Algo más fuerte... déjame pensar — se hizo el pensativo —. Bien, ya lo tengo. Hey — se dirigió al Joven Mago que nos atendía —, una ronda de tequila, por favor.

aquel mago asintio y aparecieron tres vasos de chupitos llenos de un líquido blanco, transparentes, junto con un par de limones cortados y un poco de sal.

— ¿Qué es esto? - pregunte curiosamente.

— Es una bebida muggle, pero decidimos ignorarlo, solo por el hecho que es una bebida muy fuerte. ¿Quieres embriagarte? — preguntó.

— ¡Quiero embriagarme! —Exclamé.

— Bien, me tomaré uno para enseñarte como va la cosa — dijo, cogio su varita e hizo que los tres vasos juntos los limones y la sal descendieran en el aire —. Sígueme.— ordenó e hice lo que me dijo.

comencé a seguirlo mientras observaba los pequeños vasos y los limones en el aire siguiéndonos. Llegamos a un lugar un poco más privado, pues no había tanta gente. Enzo miro a los lados y se acercó a mí. Unto un poco de sal a un lado de su muñeca, cogio el limon, se acercó a mí, exprimió de este un poco sobre mi cuello. Lo miré atónita. Él se lamió la mano, después pasó la lengua por sobre mi cuello y se llevó el vaso a los labios tomándolo de un solo trago.

Abri los ojos, sin entender lo que había pasado. Y sentí como mis panties comenzaban a mojarse, definitivamente me gustaba este trago.

— Es tu turnó — se acercó a mi oreja y susurró —. Nott.

Hice lo mismo que él, unte un poco de sal sobre mi mano, cogi el limón y él ladeó la cabeza a un lado, exprimí este sobre su cuello. Lamí la poca sal que había en mi mano, me acerqué lentamente a su cuello y, pase la lengua sobre su cuello. Después me lleve el vasito a los labios tomando todo de un trago.

Joder, era fuerte, pero me gustaba. Tomé a Enzo del brazo y lo lleve a la pista a de baile. Comencé a moverme seductoramente mientras él tomaba entre sus manos mi cintura, acariciando y apretándome sobre él, sentí su bulto sobre mi muslo. Entonces Enzo me miro a los ojos profundamente y yo lo miré a él, sin avisar atrapo mis labios en un beso desesperado, chupando mi labio inferior y mordiéndolo. Deje salir un gemido inaudible y aprovecho para meter su lengua dentro de mi boca, saboreando todo mi sabor, jugando con mi lengua, envolviéndola con la de él. Sin despegarnos buscamos una habitación vacía, y la encontramos, completamente vacía, para saciar nuestro deseo. Enzo me acorraló sobre una pared, pegándose a mi cuerpo, tocando mis muslos, posando sus manos sobre mi trasero y apretándolo, bajo a mi cuello dejando pequeñas mordidas y chupándolo. Deje escapar un pequeño gemido.

— Quiero que gimes más fuerte — dijo Enzo entonces murmuró muffliato y volvió a besarme —. Dime, Nella, ¿cómo te quitaremos ese vestido?

En el centro de la habitación había un gran sillón, entonces lo empujé hacia el, y comencé a quitarme el vestido seductoramente. Cuando llegue al corsé, él se paró y se acercó a mi.