¿Solamente amigos? (Draco Malfoy)

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POV's Draco malfoy.

Entré a la habitación, con unos pantalones de chándal negros, con la playera en mis manos. Vi a Antonella que estaba sentada sobre la cama, con la mirada perdida. Me acerqué a ella y me senté sobre la cama.

— ¿Cómo te sientes?

— Bien, eso creó.

— Mañana hare que la expulsen. Mi padre se enterara de esto.

— Draco — Nella posó su mano sobre mi hombro —, no es necesario.

— Nella, te ha dejado desmayada en medio de la sala común.

— No importa, en serio.

— Bien. ¿Tienes hambre?

— No, me siento un poco fatigada.

— Ven aquí.— me acoste y Nella se acostó sobre mi pecho, posando su nariz sobre mi cuello, aspirando profundamente.

— Joder, hueles tan bien.

Comencé a acariciarle el muslo, de arriba a abajo mientras Nella empezaba a besar mi cuello, lentamente, lamiendo y dejando pequeños besos sobre el.

Comencé a subir la mano hasta su entrepierna, tocándola lentamente por sobre su ropa interior. Escuché un pequeño gemido de Nella, aceleré un poco mis movimientos, ganándome otro gemido de ella.

Volteé a verla, tenía los ojos cerrados y los labios un poco abiertos.

— ¿Te gusta? — le pregunté susurrando.

Nella asintió con la cabeza.

— Quiero hacerte tantas cosas.— le dije mientras seguía tocándola.

— ¿Ah, si?

Asentí.

— ¿Como cuáles?

— Quiero entrar en ti lentamente, y sentir como tus paredes se aprietan alrededor mío. Quiero besarte de arriba a abajo...— Nella me interrumpió.

— ¿Y por qué no empiezas ya?

— Porque estas adolorida, Nella.

Ella atrapó mis labios en un pequeño beso, bajando su mano a mi entrepierna, dando un pequeño apretón.

Gruñí.

— ¿Te gusta esto? — comenzó a frotar mi entrepierna.

— Todo lo que tú hagas me gusta.— respondí.

Nella se dio la vuelta quedando encima de mi, mirándome directamente a los ojos. Se humedeció los labios y comenzó a besarme el cuello, dejando pequeñas marcas sobre el.

— Nella...

— Shhh, déjamelo a mi.

Nella comenzó a frotarse sobre mi entrepierna, lentamente.

Comenzó a abrir mi pantalón. La ayude y me lo quité. Bajó dejando besos por mi abdomen hasta llegar a mi entrepierna. Me miró una vez más y bajo mis bóxers lentamente, dejando salir mi pene, el cual estaba duro y adolorido, anhelando por estar dentro de ella.

Puso ambas manos sobre este, frotándolo de arriba a abajo, lentamente. Deje salir un jadeo, entonces Nella se lo introdujo a la boca, bombardeándolo rápidamente, ayudándose con ambas manos. La tomé del cabello, entrando más profundo en su garganta. Sentí como Nella se atragantaba. Poco me importó, tenía que terminar lo que comenzó.