¿Amor o amistad? Segunda parte. (Super Junior-Yaoi)

Capítulo 93 "El comienzo"

 

93. El comienzo

 [Años antes… Cuando todo empezó… ]

(Donghae)

Al abrir los ojos, a causa del sonido del despertador, gimoteé. Estaba cansado. Quería dormir un poquito más… Solo cinco minutos… Pero entonces me acordé que no podía. Tenía que ir a despertar a Eunhyuk a su cuarto. Era mi ritual de cada mañana. Si no lo hacía, no empezaba el día con buen pie. Era extraño, pero era cierto. Así que me levanté y corrí de puntillas hasta su cuarto. Entré y me metí en su cama, abrazándome a su espalda. Ya hacía casi tres años que tenía ese ritual.

Lentamente, llevé mi mano hacia su estómago, bajo su pijama, y lo acaricié tranquilamente. Jugueteé con su ombligo un poco, metiendo mi dedo índice y al final, bajé mi mano hasta su entrepierna, dejándola sobre el pijama sin moverla. ¿Por qué hacía eso? Notaba mi corazón acelerarse llegados ese punto. Eunhyuk nunca se había quejado, quizá eso era lo que me ponía nervioso. Ver que no me pedía que dejase de hacerlo. Y encima, es que se excitaba… Y yo también. Pero no hablábamos de ello. Tan solo le daba un beso en la mejilla y le susurraba:

-Hora de levantarse hyung.

Entonces, como cada mañana, Eunhyuk respiró profundamente y entreabrió los ojos. Yo, me levanté y me fui al cuarto de Siwon. También a él lo despertaba, pero en realidad, iba a despertarle porque sabía que si veía a Siwon se me bajaba la erección de golpe por el miedo a que él se diese cuenta. Siwon era muy creyente y eso me hacía poner los pies en el suelo. Frenar mis pensamientos que se desbordaban cada mañana. Frenaba mi corazón… Aunque algo me decía, que aquello iría mucho más lejos…

Tras ir a despertar a Siwon, fui al comedor y saludé a Hangeng, que ya se había levantado.

-Buenos días Hangeng.

-Buenos días Donghae.

Eunhyuk estaba en el suelo, sentado, así que me tumbé y apoyé mi cabeza en su regazo.

-Hoy tenemos el día libre. Podríamos hacer algo.-comenté.

-Claro. ¿En qué piensas?

-Hay una película en el cine que quiero ver.

-Vale. Pues vamos. ¿Te apuntas Hangeng?

-Claro.

-Ahora se lo decimos a los demás cuando se levanten. –me estiré para desperezarme y bostecé.

-¡Heechul el desayuno!-gritó Hangeng.

No escuchamos ninguna respuesta.

-Voy a hacer que se levante. Id desayunando vosotros. –nos dijo.

-Ok.

Miré hacia arriba, hacia Eunhyuk, y sentí algo extraño. Al mirarlo, sentía que él, iba a significar algo grande en mi vida. Lo quería… Mucho. Era mi mejor amigo. Aunque… Al mirarlo en ese momento, lo que sentí, fue mucho más. Pero meneé la cabeza. Tenía que estar loco. Él y yo, seríamos siempre amigos. ¿Qué otra cosa podríamos ser si no?