"Prometí odiarte. Odiar tu apellido, tu hogar, tu familia. Prometí vengar a mis padres y a mi ciudad.
Pero te veo, me sonríes, me das tu cariño y eso es la última cosa que quiero hacer, Ángela".
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—Thanos va a obtener esa Gema.
—No creo que eso pase. —Steve murmuró.
—Ahora están en Wakanda. Thanos no obtendrá más que sangre y polvo.
—Bien... tenemos sangre de sobra. —La mujer alzó su brazo.
Estaban frente a los miles y miles de criaturas que empezaban a entrar hacia Wakanda.
Ángela sintió su estómago revolver pero la mano de Pietro a su lado la hizo sentirse más segura, a pesar de que tendrían que abrir la barrera.
—La hicimos enojar. —Nat habló.
—Esto será el fin de Wakanda.
—Entonces será el fin más noble de la historia.
El Rey caminó unos pasos al frente que todos. —¡Wakanda por siempre! —Gritó haciéndola exhalar por la boca, empezando a levitar una vez que todos corrían hacia los ataques.
—Sin miedo, Ángela. Sin miedo. —Se dio apoyo a sí misma y sus manos hacia atrás la hicieron tomar impulso para volar más rápido
—¡Ahora! —La barrera se abrió dejando a los miles de criaturas extrañas entrar.
Ángela no bajó a tierra, desde arriba lanzaba fuego y lava hacia ellos. —Srta. Stark creo que debería estar abajo. — La voz inesperada de Friday la hizo dejar de hacer lo suyo y fruncir el ceño.
—Grosera. —Susurró y cuando tocó tierra una gran oleada de energía y fuego aventó a cientos de animales lejos de ella.
—¡Oye! Creo que nos vendría bien que hicieras eso por acá. —Una mujer morena le habló señalando a su izquierda con su lanza, donde había miles de esas criaturas.
Ángela rio secamente y asintió hacia ella. Empezó fácilmente a deshacerse de ellos, quemándolos, electrocutándolos y lanzándolos lejos.
De repente, notó como un hombre de cabello largo era golpeado provocando que perdiera su arma, para después estar debajo de un animal mientras intentaba salir de ahí. Ángela lo lanzó fuera de ahí y lo quemó matándolo al instante. —¿Todo bien? —Ángela le ofreció su mano levantándolo, lo reconoció al instante. —Oh... lo siento por... ya sabes esa vez que... quemé un poco tu brazo. Creo que lo merecías un poco, de hecho.— Se disculpó pero el solo la veía confundida, iba a hablar pero por arriba de ellos, vio a Rhodes salir volando lo cual la hizo reaccionar y elevarse antes de que pudiera caer al suelo fuertemente.
