5. Descubierto

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14 de abril de 2020

La clase acabó pronto esa mañana. Terminaron de debatir sobre la importancia de varios autores clásicos y la profesora les dejó marchar con la promesa de que escribieran un comentario para la próxima semana. Agoney sabía que lo dejaría para el último momento así que no le dio más importancia.

Salió del edificio con la cabeza pesada y un dolor instalándose por la zona su frente y sienes. Iba detrás de unos compañeros, quienes reían y hablaban sobre una fiesta a la que pretendían ir ese fin de semana. Se sintió de pronto golpeado por el hecho de que él iba solo y que el curso anterior al menos había mantenido un pequeño grupo, con los que se reunía para hacer trabajos, pero que después de haber faltado tanto lo habían dejado de lado. Podía entenderlo, la vida seguía y no tenían ninguna responsabilidad de haberse preocupado siquiera por él. Pero dolía igual. Y le hacía sentir inútil el no poder hacer nada para arreglarlo, para entablar nuevas relaciones y recuperar el tiempo. Simplemente, no era bueno en eso.

Ya sentado en el autobús que le llevaba a casa, pensó en Raoul. En lo fácil que había sido hacerse amigo suyo, si es que lo eran. Lo rápido que fue coger confianza, entablar conversaciones profundas y sentirse tan cómodo a su lado. Agoney no solía sentirse cómodo con mucha gente y la cosa empeoró con el accidente, pero ahora se veía incapaz de conseguir algo más que el rubio. Y no era que se conformara, sino que no necesitaba más.

Raoul 09:50h

Buenos días Agoney!

Leyó el mensaje que Raoul le había dejado esa mañana y que no había podido contestar todavía. Un poco de la tristeza que sentía apretando su pecho se fue soltando poco a poco, mientras escribía una respuesta al chico.

Agoney 14:50h

acabo de salir de la uni

podemos vernos hoy?

Se fue de la aplicación antes de ponerse a mirar su foto de perfil y echarle más de menos. Puede que sintiera que si lo admiraba mucho tardaría menos en desaparecer, porque alguien como Raoul no podía ser efímero, no al menos para él que siempre sentía que le faltaba algo. No quería acostumbrarse a él, a su voz, a su forma de hablar, a lo bien que le hacía a su autoestima y a su ansiedad las palabras tranquilizadoras que siempre sabía decirle. Porque su corazón era caprichoso y quería a Raoul a todas horas, pero tenía miedo de gastar la sensación de viajar a otro mundo donde no había un tiempo estresante y miles de direcciones que tomar. Porque solo era Raoul, una única dirección y un tiempo infinito solo para ellos.

Raoul 14:53h

Quieres ir al parque?

El de siempre, podemos vernos allí después de comer

Agoney 14:53h

es un plan

un muy buen plan

Se vio a si mismo sonriéndole a la pantalla del móvil, tratando de contener la gran sonrisa que de verdad quería salir, una de sus manos restregándose contra su pantalón con nerviosismo y emoción. Estaba comportándose como un completo niño pequeño que había sido invitado a un cumpleaños. Pero había echado de menos la sensación, el calor en sus mejillas y las hormigas en su estómago que le hacían temblar y querer ocultarse entre sus manos.

Raoul 14:55h

Te espero

Suspiró dejándole un último emoji, siempre queriendo responder cada uno de sus mensajes para hacerle saber que en ningún momento podría pensar en ignorarle.

Seis meses (Ragoney)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora