POV MILO
-Milo... hazme tuya.
Sus palabras me deján aturdido al querer que la haga mía adentro del elevador. Aumenta la fricción y hago una mueca de dolor por la erección que ha provocado. Sin pensarlo agarró su muñeca y la giró para que quedé frente a mi.
-¡Al carajo!- la presiono contra la pared mientras uno nuestros labios.
La besó sin restricciones y me doy cuenta que estamos contra la puerta del elevador, se apoya entre mis hombros y sus muslos sobre mi cadera. Adina sonríe al notar como está atrapada sobre la puerta y mi cuerpo.
Voy subiendo la mano por su pierna levantando la falda de manera lenta pero me detengo al sentir como su zona sensible se encuentra con mi hombría, los pantalones comienzan a molestar y suelto un gruñido por como comienza a morderme el cuello.
Mis pupilas se oscurecen al tocar esa sensibilidad húmeda que se encuentra entre sus piernas, sus bragas las hago aún lado y masageo su clítoris.
-Dios...Milo...más- gimotea y sonrió al ver como cubre su boca avergonzada.
-No debés sentir vergüenza, mi lobita- digo entre sus labios de los cuales me vuelvo adueñar.
Sus manos se deslizan por debajo de mi camisa, extendiendo los dedos sobre mis abdominales, gruño contra sus labios por como pasa lentamente las yemas de sus dedos detallando cada parte.
Nos separamos al oír las puertas de elevador ser abiertas. A tropiezos llegamos al departamento, introduzco la llave y nos adentramos, con un pie cierro la puerta y vuelvo acorralar Adina.
- Tócame...cazador...- me quedó estupefacto por la súplica de la loba interior de Adina.
-Adina...-
-No soy Adina- suelta enojada su loba- soy Lina ¡ahora llévame a tu habitación!
La cargó entre mis brazos, al entrar a la habitación puedo sentir su respiración estremecerse. En eso llega a mi mente que no tengo ni la remota idea de cómo poder tocarla nunca antes había llegó tan lejos con una mujer y temo no poder llegar a complacerla. Salgo de mis pensamientos por como unas manos traviesas comienzan a desabrochar mi camisa.
-Tranquila cachorrita, iremos a mi ritmo- la oí quejarse pero estar en una situación comprometedora se requiere de su atención y estoy dispuesto a que ambos disfrutemos del placer.
Al ver que no tomó la iniciativa, vuelve a poner sus manos sobre la camisa y se deshace de ella rápidamente acariciando mi abdomen. Pasa su lengua sobre sus labios, se quitá la blusa quedando con su sostén de encaje rojo.
En eso lleva las manos detrás de su sostén lo deshabrocha quedando sus tetas al aire libre. Hago que envuelva sus piernas sobre mi cadera, llevándola a la cama y besó sus labios sin en ningún momento despegar mis ojos de los suyos quienes reflejan deseo.
De manera ágil me deshice de su falda dejándola en bragas que son del mismo mismo color de su sostén. Me alejó de ella para quitarme los pantalones quedando solo en bóxer en eso la veo como intenta cubrir sus pechos pero la detengo.
-Eres toda una diosa, nunca ocultes tu cuerpo de mí- bajo a sus tetas y llevó su pezon izquierdo a mi boca.
Comienzo hacer círculos sobre él para después tomarlo con mis dientes, Adina o Lina gime.
-Mi-Milo- jodea.
Dejó de darle atención hasta que consigo dejarlo erecto y hago lo mismo con el otro, sus suaves gemidos son eco en la habitación. Bajo por su abdomen el cual dejó besos y muerdo de manera suave dejando marcas en el, llegó hasta la fina tela de sus bragas bajandolas lentamente y sintiendo su piel como se eriza.
Una vez sin ellas, alzó mi vista y la veo sonrojarse, contempló su hermoso cuerpo y sonrió al tenerla desnuda debajo mío. De forma torpe bajo mi rostro hasta su vagina y pasó mi lengua por sus pliegues para saborear ese dulce néctar.
-Mi..Milo- murmura entre un gemido, pasó mi lengua en su clítoris que se encuentra inflamado por la excitación. Con miedo dirijo dos dedos a su entrada y lo introduzco de forma lenta. Se remueve incómoda y para relajarla succiono fuerte su clítoris, sintiendo como se va relajando.
Muevo un poco mis dedos adentro de ella, aún sintiendo la incomodidad de ambos, una vez que se acostumbra los muevo de manera rápida sintiendo como sus paredes vaginales se contraen alrededor de ellos, llega al clímax con un fuerte gemido gritando mi nombre.
Retiró mis dedos y pasó mi lengua sobre ellos probando su miel.
-¿Qué...fue eso?-preguntó aún con su voz agitada y mejillas ruborizadas.
-Eso mi dulce Adina, fue tu primer orgasmo.
Sus ojos vuelven a ser dorados, al tocar su cuerpo es como si estuviera en llamaradas. Bajo mi mano a vagina y esta más húmedo que la primera vez, beso sus labios con desesperación y muerdo.
Me separó y sus ojos dorados se oscurecen, mi mente se enfría al recordar que no tenemos ningún preservativo. Con pena intentó alejarme pero me lo impide.
-¿Que sucede?- dice mientras lleva sus manos a mi pene erecto.
Gruño, por como le empieza dar atención.
-No tenemos condón- suelto avergonzado.
-Mi cazador, deseo llevar un cachorro nuestro aquí- con su mano libre apunta su vientre.
La miró con sorpresa por el comentario de su loba, se que ella quiere engendrar a nuestro hijo pero que tan si Adina piensa diferente.
Niego.
No puedo permitir que un pequeño sea concebido sin ambos estar de acuerdos. Aparte todavía somos muy jóvenes para ser padres, no me disgusta serlo. Pero no puedo ser egoísta y tomar la decisión por ella y más estando en su primer celo que tal que siempre cuando nos encontramos en esta situación terminemos creando bebés.
-Me encanta la idea- buscó la angelical voz de Adina.
-¿No entendiendo?- digo intentando pensar con claridad.
Las manos de Adina aumentan la velocidad y suelto un gemido. Esa faceta me encanta y sentir el placer que nos hemos brindado hace que nuestra conexión sea más fuerte.
-Hagamos un bebé.
Dicho aquello, cambiamos de lugar ahora ella quedado encima de mi. La sigo con la mirada hasta que llega a mi pene y lo lleva a su boca.
-Adi...Adina serás mi perdición...
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¡Holas mis lindas y lindos lectores! 🥰
Antes de empezar a contarles las tragedias que me han sucedido, le traigo un capítulo que espero que les guste. También les deseo un feliz día del Amor y la Amistad, para aquellas emorad@s les deseo que se la pasen bien con sus parejas y aquellas que quieren con sus amigos igual pero claro deben tomar su precauciones con toda y esta pandemia.
La amistad es lo más hermosa que hay en la vida, pero claro siempre hay que ser cuidadosos a quienes elegimos para que entren a nuestras vidas. En el amor no les puedo decir mucho pero se que también es algo maravilloso sentir aquel sentimiento.
Bueno ahora pasemos a las malas noticias, la universidad me ha tenido como loca con tareas y proyectos eso me ha causado tener un descontrol con mis horarios programados para cada cosa y tener que organizar de nuevo es un poco difícil.
Bueno nos la seguiré aburriendo. Quiero pensar que esta semana por lo menos subiré otro capítulo.
Nos leemos pronto, besos 💋❤
KeylaIveth 🤗
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Prometo Recuperarte (Serie Prometo #1)
Loup-garouAdina Pierce es una beta sorda, su vida se basó en humillación y tristeza, pensó que su mate la aceptaría. Pero no fue así. Para Isaac Campbell fue una maldición al tocarle como destinada una persona con discapacidad. La rechazó sin importarle el do...