I'll do anything for you

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Nada de lo que trató de hacer para animarme ayudó.

Me preparaba a fin de no insultar a todas las personas que estarían en la sala junto a mi mamá, y también para no llorar al verla si estaba muy herida.

Cheryl me acompañó en todo el camino al hospital, le dije que estaría bien si no iba, pero no quiso dejarme sola.

Incluso cuando sabía todas las cosas malas que ha hecho, sabe lo importante que es para mí, y no me dejó pasar por eso sola.

-Pero miren quien se dignó en aparecer -dijo mi tía, haciendo que los demás voltearan a verme aturdidos-. Es increíble lo mala hija que eres, Antoinette, te dignas a aparecer horas después del accidente, y en verdad no...

-Gracias, en serio, ¿puedo pasar a verla? -no esperé su respuesta y seguí a la habitación.

-Alto ahí, jovencita -sentenció mi prima-. No es horario de visita, los que la queremos ver estamos esperando, además, ¿quién es esta mojigata?

-Ella -me acerqué- es mi novia -le di un par de besos si causar mucho escándalo más que sus caras de horror-. ¿Algún problema?

-¡Pecadora! -gritó mi abuela con un rosario en la mano-. En la biblia dice...

-En la biblia dice -interrumpió Cheryl- que no hay que juzgar, y que el reino de los cielos será para aquellos a los que persiguen en nombre de la justicia -se acercó a mi oído-. Ve a verla, yo me encargo.

Al ver a toda la familia abalanzarse con preguntas religiosas me escabullí en la habitación.

Se veía demacrada.

Tomé la tableta que estaba en la mesa de los pies de la cama, fracturas en las costillas, brazo derecho, nariz y casi se quiebra la columna también. Si no se hubiera puesto el cinturón estaría muerta.

Acaricié su mano con temor a lastimarla, tenía todo el cuerpo cubierto de moretones, la última vez que yo estuve así se enojó porque gasté su maquillaje, pero nunca se dio cuenta de que casi me parten la cara a golpes por no dar las respuestas a un examen.

Había llevado una libreta y bolígrafo por si algo pasaba, y algo pasó: no quiero despertarla, no cuando sé que se va a enojar por no poder hablar.

"Sonará como cliché de una mala película, pero esta vez enserio no hay palabras para describir lo que estoy sintiendo.

Me miré ene le espejo esta mañana antes de venir, y pensé en muchas cosas, en ti, en ella, en como será la vida cuando sea adulta; tal vez no tenga sentido para ti ahora, pero hice una promesa.

Un día que quedaste dormida en la sala cuando tratabas de ser sociable y ver una de mis películas favoritas, ni siquiera podías pronunciar bien su nombre, prometí que no te dejaría sola.

Siempre supe que él no sería bueno para ti, eres muy terca para escucharme.

'Esa jodida película no tienen ningún sentido', dijiste cuando desvelaron el robo de las diez joyas del museo, reí. Sé que no tiene ningún sentido, pero se sintió tan bien tener algo que hacer, juntas.

Revisé mi lista de prioridades, ya sabes, cuando la conocí, y estoy más que segura que ese fin de semana que pasamos con ella estuviste de lo más incómoda al verla siendo tan cariñosa conmigo. Y normalmente me molestaría que cualquier persona acariciara mi cabello, o me respirara encima. Pero yo caí por ella, estoy... locamente enamorada.

Esta familia es de lo peor que nos pudo haber pasado a ambas, recuerdo maldecir en voz baja cada que teníamos una reunión familiar.

De pequeña juraba que eran vampiros que se alimentaban de nuestra sangre cuando dormíamos, y lo sigo pensando, por eso no dejo que se metan a mi habitación en ningún momento.

Si te detienes a pensarlo, lo único que nos diferencia a ti y a mí es una sola cosa: lo pusiste a él antes.

Pero sin desviarme del tema, y como prometí, no te dejaré sola. Pero tampoco quiero que hagas referencia a esta carta como algo que escribí.

Sólo di 'game accepted', así sabré que la leíste completa.

Sería sensacional saber que ustedes dos se llevaran bien.

No te quitaré más tiempo, le avisaré a tus amigas que estás aquí.

Agradecida, Toni"

Dejé la carta en la mesa junto a ella y al salir de esa habitación iluminada por mil faroles, la vi, agobiada, con el cabello recogido en una coleta apresurada, descansando la cara en una mano sobre la mesa y moviendo la pierna con ansiedad y expectación de salir de allí cuanto antes.

-¿Qué tienen que ver los apóstoles con todo esto? -arqueó una ceja y sonreí de lado.

-Creo que ya está bien de preguntas -le dije a mi tía y tomé a mi novia de la mano-. Hasta mañana.

Lancé un beso al aire y nos fuimos.

-¿Cómo te fue? -acarició mis dedos.

-Mejor de lo que esperaba -me volví a mirarla-, le escribí una carta.

-Estoy segura de que la leerá, y entenderá lo que le quieres decir -sonrió.

-Gracias -la besé con algo de nervios-, por todo esto -junté nuestras frentes-, es increíble que aguantes este tipo de cosas por mí.

-Haría lo que fuera por ti, cariño -colocó una mano en mi mentón, haciéndome mirarla a los ojos-. Te amo.

-Te amo -no pude evitar sonreír también antes de besarla.

Volvimos a casa, ayudó a lavar mi cabello, aunque ahora pienso que solo fue una excusa para pegarse a mí "involuntariamente".

Me invitó a una pizza y vimos las primeras dos películas de Marvel en orden cronológico.

¿La verdad?, no entendí; pero me dijo que todo cobraría sentido pronto.

También tomó esta iniciativa de abrazarme de una manera para escuchar su corazón y me dice afirmaciones positivas, no evito sonreír cuando lo hace.

No entiendo como puede estar conmigo.

Hace muchas cosas por mí, claro, yo hago mi mejor esfuerzo para que no se canse de mí en un futuro cercano, pero si fuera cualquier otra persona me molestaría.

No ella.

Haría cualquier cosa por ella.

Pero este no es un jodido cuento de hadas.

Es la maldita película en la que cuando todo parece ir bien...

Algo pasa.

Alguien muere.

Y sobre todo, alguien sufre.

Y ese alguien suelo ser yo.

Esa es la única cosa que no ha cambiado en mi vida desde que la conocí.

Pero es la única maldita cosa que querría cambiar.



Aún no es demasiado tarde {CHONI}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora