Aún no es demasiado tarde {CHONI}

Don't forget the little things

Me costaba asimilar que no la volvería a ver.

Solamente deseaba verla, no tenía que estarme mirando, sólo verla y saber que estaría bien.

No pude dormir en el resto del día, mis cosas ya estaban empacadas y la ropa que me pondría estaba perfectamente planchada y lista para irme.

El auto que Cheryl me había dicho ya se encontraba ahí, y el conductor se rehusaba a darme alguna información sobre ella.

Tuve que esperar como estúpida porque el vuelo estaba retrasado y no tenía nada para entretenerme.

Si ella estuviera aquí probablemente me señalaría un objeto y yo haría un relato corto sobre esa cosa.

Pero no lo está.

Y me tenía que hacer esa idea.

Mis libros estaban en la maleta que tuve que despachar hace una hora, y desde el asalto ese día no hemos podido juntar lo suficiente para comprar unos teléfonos.

Bueno, yo. Ella tiene suficiente dinero para mandarme lo suficientemente lejos para no volver a verme en décadas, seguramente ya tiene otro teléfono.

Así que en un restaurante pedí un bolígrafo y unas cuantas servilletas, para hacer algo que no hacía hace mucho tiempo: escribirle al vacío.

A las personas que causaban mi vacío.

Y los demonios en mi cabeza no dejaban fluir las palabras.

Quería decirle lo mucho que la amo, que no importa el tiempo, yo estaré ahí para esperarla y verla triunfar en lo que sea que haga.

También debía decirle lo mucho que me había lastimado cuando me dejó, tenía que dejar salir todo lo que sentía.

Pero simplemente no podía.

La autora se había quedado sin palabras para escribir.

No podía escribirle una canción.

Un cuento.

Una novela.

Nada que me hiciera recordarla.

"Si tienes algo para recordarme, significa que podrás olvidarme", es la única frase de Shakespeare que me decía.

¿Es por esto, querida?, ¿porque todo el tiempo sabías que me ibas a alejar?

Vendería mi alma al diablo para hablar con ella sólo por unos minutos.

Pero ella es el diablo en persona.

Había mandado montones de guardias a vigilarme en el aeropuerto.

Quería asegurarse de que no la encontrara.

No me puedo imaginar como será vivir ocho años sin ella cuando en diez meses lo único que he hecho es adorarla.

La he salvado de lo que más pude.

Pero ella no me salvará a mí.

El subconsciente no me ayuda a mejorar.

Y lo peor es que mi cumpleaños será en un par de días.

Ella prometió estar ahí.

¿Va a ir?

¿Hará un mínimo esfuerzo por esa persona que amó por algunos meses?

¿En realidad me amó alguna vez?

¿Fue todo sólamente un juego para ilusionarme?

¿Una jodida apuesta?

Si fuera una apuesta no estarías en camino a darle un giro de 180° a tu vida inútil.

Quiero saber si está bien.

Debo saber que no se encerrará en su mansión diabólica a disecar cadáveres de por vida.

Sabía que no la volvería a sentir.

A probar...

Toda la vida he tenido que dar despedidas.

A mi papá, dos veces de hecho, cuando se fue de la casa cuando yo tenía siete, y otra vez hace unas semanas.

A mi abuela, que había terminado su tiempo en la tierra mucho antes de lo que me hubiera gustado.

A mi mamá, que por muchas cosas que hizo, jamás mereció morir de esa manera. Morir en general.

Pero nunca estuve preparada para perderla a ella.

Cada persona que se ha ido de mi vida tuvo una razón, y siempre estuvo ahí para reconfortarme, hacerme entender que no era mi culpa.

Y ahora ya no la tengo.

No estuve preparada para perderla.

¿Y si el "hogar" es una persona que ya no está ahí?

Con toda esta mierda en la cabeza, pude encontrar las palabras para escribirle, aún sabiendo que jamás recibiría esta carta.

"Querida, muchas cosas han pasado desde la primera carta que te envié.

Tal vez no estoy pensando con claridad en este momento, pero enserio tengo que sacarme todo lo que siento del pecho, y como no estás aquí para escucharme, de alguna manera recibirás mi mensaje, aunque no leas esta carta.

Sólo te quiero pedir un par de cosas.

Por favor.

Por mí.

No olvides el día que nos conocimos, llevabas toda tu vida en esa escuela y yo era la rara que quería pasar desapercibida, y mientras todos me ignorabas tu eras la única que me observaba.

No te olvides del primer momento en que me hablaste, mis latidos se vuelven más veloces cada vez que lo recuerdo, tu calor junto a mi cuerpo por primera vez.

No te olvides de todas esas cosas que me hacen reír, sé que jamás olvidaré todo lo que te gusta.

No te olvides de los días que estaba triste y me consolaste, era casi siempre al inicio de nuestra relación, y me hacías sentir mejor, siempre.

No te olvides de todas las peleas estúpidas con las que terminábamos reconciliándonos con un helado de limón y cerezas.

No te olvides de las veces que te hacía enojar y como me encantaba hacerlo, tu cara se tornaba del mismo color que tus labios y se me hacía los más tierno del mundo.

No te olvides de como siempre llegabas a despertarme a las tres de la mañana para hacerme cariños en el cabello o ver alguna película porque no me encontraba bien.

No te olvides de como casi muero por encontrarte cuando te secuestraron, nunca olvidaré como me salvaste a mí, salvaste mi vida en innumerables ocasiones sin notarlo.

No te olvides de que eres y serás mi primer amor, por eso la mayor parte de mi corazón te va a pertenecer de por vida.

Solamente... No me olvides.

Sincera, loca, y profundamente tuya, yo".

No escuché que los guardias llevaban llamándome por quince minutos para abordar el avión.

Y me propuse ir por ti en el segundo que ahorrara lo suficiente para volver, sé que harás todo lo posible para que eso no ocurra.

Pero también sé que hay un punto ciego en algo que olvidarás revisar.

No olvidaré las cosas más pequeñas.

Y esa será mi entrada para encontrarte.

Espera por mí.

No te dejaré.

Jamás.