Te Necesito Solo A Ti [TaeGi]

[Capítulo 37]

—“¿Qué sucede cariño”. —pregunto su madre, el omega negó mientras llevaba una mano al pecho sintiendo como su corazón palpitaba muy rápido —“No pasa nada”. —su madre asintió no muy convencida —“Continuemos cariño, no podemos quedarnos aquí” —el omega sonrió y siguió los pasos de su madre.

Su lobo estaba triste al igual que él, al parecer su alfa si tenía ya un omega muy bonito.

La familia Min y Kim se encontraban reunidas en la sala, la señora Kim salió a recibir a su amiga. —“Buenas tardes”. —saludo la omega haciendo una reverencia a los presentes al igual que su hijo, las familias devolvieron el saludo. —“Iré al jardín, ¿me permite?”. —Hoseok pregunto, la señora Kim le sonrió y asintió —“Claro cariño, ve”

El omega rápidamente se dirigió al jardín, se sentía fuera de si el estar dentro de la casa, no porque no le agradaran sino por la presencia del alfa que estaba junto a Jimin.

La verdad que conocía a Jimin y Tae desde mucho tiempo y eran muy agradables y buenos amigos, pero ver feliz a Jimin junto aquel alfa le hacía soltar unas lágrimas.

Sabía que Yoongi y Taehyung eran pareja aunque no los vio cerca, si hubieran estado ahí quizás no se hubiera sentido tan mal pero eso no lo podía asegurar.

Y pensar en su realidad le hizo llorar, se sentó en una de las bancas más alejadas en el jardín.  Escucho pasos pero no quiso levantar su mirada —“¿Te sientes mal Hobi?, ¿le digo a mamá que te haga algo para que dejes de llorar?, ¿Te duele la pancita, que tienes Hobi?”. —y esta vez rompió a llorar al sentir las pequeñas manos de Jimin abrazándole fuerte y por ratitos dejar suaves caricias en su cabello.

Se sintió mal porque por un momento pensó que podía odiar a Jimin, el pequeño omega que solo le había entregado cariño y amor.

—“¿Qué te duele Hobi?” —escuchar la voz de Jimin a punto de llorar, le hizo sentirse peor —“No pasa nada Minnie, solo es, solo son tonterías”. —contesto, dejo de llorar y un poco más tranquilo quito las lágrimas del rostro de Jimin —“Uno no llora por tonterías Hobi, si lloras es porque es algo importante”.  —el omega mayor sonrió negando —“Eres muy inteligente Jimin y muy bonito” —el pequeño omega sonrió al ver sonreír a su mayor —“Tu eres hermoso Hobi”. —y se abrazó a su amigo.

—“Ya no vas a llorar ¿cierto?”. —el omega negó

—“¿Entramos?”. —pregunto el menor, el mayor negó — “Aun no puedo entrar”. 

—“Esta bien, me quedo contigo; ahorita se estará presentando SeokJin a la familia de Yoongi”. —Jimin rio —“Crees que le agradaran?”. —el mayor negó —“No lo sé Jimin”.

El corazón del omega mayor comenzó a latir muy fuerte al sentir el aroma de aquel alfa, estaba demasiado cerca.

—“Minnie, Yoonie te busca”. —escuchar esa voz hace que el corazón del omega por un segundo casi deje de latir.

—“¡Oh si!”. —mira Hoseok sonriendo —“¿Puedes quedarte con Hobi, no se siente bien, por favor”. — el omega pone sus manos en forma de súplica, ve al alfa asentir y sale corriendo hacia dentro.

Hoseok se sentía demasiado nervioso, su vista estaba en las flores no quería ver al alfa por mucho que a su lobo le gustara, no debía pasar nada.

Sintió al alfa sentarse junto a él, nadie dijo algo por unos minutos. —“¿Te sientes muy mal?” —el alfa pregunto rompiendo el silencio, —“¿Tendrás fiebre?, estas sudando”. —el alfa coloco su mano en la frente del omega, el omega al sentir el tacto se apartó rápidamente —“No pasa nada, estoy bien”.

El alfa asintió no muy convencido, su lobo estaba ansioso y feliz por fin había encontrado a su omega.

—“Por fin te encontré”. —

—“¿Eh?”. —

—“Te he buscado por mucho tiempo”. —

—“No entiendo”. —

—“Sabía que el día menos esperado te iba a volver a encontrar y poder conocerte”.-

—“¿Pero?”. —

—“Eres muy hermoso”. —el omega se sonrojo al ver directamente  los ojos del alfa, avergonzado la aparto.

—“Eres mi omega ¿lo sabes verdad?”. —el omega abrió los ojos sorprendido —“Y no te dejare ir”. —el corazón del omega se detuvo por un momento procesando las palabras del alfa.

El alfa tomo una mano del omega dejo suaves caricias mientras observaba los bonitos ojos del omega —“Sientes lo mismo ¿verdad?”. —el omega asintió muy sonrojado.

—“¿Puedo darte un abrazo?”— el omega asintió y sin impórtale nada más se abalanzo a los brazos del alfa, y al sentir los brazos del alfa rodearle y abrazarle fuerte se sintió seguro, se sintió en casa. Pudo oír el corazón del alfa y se dio cuenta que no solo su corazón sentía que se le saldría, sino también el del alfa y eso lo hizo sonreír en grande.