Te Necesito Solo A Ti [TaeGi]

[Capítulo 01]

El camino a la aldea fue silencioso, YoonGi fue cerrando sus ojos al punto de quedarse dormido. La noche anterior no había podido dormir muy bien, los pensamientos no se alejaban de su mente. -¿Y que si era tratado diferente? Por ser un Omega hombre.

El solo quería ser tratado como los demás, como una persona y un lobo normal. Había conocido a otros omega hombres que eran tratados de la mejor manera, eran tratados con tanto amor y dulzura.

Pero claro está no en su manada.

Recuerda a su amigo, que había conocido en la aldea vecina, había sido su único amigo omega que había tenido, a lo largo de dos años y medio.

Sólo desea y espera que su familia y él fueran aceptados en el que sería su nuevo hogar.

-Él estará bien, no te preocupes -habló el Señor Min tomando la mano de su esposa. La mujer solamente asintió con una sonrisa esperanzadora.
Tenía miedo que su familia fuera despreciada y más temía por su pequeño YoonGi. Que aunque tuviera diecisiete años era un pequeño muy dulce y adorable e inocente omega.

-YoonGi despierta -escucho Min entre murmullos, y luego un golpe en su hombro -¡Despierta ya llegamos! -escuchó el grito de su hermano.

Un soñoliento YoonGi salio de la camioneta, la brisa del campo acarició sus cabellos, el lugar era hermoso, la casa donde sería su nuevo hogar era de dos pisos. Árboles y plantas la rodeaban se quedo observando el lugar parecía tranquilo había mucho espacio aquel gran patio que estaba a un costado de la casa y luego de ahí se veía una pradera, como un pequeño bosque.

Estaba feliz el lugar le encantó, ya quería ir a conocer alrededor de su nuevo hogar. Se dirigía a ese lugar cuando escucho el grito de su madre -¡YoonGi cariño! Ayúdanos a subir esta maleta. -Él nombrado solo gruñó y asintió dirigiéndose a donde estaban las maletas, eso era algo que no le gustaba subir y bajar maletas pero eso era necesario.

-¿Es hermoso verdad? -escuchó la voz de su hermano en su cuello YoonGi dio un brinco soltando en el momento la maleta que tenia en mano.

-¡Idiota! -gruñó el omega a lo que su hermano soltó una carcajada -Se tu punto débil hermanito. -Min le dio una mirada aniquiladora al Alfa de su hermano.

-¡Eres un idiota JungKook! -soltó en tono enojado el omega -¡No vuelvas hacer eso!

El Alfa asintió con una sonrisa burlona en su rostro dirigiéndose con unas maletas a la entrada de la casa.

Era tanto lo que le gustaba molestar a su pequeño hermano, y burlarse cuando su hermano omega se ponía de manera gruñón, que de tanto reírse por haberlo asustado no pudo observar la pequeña lágrima que salía de los ojos de su hermano.