CAPITULO 40.

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Después de escuchar la voz odiosa de Madison, Katherine no aguanto más y colgó el teléfono, en su mente comenzaron a pasar muchos escenarios y en todos se encontraba Alex con Madison. Las lágrimas salieron sin parar, se sentía traicionada, su corazón estaba deshecho. Por otro lado, sabía que ella lo había engañado primero, no había sido honesta y se había enterado de una forma muy desagradable, pero ¿por qué lo había hecho? ¿Por qué lo primero que había hecho era meterse con esa mujer?

Jeremy entro a la habitación, después de tocar varias veces y no recibir respuesta, había pedido a los padres de Katherine que cuidarán al pequeño Liam y estos habían salido a pasear con él. Jer la encontró recostada en cama, abrazando su almohada llorando desconsolada, imagino que Alex no había querido hablar con ella, incluso que la había insultado. Se recostó a su lado y comenzó a acariciar sus cabellos, pero sin decir nada.

-Duele... duele mucho – dijo Kathy entre sollozos

-Nena... no sé que decirte

-Yo lo orille a sus brazos... pero... no debió hacerlo

-No entiendo, nena ¿de qué hablas? – Katherine dio varias respiraciones para calmar su llanto y comenzar a hablar.

-Le llame a su hermana... nunca contesto su celular... ella me dijo que ya sabían dónde estaba, también estaban preocupados, me quede al teléfono, escuche la voz de la zorra de Madison... estaban juntos... mientras yo estaba desesperada por encontrarlo y aclarar todo... él estaba con ella... durmió con ella – volvió a comenzar a llorar y Jeremy solo la abrazo.

-Nena, a veces los hombres hacemos estupideces cuando nos sentimos traicionados... aunque quiero darle un voto de confianza a Alex, creo que no debes olvidar que él nunca se caracterizo por la fidelidad, o al menos relaciones estables... sabes qué no me hagas caso, no se que hacer para hacerte sentir mejor.

-Yo lo orille de cierta forma – dijo tristemente

-No nena, quita esa idea de tu cabeza, es verdad, tiene derecho a sentirse traicionado por como se dieron las cosas, yo me sentiría así y creo que tu también, pero eso no le da derecho a él ni a nadie a irse a meter con otras por despecho, eso no se vale.

-Mi felicidad duro muy poco.

-Kathy... - soltó un suspiro profundo – se que te sientes mal por lo sucedido con Alex, pero... hay algo que tengo que decirte

-¿Qué pasa?

-Quiero que lo tomes tranquilamente

-Dime que pasa – hablo ella un poco más preocupada

-Mira, desde hace unos días... Joshua y yo hemos estado un poco preocupados...

-No entiendo, ya dime

-Es por Liam... veras hace poco preguntaron al vigilante al administrador del edificio sobre una familia... una pareja con un niño de la edad de nuestro pequeño, le dieron nuestras características – Katherine abrió los ojos asustada – obviamente no se les dijo nada, inmediatamente Joshua fue avisado y mando a poner cámaras de vigilancia.

-No puede ser – se llevo la mano a la boca tapando un sollozo – mi bebé

-Hemos estado muy pendientes, Joshua ha revisado las cámaras y obviamente dio la indicación de no dar información sobre nosotros, es más dijo que negara que viviéramos aquí, pero...

-¿Pero qué?

-Bueno no tengo evidencia ni nada, pero me he sentido observado cuando salgo, las cámaras externas no tienen mucho alcance, sin embargo, Joshua digo que había un auto que llevaba varios días estacionado en el mismo sitio. Por ese motivo, decidimos ya no sacar a Liam al parque, solo vamos íbamos por él al preescolar y la cafetería, siempre usando el auto de Joshua

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