El príncipe del reino Azul [L.S]

24. Muros

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Muros

La fiesta, hasta el momento, se había desarrollado de manera alegre. Siempre había habido gente en la pista de baile y Louis había disfrutado de deliciosos bocadillos que había tomado de las bandejas de oro que desfilaban por el salón.

Unos minutos antes, Liam los había separado del grupo que formaba con sus hermanas para hablar entre los tres.

—Amigo, ¿Estás seguro de que no quieres separarte para ir a buscar a Harry? —le preguntó.

—En serio podemos cuidar de ellas y de nosotros —le hizo saber Zayn.

—Ya sé que pueden cuidar de ustedes y de ellas, pero no me perdonaría no estar ahí si algo sucediese —informó Louis.

—Lou, escucha... —comenzó a decir Liam.

—No, escucha tú, Liam, cuando sucedió lo del castillo yo estaba haciendo el tonto con Harry y no estaba con ustedes. Cuando me enteré de lo que estaba pasando, pensé en cuidarlos, pero casi pierdo a Félicité. Si Dorothea no hubiera estado, o si yo hubiera llegado dos o tres minutos más tarde... ella ya no estaría aquí. Y, aun así, la perdí a ella. Perdí a Dora —se lamentó— No me voy a separar de ustedes, porque si algo pasase, preferiría dar mi vida en lugar de haber estado ausente y perderlos.

Al confesar aquello, vio los ojos de Liam brillar, y una sonrisa plasmarse en los labios de Zayn.

—¿Qué sucede? —se extrañó.

—Es lo más lindo que nos has dicho —confesó Zayn y Liam asintió.

Louis les sonrió débilmente, y se giró a vigilar cómo estaban sus hermanas.

A lo lejos, Charlotte hablaba con Magnus y una joven danesa allegada Gemma, las gemelas estaban charlando con las jóvenes marquesas y duquesas con las que siempre se reunían en los eventos. Sin embargo, Félicité no estaba con ellas. Louis frunció el ceño, imaginando que estaría con Willem de Luxemburgo. No obstante, la encontró tan sólo a unos metros, conversando de manera amena con Niall, ambos sonreían. El joven no pudo sacar los ojos de la escena, ya que incluso en un momento comenzaron a reír fuertemente.

Louis sonrió, porque muchas jóvenes hubieran contenido la risa, sin embargo, sus hermanas eran terriblemente expresivas, su madre las había criado así. También se quedó tranquilo al saber que estaba con Niall, sabía que los dos tenían una buena amistad, como la que Louis también tenía con el rubio.

—Vi pasar a Gigi por aquí hace poco tiempo —avisó Louis, volviendo a mirar a sus amigos. Vio la mandíbula de Liam tensarse ligeramente y a Zayn mirar hacia el candelabro que estaba cerca de ellos, como si fuera la cosa más interesante del mundo.

—Sí, pero no hablaremos con ella... nos da mala vibra —avisó el morocho, sin despegar la vista de la luz.

Louis se sintió confundido, y le sorprendió descubrir que, interiormente, creía cada vez más real la teoría que sus hermanas habían compartido con él.

Sonrió al ver que debía poner a prueba aquello, porque al parecer los jóvenes no le dirían nada.

—¿Seguro? Yo los vi hablar muy cómodos aquella ocasión que la vimos... ¿No será que estás interesado en ella e intentas que te note, al no darle atención? —preguntó a Zayn.