capitulo 17: incómodo

2.6K 181 4
                                    

Hoy había una asamblea, y dirigida por la mismísima reina de Solaria. La verdad es que no tenía ganas de ir a una reunión y menos si eso consistía en básicamente en tener que estar en un sitio cerrado con Sky cerca y con Musa posiblemente percibiendo cada sentimiento que encontraba. Si identificaba el mío podía ser una catástrofe.

En fin, hoy en el entrenamiento no tuve que ver a nadie, Silva me puso a correr por los alrededores, nada más, aunque he de decir que estar corriendo sin parar durante 2 horas no es nada divertido.

Subí a mi habitación para cambiarme, por suerte Teddy y Miriam ya habían bajado hace rato para coger sitio en la asamblea y el lugar estaba vacío. Me tome mi tipo en ducharme y ponerme la ropa que había escogido anteriormente, aunque no era nada del otro mundo... Bueno... Si del otro mundo, porque estoy en el otro mundo, pero también es algo que se lleva en el primer mundo así que en realidad es... Va, déjalo.

Salí de la habitación y caminé por los pasillos en dirección a la asamblea cuando me choqué de golpe con alguien y me caí al suelo de culo.

- mierda - susurro para mí misma.

- lo siento, ¿Estás bien?

"Más MIERDA" - pensé al ver quién era. Acepté la mano que me ofreció para levantarme y una vez de pie le mire nerviosa.

- eh, gracias - dije en bajito.

- de nada, ¿Ibas a la asamblea? - preguntó igual de nervioso que yo.

- si, ¿Y tú?

- estaba acompañando a Stella mientras esperaba a que su madre llegara.

- claro... - dije seca.

- Ángel, lo que pasó...

- no hace falta que lo hablemos si no quieres, no te sientas obligado - le interrumpí.

- quiero hablar de ello, ¿Tú quieres? - levanté la cabeza para mirarle a los ojos.

- creo que necesitamos hablarlo - dije seria - después de la asamblea - terminé, él asintió conforme y los dos nos dirigimos a la asamblea.

Al llegar nos separamos casi al instante, Sky desapareció de mi vista y no lo volví a ver, en cambio, yo me fui a sentar con mi hermana y sus amigas, ya que no encontré a las mías.

- hola - saludé con una sonrisa, todos me devolvieron la sonrisa y yo me senté junto a Sam.

Estaba a punto de decirles algo cuando vi a Riven salir de la zona de la asamblea. Fruncí el ceño, se supone que era obligatoria acudir, y más si la dirigía la reina.

- ahora vuelvo chicos - dije en un susurro mientras me levantaba.

Caminé apresurada entre la gente y conseguí alcanzar al chico. Vi como sobresaltaba a su "novia", seguro que trataban algo.

Les había seguido hasta el ala este donde me tuvieron encerrada, entraron por la puerta de metal por la que siempre entraba Farah, yo, esperé unos segundos y luego les seguí el paso sin que me vieran.

- parece que no somos los únicos que tramamos algo - escuché que decía la chica que acompañaba a Riven, que por cierto, seguía sin saber su nombre.

Escuché unos pasos alejarse, me asomé un poco, se habían ido. Miré el lugar en el que estaba, había estanterías de metal repletas de cuadros y cajas viejas y llenas de polvo. Intenté prestar atención a los sonidos para por lo menos saber en qué dirección de habían ido, aunque después de fijarme bien no me haría falta, se veían las pisadas gravadas en el suelo de piedra, indicándome así la dirección.

- ¿En serio estáis aquí buscando trastos viejos? - dijo la voz de Riven mientras seguían alejándose.

- la gente que piensa que la historia es basura, es basura... No seas basura - volví a escuchar la voz de la chica. Los perdí por un momento pero no tarde en encontrarlos, justo cuando se metieron en otra sala.

- te aseguro que no se están acostando, eso haría que Sky fuese muy interesante - dijo Riven.

¿Sky? ¿Que hacía Sky ahí? Se supone que estaba en la asamblea... ¿Y acostándose con quién?

- tiene razón, no lo hacemos pero estábamos en ello y era agradable - dijo la voz de otra chica diferente.

Espera... ¿Bloom?

- oh una relación emocional eso es mucho peor. - volvió a decir la novia de Riven. - pero dime Sky, ¿A cuántas bandas juegas?

- ¿De que estás hablando? - escuché la voz de Sky por primera vez.

- oh, no te hagas el tonto, ¿Vas a decir que Ángel no salió corriendo de tu habitación sin calzar, despeinada y con la camiseta mal puesta? - no hubo respuesta.

- vaya, vaya, Sky, cada vez me sorprendes más - dijo Riven.

- así qué... Stella, Ángel y Bloom, ¿Con quien se quedará? - me apoye en la pared de piedra y respiré profundo, o al menos lo intenté, enterarme de esto me había acelerado la respiración demasiado, no sabía si estaba enfadada, decepcionada, si me sentía traicionada o si simplemente estaba triste y quería llorar. Mis ojos me empezaron a arder.

- oh, adoro las puertas cerradas - escuché la voz de Riven. Me resbalé por la pared hasta el suelo, cruce las piernas con dificultad y apoye mis manos sobre mis rodillas. Respiré hondo y aguante la respiración...

1...2...3... Solté el aire. Volví a coger más... 1...2...3... Solté el aire.

Lo había conseguido. Mis ojos ya no ardían. Pero me seguía doliendo el pecho. Volví a prestar atención a la conversación que mantenían los cuatro mientras me volvía a poner de pie.

- si de verdad quieres enfadarte, hazlo con el capullo que le ha ido contando a todo el mundo que eres una intercambiada - escuché la voz de esa odiosa chica.

- no pensaba que hoy fueras a joder e así, Bea - escuché a Riven.

- ¿Es cierto?

- si, vale, si Sky el santo va a soltarme un sermón me largo.

- espera, espera, espera - dijo la que al parecer se llamaba Bea, aunque posiblemente fuera un diminutivo de algún nombre. - antes de que os vayáis a discutir en plan macho alfa... ¿Ángel? ¿Por qué no te muestras y pasas un tiempo con tus queridos amigos? - me quedé paralizada en cuanto escuché eso.

- ¿Qué? - dijo Sky. No sabía que hacer, salir corriendo en dirección opuesta o dar la cara.

- oh, claro, nuestra queridísima Ángel nos ha estado siguiendo desde el principio y ha escuchado todo lo que hemos dicho. - ya no tenía escapatoria, salí de mi escondrijo pero con la cabeza bien alta.

- hola, chicos, Bloom - saludé, Sky se quedó mirándome sin saber que decir. - ¿Es cierto? - le pregunté directamente a Sky. - ¿Juegas a tres bandas?

- no - soltó serio.

- bien - me dirigí a la salida que estaba detrás de "Bea" y por la que se había largado Riven no hace mucho. Salí de la habitación con Sky detrás.

- ¡Ángel, espera! - me gritó, detuve mi paso y me giré para mirarle - creo que sería un buen momento para hablar de lo que pasó.

- yo no lo creo...

- lo es, y si tú no quieres hablar, solo escúchame.

- está bien, habla - dije sería.

- lo que pasó fue real... Y lo volvería ha hacer... Por qué te quiero, te quiero, Ángel - me quedé de piedra, la verdad es que me esperaba cualquier cosa menos está.

- ¿Que pasa con Stella? - fue lo único que se me vino a la cabeza.

- cortaré con ella, nuestra relación es tóxica, ella no me quiere y yo no la quiero, estará de acuerdo. - me quedé en silencio ante lo que dijo. - ¿No vas a decir nada?

No Fue Mi Intención - FATE: la Saga Winx (Sky De Eraklion)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora