Atrapados

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POV Gulf

No sabía la razón pero se sentía más cansado de lo normal. No entendía el motivo porque no había hecho mayor esfuerzo físico en el día como para sentirse de esa manera. Había tenido una videollamada fuera de lo usual, una que había resultado bastante entretenida, quizá más de lo que se atrevía a admitir. No lo entendía, realmente no sabía cómo podía sentirse así por alguien.

El género era ya un tema que lo tenía sin cuidado pero aún así resultaba algo complejo de asimilar que tuviera una relación con otro hombre. Ése era algo que tampoco le preocupaba porque ya no era un adolescente ni mucho menos un niño temeroso, ya era un adulto y había analizado cada situación con detenimiento, lo había aceptado y estaba bien con eso, tal vez más de lo que podía expresar con palabras o acciones. Se sentía realmente bien, cómodo y contento con su vida y con la manera cómo la estaba llevando. No era perfecto ni pretendía que lo fuera, pero era bueno.

Solo había un tema que aún le incomodaba o tal vez solo le causaba inquietud. No era propio de su forma de ser y aún no lo comprendía del todo. Estaba actuando de maneras en las que nunca lo había hecho antes, dejándose llevar más por sus instintos y deseos que por la razón. Siempre había sido un hombre cauteloso con sus movimientos, meditando previamente si era conveniente actuar de determinada manera, pero eso era algo que últimamente no le sucedía. Empezaba a dar pasos demasiado acelerados en su relación, haciendo cosas que nunca había hecho ni siquiera cuando se encontraba en la etapa escolar, en donde las hormonas eran las que dominaban las acciones de cada uno de sus amigos, incluyéndose.

Quizás se estaba apresurado, yendo más rápido de lo debido, acelerando algo que debía de ir más lento, pero también sabía que era algo que no podía frenar. Sus sentimientos estaban desbocados, floreciendo nuevos a cada instante y repotenciando los que ya existían.

Aún no entendía bien la razón, pero por P'Mew estaba dispuesto a hacer cosas que no haría por nadie más, y eso le causaba temor. Estaba enamorado, eso era algo que ya había aceptado, pero le asustaba y fascinaba la rapidez con la que sus sentimientos iban incrementando casi sin darse cuenta. No sabía cómo era posible querer dejarlo todo por alguien si así lo pedía. P'Mew no era una persona que le pediría grandes cosas ni algo que lo pudiera perjudicar, pero aún así le aterraba sentir algo así y más aún cuando era una relación que recién estaba comenzando. Se sentía casi desnudo ante él, como si regresara a ser un niño pequeño, pero la diferencia es que ya no era. Se había convertido en un adulto, pero aún así se sentía pequeño. P'Mew nunca lo había hecho sentir menos que él, ni siquiera cuando recién se habían conocido y, poco o nada sabía sobre el mundo del entretenimiento. Lo había guiado como si de un padre, un hermano y un amante se tratara, procurando siempre que pudiera obtener una lección de cada acción que cometía, ayudándole a no tropezar de la misma manera en la que lo había hecho él.

A su lado se sentía bien, se sentía cómodo y con calma, pero también se sentía vulnerable, como si tuviera el poder de desentrañar su alma con una sola mirada. Esa sensación le gustaba pero al mismo tiempo le asustaba saber que alguien tenía tan fácil acceso a él, pero a pesar de eso estaba dispuesto a entregarse sin mirar atrás, dejando que lo desnudara en todos los sentidos que fueran posibles y necesarios. Estaba dispuesto a abrirse a él, a entregarle lo que le pidiera porque había pasado demasiado tiempo temiendo, asustando de las miradas y comentarios de los demás y debido a eso casi lo había perdido. No quería dejar pasar más tiempo.

Aceptaría lo que viniera sin importar si los demás lo aprobaban o no. Era un adulto y debía de hacerse cargo de sus acciones, buenas o malas, solo él era responsable de lo que sucediera, pero tenía a alguien más en quién apoyarse si así lo necesitaba.

Quería dormir por lo que quedaba de la noche, pero debía de esperar a P'Mew. Tal vez aún tardaría un par de horas en llegar. Solo necesitaba verlo, hablar y saber que todo estaba bien, que una pequeña diferencia de opiniones no cambiaría en nada lo que tenían.

CansadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora