Capitulo 11: El regreso y la bienvenida.

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Cuando Azusa y Narvi se despertaron, ambos se miraron sorprendidos viendo sus cuerpos marcados y la cama con manchas de sangre y al mirarse nuevamente, Azusa abraza a Narvi agradeciéndole por lo de anoche. Narvi sonrojada se levanta de la cama para preparar la tina en la cuál tiró una de sus bombas de baño con un aroma floral y frutal y acto seguido, ambos se bañaron juntos y limpiaban sus heridas cuidadosamente

- Azusa... sobre lo de anoche, perdona por el rasguño – se disculpaba Narvi mientras le limpiaba la espalda a Azusa – ahora veo cómo te rasgué la espalda y creo que me pasé.

- No te... disculpes Narvi – dijo Azusa tomando la mano de Narvi haciendo que ella choque sus pechos en su espalda – anoche disfruté mucho... estar contigo de esa forma, me gusta sentir... tus pechos en mi cuerpo.

- Yo también me alegro de haber hecho el amor contigo – dijo Narvi apegando más sus pechos en su espalda abrazándolo – estoy empezando a creer que te estás obsesionando con mis pechos.

- Cierto... pero no sólo con tus... pechos – dijo Azusa mientras se volteaba lentamente mirando a los ojos a Narvi – tu mirada... tu cuerpo entero, tu manera de amarme y... en especial... tu sangre... me tienen vuelto loco.

Ambos se besaron dulcemente hasta que acabaron de bañarse y entre ellos se ayudaban a secar sus cuerpos, a ponerse la ropa y finalmente arreglaron la cama juntos cambiando las sábanas ya que se habían manchado con la sangre de ambos cuando hicieron el amor, luego cuando estaban a punto de ir a desayunar Narvi se detuvo soltando la mano de Azusa con una mirada llena de preocupación

- ¿Qué sucede... cariño? – preguntó Azusa.

- Es que... casi lo olvidaba – reflexionó Narvi – tengo que irme a la mansión Sakamaki con Yui... y eso significa que tendré que alejarme de ti Azusa, y yo no quiero que te pongas triste.

- Está bien Narvi... yo te prometo que... estaré bien, siempre y cuando me asegures... que estarás bien – dijo Azusa tomando los brazos de Narvi – además... ayer tú y yo nos hemos vuelto... cada vez más cercanos, así que descuida... oye, ven... toma mi mano.

- Azusa... será mejor que vaya a ver cómo está Yui – dijo Narvi – tú anda a ver cómo están los demás y de ahí voy al comedor con Yui.

Narvi comenzó lentamente a alejarse de Azusa y ambos tomaron distintos caminos pero Narvi al verlo mientras se alejaba, ella corrió hacia él y sin previo aviso le pellizcó suavemente su trasero para después desaparecer de la vista de Azusa, quien al voltearse no vio a nadie, pero supuso que fue Narvi y simplemente siguió adelante hasta que Narvi volvió a aparecerse detrás de él para darle una palmada a su trasero y él rápidamente se volteó y aún así no vio nada, pero después siguió su camino pero estando en alerta hasta que después Narvi volvió a hacer de las suyas y aprovechándose de que Azusa andaba distraído ella de la nada con sus dos manos agarró y apretó su trasero y rápidamente se teletransportó hacia la habitación de Yui, ella no podía contener su emoción ante lo sucedido en la noche, así que apenas llegó a la habitación de Yui ella la recibe y al notar lo emocionada que estaba Narvi se sentó junto a ella para preguntarle qué le sucedía a lo que Narvi le contestó que estaba muy contenta porque ayer hizo el amor con Azusa, cosa que Yui reaccionó como cualquier amiga reaccionaría ante ese tipo de noticia llenándola de preguntas acerca de cómo fue, como se sintió, etc.

Mientras que por otro lado, Azusa llegó al comedor y notó que Ruki estaba sólo parado mirando por la ventana el nublado día y la mesa estaba lista, Ruki le preguntó a Azusa por Narvi y él le contesta que ella fue a buscar a Yui hasta que de repente Kou aparece detrás de Azusa

- Buenos días Azusa – dijo Kou a la oreja de Azusa – ¿cómo pasaste la noche?.

- ¡Kou deja en paz a Azusa! – exclamó Yuma – deja que él decida si contarnos o no.

Protection: La guardiana de Yui KomoriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora