Atado A Ti

Capítulo 28 - Puedes huir, pero no esconderte.

La noche terminó mejor de lo que ambos chicos pudieron haber esperado al principio. Por supuesto, en especial Xiao Zhan.

Xiao Zhan había sido una masa de nervios cuando tuvo que plantearse la idea de presentar a su novio con sus mejores amigos, sus probablemente dos únicos mejores amigos. La razón era, que los conocía perfectamente y sabía de lo que eran capaces. Sabía también que Yibo a veces... o bueno, casi siempre, carecía de paciencia con gente que de verdad le hartaba.

¡Por supuesto que, no se equivocó cuando el día llegó!

Desde Cheng llamando imbécil a su novio -casi le dieron ganas de levantarse de la silla para zarandearlo hasta que recapacitara y, pidiera disculpas- hasta, Xuan Lu haciendo un interrogatorio de todo lo que podía obtener de Wang Yibo.
Pensó que como su novio no había tenido más alternativas, solo se limitó a responder. Sin embargo, admitía que... eso le brindó el privilegio de saber más cosas acerca de Yibo, por ejemplo, las escuelas donde había estudiado, los deportes, entre otras cosas más...
Fue capaz de sentir las veces donde su mano apretaba más de lo indicado la suya, como un acto reflejo cuando algo le molestaba o incomodaba. Ahí, Zhan entraba en pánico. Pero, recordaba que lo que Yibo necesitaba para estar tranquilo en momentos de estrés... era contacto físico.

Las suaves caricias en el dorso de la mano, los ligeros apretones, la calidez de ambos... le dieron la respuesta a Zhan. Si, efectivamente Yibo podía estar más tranquilo así.

Poco a poco, su propia tensión se disipó entre las risas de los acompañantes. Cuando Cheng llegó minutos después para continuar con la conversación seria, pronto entraron en ambiente. No fue difícil para los dos hermanos darse cuenta que Yibo era en realidad, una persona muy carismática cuando se daba el tiempo de conocerlo.
Entendían a medias porqué el chico tenía que estar con "cara de constipado" todo el día cuando se encontraba en asuntos de negocios. También ahora entendían porque no se mostraba como era con cualquier persona. Yibo tenía que escoger con inteligencia y cuidado a quien mostrar su otra cara fuera del empresario, porque, no cualquiera merecía su confianza a palabras de él.
Lu rodó los ojos, Cheng aguantó la risa... y Zhan quiso golpearlos a los dos. Pero, volvió a respirar tranquilo cuando Yibo también rio por lo "sombrío" que se había escuchado su comentario.

Y de alguna manera, ser de las pocas personas en el pequeño círculo que tuvieron la posibilidad en descubrir la dualidad de Wang Yibo... abrió nuevos panoramas de relación entre ellos. Zhan, definitivamente, respiró con normalidad cuando se dio cuenta de eso.

Incluso, fue todavía más tolerable para ellos el momento de su despedida en el estacionamiento del lugar. Como el recinto era el mejor en cuanto a seguridad -a palabras de Xuan Lu- no tuvieron preocupaciones de paparazzi rondando por los alrededores o incluso, que el propio Wang Aaron saliera de los arbustos con una cámara para fotografiarlos.

–No seas ridículo. –replico Zhan con los ojos en blanco, pero un toque divertido en su voz. Miró a su amigo negando con la cabeza. –¡Tu imaginación a veces llega demasiado lejos!

–¡No es imposible! –replicó Cheng encogiéndose de hombros y mirando a Zhan con los ojos bien abiertos. –¿Acaso no lo crees capaz? Pregúntale a tu novio si no –dijo, señalando con la barbilla al chico de ojos rasgados.

Las miradas instantáneamente fueron hacia el empresario. Sin embargo, este solo observó de reojo y negó con la cabeza. –No sería para tanto. –dijo únicamente. Aunque en el fondo, realmente se lo cuestionaba.
¿Su padre llegaría a tales extremos solo para cumplir su voluntad?

Sintió nauseas tan solo imaginar la respuesta a su propia pregunta. Pero aun si así era, no lo dio a demostrar por fuera. Su rostro permaneció impasible y solo se limitó a caminar mientras sujetaba la mano de Xiao Zhan. Por el contrario, el pelinegro lucía fresco y reluciente por el agradable rato que paso en compañía de las personas que más apreciaba en el mundo.