¿Puedo quedarme contigo? [Haikyuu omegaverse]

41. ¿Quieres sanar mi corazon?

El paisaje era hermoso, el lago pequeño, el sol cálido que los abrigaba del frío de otoño, la naturaleza que los acogía en ese lugar. Lev estaba feliz, no se cambiaba por nadie, el hecho que el omega del que estaba enamorado lo haya invitado a ir juntos de viaje y le haya dicho que vayan solos a caminar era un lucecita de esperanza en su corazón, aunque sabía muy bien que el chico del que estaba enamorado no sentía lo mismo que él o al menos eso era lo que pensaba.

Por su parte Yaku para tomar la decisión de invitarlo y enfrentar sus sentimientos ha sido todo un viaje de introspección y reconocimiento de algo muy privado que solo él sabe. No es sencillo abrirse a alguien y más cuando tienes heridas que no has sanado o que simplemente has evitado darle cara. Pero, en algún momento lo tenemos que hacer, no se puede vivir cómo si no existiesen, de manera superficial, riendo con todo mundo, haciendo como si todo estuviese bien, cuando en verdad no es así. Y este momento le llegó, así que con todo lo que implica hacerlo le iba mostrar su verdadero rostro a alguien que está invadiendo su vida, sus días, sus pensamientos y sobre todo su corazón [tremendo momento para Yaku 😢]

Estaban sentados, absortos por el paisaje, por el silencio, por el momento, por el simple hecho de estar juntos.

-Yaku-san, ¿alguna vez ha estado aquí? Para mí es la primera vez. Solo conocía Tokyo, pero ahora conozco este lugar y lo mejor de todo es que lo hago junto a usted- dijo animado el alfa.

Al principio, no hubo respuesta de parte del mayor, su mirada estaba al frente como perdido en la belleza de la naturaleza, sin dejar esa mirada fija; de repente, sonrió con las palabras de Lev y como nunca lo había hecho, comenzó a hablar con total naturalidad.

-Nunca he estado antes, pero aquí se conocieron mis padres- haciendo una breve pausa siguió diciendo- ... Sabes... antes que mi padre se enfermara no me llevaba bien con él. Él era de otra generación con un pensamiento más conservador, mucho más cuadriculado, era de los que no entablaban conversaciones particularmente extensas, al contrario, era: "buenos días"..."buenas tardes"..."buenas noches".

/¿su padre está enfermo?/ pensó el menor

-Pero nuestra relación empeoró cuando comencé a salir con este chico, mi primer amor- no la primera persona con la que salí, pero sí de la primera de la que me enamoré. Mi padre no estaba de acuerdo, decía que era muy joven, que no sabía lo que era el amor, que a mi edad debía pensar en estudiar. Obviamente, me rebelé, hice lo que quise, yo mismo me decía: "¿porque tenía que aceptar lo que decía si nisiquiera se preocupaba por tener un lazo hijo-padre?" No sabía nada de mí, ni de mi gustos, ni los sueños que tenía, ni los nombres de mis amigos más cercanos. En ese momento, pensé "solo es mi padre de nombre, porque para mí es un total desconocido"- el omega bajó la cabeza y esbozando una triste sonrisa continuó - ....que ingenuo e inmaduro era en ese tiempo...

Lev lo miraba atento, era la primera vez que la persona de la que estaba enamorado había abierto una página íntima de su vida.

🎼esta canción es para el resto del capítulo o si quieren para todo el capitulo🎻

-Si hubieses visto- suspiró hondamente- me obstiné tanto por esa relación que dejé de ver por lo que mi familia estaba pasando. Toda la candidez y la ingenuidad del primer amor, se encargó de que me entregara completamente. Nunca tuvimos sexo, al contrario, soñábamos con casarnos, tener hijos, esperar al momento adecuado, pero las cosas nunca salen como las planeas. Cuando mi padre se enfermó, las cosas se pusieron mucho más confusas en mi cabeza y sobre todo en mi corazón. Sin darme cuenta, buscaba escapes de la realidad, no quería enfrentar lo que me estaba sucediendo. Comencé a salir continuamente, a beber, a coquetear con otras personas. Nunca le fui infiel en el cuerpo, pero sí muchas veces en el corazón. Él se dio cuenta que cambié, que estaba perdido. Trató de ayudarme, pero no pudo hacer mucho, era solo un año mayor que yo ¿cómo puedes ayudar a otro que está más perdido que tú?
En fin... me enredé en mis mentiras y excusas y como era lógico, esa relación se terminó. No era un mal chico, al contrario, cualquiera se enamoraria de él, pero mi inmadurez hizo que esa relación se acabara.