poché
Cuando llegamos a casa, Daniela y Laura venia recordando lo que hicieron de adolescentes, tocamos el timbre y nos abrió Sonia que de inmediato le dio un abrazo muy afectuoso a Daniela, nos encaminamos a la sala cuando todos nos quedamos estáticos, mafe estaba hablando con Antonia.
_ yo soy tu abuela, puedes decir "mafe" o abu" vamos inténtalo pequeña.
Daniela veía a su madre con un brillo en sus ojos y pude ver una lagrima correr por su mejilla. La noche anterior al salir del hospital después de visitar a calle, mafe y yo nos quedamos charlando en la sala.
_ poché, yo quería disculparme contigo y con anto por lo que pasó, yo estaba...
_ ya hablamos de eso mafe, yo no le guardo rencor ni nada por el estilo, ya le dije usted es madre de la mujer que amo y siempre la voy a respetar.
_ poché, yo... quería pedirles una oportunidad para conocerlas, sé que no tengo derecho, pero me gustaría pasar tiempo con ustedes
_ mafe tienes todo el derecho y sí, me gustaría que nuestra relación mejore, a Dani la haría feliz.
_ entonces hay que hacerla feliz poché, sé que mi hija te ama y me has demostrado que tú la amas, yo solo quiero verlas felices, no me volveré a entrometer en las decisiones que tome mi hija.
Cuando dijo que todo cambiaria hablaba muy en serio y lo estoy comprobando al verla jugando y hablando con Antonia, caminamos un poco más para que se percatara de nuestra presencia, pero apenas anto vio a calle empezó a llamarla y alzar sus manitas para que la cargara y como era de esperarse Daniela corrió a cargarla.
_ ¿Cómo estuvo mi princesita? - dijo dándole besos por el rostro y anto solo reía - ¿me extrañaste? - Le dijo y anto asentía riendo y dándole besitos por el rostro. Yo no podía creer lo que Daniela logró con mi hija, Laura, mafe y yo las mirábamos con cara de bobas, bueno yo mucho más porque eran mis dos personas favoritas siendo felices, que podía hacer si no es sonreír y sentirme mucho más feliz.
_ hola princesa, ¿no saludaras a tu tía preferida? - dijo Laura y anto saltó a sus brazos, que le pasa a mi hija que últimamente quiere estar en brazos de otros que en los míos. Laura y Sonia que estaban ahí se llevaron a mi hija a jugar y mafe se acercó donde Daniela para abrazarla y darle un beso en la frente
_ estoy bien mamá - dijo calle quejándose
_ ve a descansar hija que tienes que tomar reposo, poché dile algo
_ estoy bien mamá. No me duele nada además estoy cansada de estar en cama
_ solo fue un día calle, no seas exagerada - le dije riendo, ella se acercó a mí y me tomo de la cintura viéndome a los ojos
_ está bien iré a descansar, pero con una condición
_ ¿Qué condición calle?
_ que vengas conmigo - asentí riendo y nos dirigimos a la habitación, no puedo creer que esté haciendo esto, pero a quien engaño solo fue un día, pero extraño a calle como si hubiese estado fuera por años.
Cuando estuvimos dentro ella cerró la puerta con seguro y me susurro al oído
_ te necesito poché - Comenzó a besarme el cuello con tanta necesidad que no me daba tiempo ni a formular una silaba en mi cabeza
_ Dani... también te necesito, pero tu mamá, Laura y anto están abaj...
No me dejó terminar cuando ya estaba atacando mi boca, y por arte de magia mi cordura se esfumó, me acorralo contra la pared, pegó todo su cuerpo al mío haciéndome sentir su erección y vaya que lo disfrutaba.
Comenzó a bajar sus besos por mi cuello mientras que con sus manos masajeaba mis piernas subiendo lentamente hasta mi cintura, metió su mano bajo mi camiseta y empezó a subir peligrosamente por mis senos, con sus dedos comenzó a jugar con mis pezones ya erectos y eso me estaba volviendo loca, subió mi camiseta sin quitármela y reemplazó sus dedos con su lengua, automáticamente un gemido salió de mi boca que logré cortar al cubrirme
_ shh no hagas ruido mi amor que nos pueden escuchar, ¿podrás hacerlo? - me preguntó sobando su miembro en mi parte más sensible
Yo solo asentí con la cabeza porque no podía abrir la boca sin que se me escapara algún gemido, bajé mi mano hasta el cierre de su pantalón y lo bajé lo suficiente para que callecito salga, un gemido que ahogó en mi cuello salió de su boca, así que empecé a masajear su miembro despacio para que sintiera más placer, ella desabrochó mi pantalón y de un tirón lo bajó junto a mi ropa interior, me dio la vuelta y sin avisar me embistió, me cubrí la boca para no hacer ningún ruido aunque parecía no funcionar porque el placer que me estaba haciendo sentir Daniela, era increíble.
_ poché estas tan estrecha
_ oh Dani no pares - Ella hizo caso y no bajaba su ritmo
_ si sigues apretando así voy a terminar pronto poché - me decía mientras besaba mi cuello, y eso estaba haciendo que me encienda mucho más.
_ Dani me voy a venir - le dije y ella me embestía cada vez más rápido y eso me estaba llevando a la gloria. Así como se lo dije me vine con un sonoro gemido que calle logro contener con su mano, pero no me importaba que me escucharan, en ese momento solo estaba disfrutando de aquel orgasmo, Daniela siguió con unas cuantas embestidas más hasta que llegó al clímax callando su gemido en mi nuca, tratamos de controlar nuestras respiraciones cuando escuchamos unos golpes en la puerta, era Laura.
_ ya dejen de hacer cochinadas y bajen a almorzar - Daniela y yo solo nos reímos porque Laura estaba en lo cierto, nos cambiamos y arreglamos lo más rápido que pudimos para bajar a almorzar con los demás - Cuando estábamos bajando las escaleras Daniela tomó mi mano y me detuvo
_ poché quiero invitarlas a ti y a anto a cenar esta noche.
_ claro que iremos mi amor, pero por qué estas nerviosa, ¿pasó algo?
_ no, no pasa nada es solo que quería ir a cenar con ustedes para preguntarles algo
_ de que se trata calle, ¿es grave?
_ no amor, no es nada malo y no seas curiosa, te lo diré esta noche.
_ está bien
_ ahora vamos a almorzar que nos esperan y seguramente Laura hará comentarios incomodos.
