Luna ~ BNHA Todoroki Fanfic

Capítulo 47

Naoko PoV

Al día siguiente Kaori aun parecía deprimida, pero era fácil darme cuenta de que estaba intentando con todas sus fuerzas no pensar en el asunto.

Solo podía observarla con preocupación. Cuando le pregunté como estaba se limitó a sonreír y dijo:

—Estoy bien, ya no me importa.

Yo sabia que eso no era cierto, pero conociéndola, supe que lo decía para que dejara de preocuparme. No le gustaba que los demás se compadecieran de ella.

Pude notar lo nerviosa que se ponía cada vez que una clase terminaba. Miraba constantemente su teléfono para chequear la hora. No quería que el tiempo pasara y llegara la tarde, donde tendría que encontrarse con Midoriya para la práctica. Kaori estaba distraída y dispersa, con la cabeza en las negras nubes de sus sentimientos. Mientras escuchábamos a Present Mic darnos la clase ni siquiera tomaba apuntes, lo que era extremadamente raro.

Me pregunté que podría hacer por ella. Es decir, ella siempre encontraba la forma de ayudarme y ahora yo me sentía algo inútil.

Fue en ese momento en que sentimos como todo el edificio vibraba. Las ventanas retumbaron dejando entrar el ruidoso estruendo de una explosión.

Todos dirigimos nuestra vista hacia las ventanas. Yo me puse de pie como muchos y me acerqué a ver mejor. Se me congeló la sangre.

Humo. Mucho humo y un enorme muro de hielo crispaba el paisaje elevándose hasta más arriba del edificio principal. El macizo de hielo nacía en uno de los gimnasios, atravesando el techo. Desde donde estaba pude ver como los de la clase 1 A evacuaban el gimnasio. Pero no podía verlo a él. No estaba...

—¡Shoto! —dejé escapar en un susurro llevándome la mano a la boca, aterrada.

—¡Conserven la calma, iré a ver que esté todo en orden! —pidió Yamada Sensei saliendo rápidamente de la sala.

Todos los vidrios del gimnasio habían explotado, como por presión de aire. Fue cuando divisé a Shoto salir del gimnasio. Más bien, lo sacaban, inconsciente, en una camilla.

—No...

Ni siquiera dudé un segundo. Mis pies se movieron por si solos. Abrí la ventana de golpe, generando un ruido sordo. Mis compañeros de clase me miraron. El olor al polvo que ahora se disipaba en el aire entró al salón. Yo salté por la ventana, impulsándome con mi singularidad.

—¡Naoko! —escuché como Kondo me llamaba, pero hice caso omiso a su grito.

No podía ser. Esto no podía estar pasando. Shoto tenia que estar bien, el era fuerte, era ágil, era listo... ¡era invencible!

O al menos lo era para mi...

Comencé a caer a gran velocidad, pero no sin tener el control de ella. Ni siquiera fue necesario pensar en cómo hacerlo. Mi cuerpo, ya entrenado, lo hizo de memoria instantáneamente. Caí sin problemas de pie en el suelo y miré hacia adelante, disponiéndome a correr en dirección al gimnasio.

Se me apretó el corazón. ¿Qué había pasado? ¿Cómo era posible que Shoto estuviera herido? Y ¿porqué era él el único herido?

Por favor que esté bien, por favor que esté bien, por favor, que esté bien. Repetía incesantemente mientras daba zancadas hasta alcanzar el lugar del accidente. Estaba cerca cuando me di cuenta de que lo llevaban a la enfermería.

Sus compañeros de clase me vieron aterrizar junto al gimnasio. Midoriya iba junto a la camilla de Shoto, y se sostenía el hombro derecho. Intenté acercarme pero todos los rodeaban.

—¿Naoko? —me vió Uraraka, extrañada.

—¿Qué pasó? —quise saber. Mientras se lo llevaban vi como varias heridas recorrían su rostro y sus brazos. Su pierna izquierda lucía extraña, como en una posición que no era natural. Sentí mareos— ¿Qué le pasó a Shoto?

—No lo se... —me respondió.

—Ninguno de nosotros alcanzó a ver nada —agregó Kirishima, acercándosenos— solo oímos la explosión y salimos todos empujados hacia los costados del gimnasio.

—¿Explosión? —la sangre me hirvió. En ese momento Bakugo apareció tras el pelirrojo. Le dirigí una mirada que no sabía que podía hacer.

—A mi no me mires, Mocosa, yo no era quien entrenaba con Mitad y Mitad—, murmuró poniendo sus manos en los bolsillos.

—¿Cómo llegaste aquí tan rápido? —me miró Uraraka, impactada. De seguro también se preguntaba por qué había venido. Fue cuando recordé que en realidad no le habíamos dicho a nadie sobre lo nuestro. Pero no era momento para explicar ese tipo de cosas.

Se llevaron tan rápido a Shoto que cuando volteé ya no estaba a la vista.

Aguanté las ganas de llorar, mientras escuchaba a All Might llamar a todos para decirles que se dirigieran al gimnasio cuatro. Mic estaba con él. Antes de que me viera y me enviara de vuelta al salón, comencé a caminar rápidamente en dirección a la escuela. Tenía que llegar a la enfermería y ver como estaba.

Sentí su mano en mi hombro instantes después. Abrí la boca para dar una excusa y rogar por que me dejara ir con Shoto. No fue necesaria.

—Haré como que no te vi aquí —me dijo mirando hacia adelante— date prisa y alcánzalos.

Asentí y me eché a correr dando zancadas.

Gracias.

Cuando llegué a la enfermería, Eraser Head estaba de pie en la puerta. Me observó con el ceño fruncido, analizándome, como solía hacerlo.

—Ve a clases —, se cruzó de brazos.

—P-pero Yamada sensei dijo...

—Ahí dentro solo deben estar los que pueden ayudar.

Sentí un nudo en la garganta. Tenia razón.

—Solo necesito saber que está bien —se me quebró la voz. Él suspiró.

—También yo. Por eso estoy aquí afuera.

Al percibir mi angustia y ver que no me movería, suspiró haciéndome un gesto con la cabeza para que me ubicara a su lado. Esperar era lo único que quedaba.

Nunca había estado a solas con Aizawa. Su aire era un poco intimidante, pero de alguna manera me hacia sentir segura, como si pudiera confiar en él. Había algo en Eraser Head que me daba calma, y por alguna razón tenia la impresión de que lo conocía de antes de entrar a la academia. Pero eso por supuesto era imposible. Lo miré de reojo solo para darme cuenta de que también el me observaba. 

De repente escuché un alarido salir de dentro de la enfermería. Levanté la cabeza apretando los puños.

—No te preocupes, Shoto es un chico fuerte —me dijo Aizawa al darse cuenta de que me encogía de a poco— estará bien.

Unos momentos después la puerta se abrió. Era Recovery Girl. 

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Perdón el capitulo corto pero los examenes me están matando! El Viernes tengo un examen oral que me aterra. Deseenme suerte uwu...

Pd. Habra otro cap el viernes :)