Todo fluye mejor

No quiero a nadie más

CRIS

Después de que llame a Amy y le dije que quería hablar con ella, vino a mi casa. No sabía que había hecho para tenerla en mi vida. Era la mejor amiga del mundo. Después de que llego, nos quedamos en el sofá hablando y le comencé a contar todo lo que paso en la mañana y cada vez que lo repetía me sentía la idiota más grande del mundo.

A: Pero a ver... ¿en serio preguntaste todo eso?

C: Si tía y pff no sé, lo hice porque me había tomado por sorpresa. No esperaba para nada eso y en ese momento no pensaba lo que preguntaba y mucho menos a quien.

A: Dios Cris, no quiero hacerte sentir peor amiga, pero esta vez si la cagaste.

C: Ya... lo sé no me lo repitas. A parte, no sé si yo hubiera estado en el lugar de Joana me hubiera sentido una mierda. O sea hice sentir a Joana que sentía cosas por otra persona.

A: Pero a ver cris. Por algo lo preguntaste, consiente o no.

C: ...

A: ¿Aun sientes algo por Sara?

C: a ver, o sea la quiero y siento aprecio por ella, y no como pareja. Antes de serlo fuimos amigas y eso, solo eso siento por ella. En cambio por Joana... es que ella lo es todo Amy.

A: Lo se sis, te conozco y nunca te había visto así de enamorada como de Joana. Pero vas a tener que hablar con Sara y aclarar lo que te tengas que aclarar y hacer algo muy lindo por Joana porque se lo merece.

C: Si, Joana se merece todo. Algo se me ocurrirá para que me perdone.

Justo termine de hablar y entro Joana a la casa, se veía muy seria. Saludo a Amy con la mirada y luego dirigió la mirada a mí.

J: ¿Podemos hablar?

A: Bueno, creo que yo ya me voy. Las dejo y Cris... piensa bien lo que te dije.

C: Lo hare Amy, gracias por venir.

A: Chao Joa

J: Bye Amy

Amy salió de casa y se hiso un silencio algo incómodo. Joana se acercó a mí y se sentó justo a mi lado en el sofá.

JOANA

Me senté a un lado de Cris en el sofá y había un silencio entre nosotras dos. Prácticamente estuve fuera de casa todo el día, fui a caminar y a pensar. Mi cabeza no me dejo hacer otra cosa que eso. Pensar. Durante ese rato caminando, estuve a punto de tener un brote, pero por suerte logre controlarme. Pero después de luchar un rato con mis pensamientos, decidí ir a casa y hablar con Cris. Pero al llegar con lo único que me encuentro es un gran silencio entre ella y yo. A pesar de que estuve pensando que decir durante todo el día y armándome de valor para no ser débil frente a ella. Todo eso fue inútil, porque cuando la veo a los ojos, me es imposible ser fuerte, con ella soy una niña pequeña, completamente expuesta. No puedo ser fuerte con ella, ella me desarma con una simple mirada. Ella lo era todo para mí y es por eso que me dolió tanto que yo no fuera ese todo para ella, que aun existiera un espacio para Sara. Un espacio que me puede apartar por completo de ella. Sabía que Cris me quería, pero... ¿Cuánto?

Quería empezar a hablar para que ese silencio entre ella y yo se fuera pero ella fue quien hablo primero.

C: Perdóname, es que... perdóname, soy una idiota.

J: No lo eres, simplemente estas confundida.

C: no, no lo estoy. Probablemente en muchas cosas si y siempre lo voy a estar, pero si de algo estoy segura en esta vida, es que te amo. Te amo y eso nadie ni nada lo va a cambiar.

J: ...

C: Mira, Joana sé que te hice creer con mis preguntas estúpidas que aun extraño a Sara. Y no es cierto, mira no te voy a mentir. La quiero, pero como a una amiga, antes de que sucediera cualquier cosa, ella fue mi amiga y estuvo ahí para mí en momentos difíciles. No se la quiero como quiero a Eva o a Nora, eso es todo.

J: ¿Entonces no me vas a dejar? – mi vos salió como un pequeño chillido de mi garganta que se estaba empezando a cerrar y los ojos se empezaban a inundar –

C: Jamás te voy a dejar. Te Amo y juro que voy a pasar mi vida recordándotelo.

J: ¿Y si te aburres? ¿y si decides ser feliz con alguien más? Cris... yo realmente te amo y si me lo preguntan mil veces siempre voy a decir lo mismo, eres todo para mí. Pero no estoy segura que yo signifique lo mismo para ti.

CRIS

Me dolió bastante que Joana no pensara que la amaba con la misma intensidad con la que ella me ama. Tenía que demostrárselo. Tengo que hacerlo.

C: Joana... yo te amo, y te lo puedo decir millones de veces, pero te lo tengo que demostrar y toda la vida lo voy a hacer. Y yo no quiero ser feliz con alguien más. Yo solo quiero ser feliz contigo ¿Entiendes?

J: ... - sus ojos estaban llenos de lágrimas, me acerque, le tome la cara y le limpie las lágrimas. –

C: no quiero a nadie más, no necesito otra persona parecida o superior a ti. Porque nadie podrá igualar lo que tú haces en mí, nadie me hará feliz tan solo con sonreír, nadie me escuchara y sabrá guardar mis secretos como tú, nadie me besara con tanta dulzura, nadie me dará abrazos muy fuertes, capaces de calmar el dolor que a veces llevo, nadie me hará el amor como solo tú lo haces logrando así que tu olor se impregne en mi piel, nadie estará para mí no solo en los buenos días sino también en los malos, nadie tendrá tu lado tierno, nadie entenderá mis sueños, nadie comprenderá las grandes caídas que he tenido en la vida y la manera en que me levante, nadie aceptara los errores que cometí y me escuchara cuando le explique qué jamás quise eso, nadie será como tú, nadie me tratara como tú, nadie en este mundo podrá complementarme tan bien como tú. Es por eso que no quiero compartir mi vida con alguien que finja aceptarme, quiero compartirla con alguien que me acepte y que no tenga vergüenza o me quiera cambiar, quiero a alguien que me quiera porque el futuro que ve conmigo es maravilloso. Quiero compartir mi vida contigo, porque te amo demasiado, tanto que no puedo estar sin ti. No puedo vivir sin ti.

J: Yo tampoco puedo vivir sin ti

C: Perdóname, no sabes cómo me duele saber que esas lagrimas son por mi culpa, que por mi culpa estas triste. Te amo, te amo, te amo. ¿Podrás perdonar a esta idiota que te ama?

J: SI... te perdono Cris, me raye mucho hace rato. Yo también te amo y mucho.

Nos quedamos abrazadas, no quería soltarla, quería estar con ella siempre y cuando digo siempre, es hasta que ambas seamos unas viejitas.