Noche larga

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JOANA

Mi juego no había funcionado del todo, Cris terminó ganándome pero pff creo que en ningún momento perdí, nunca perdería mientras tenga a Cris a mi lado. Cris me había prendido mucho con lo que hizo. Así que cuando termine de darle su debida atención a sus pechos. Subí a sus labios y comencé a besarla muy intensamente mientras con mis manos buscaba más contacto con la zona intima de Cris. Cuando llegue, estaba demasiado mojada, así que no espere más y le metí 2 dedos para comenzar a follarla. Empezó a ahogar sus gemidos en mi boca, hasta que comencé a bajar más y sin dejar de follarla comencé a hacerle un oral, la espalda de Cris cada vez se arqueaba más, una de sus manos se aferraba a las sabanas y la otra a mi cabeza. Cris tenía el fetiche de que cuando está a punto de correrse me toma de la cabeza y me jala un poco del cabello, eso me encantaba.

C: Ahhh Joana no ahhhh no pares, ya casi llego Ahhhh

Eso solo me motivo a hacer el oral con más intensidad. Me di cuenta que Cris llego al clímax cuando el sabor cambio. Sabía que se había corrido, pero no deje que descansara mucho ya que después de hacer eso me quite el conjunto que tenía y me coloque arriba de ella para que nuestros clítoris quedaran juntos, las dos estábamos empapadas y comencé a frotarme con ella.

J: Ahhhhh si

C: Ahhhhh dios

Seguí así como por 30 min, hasta que llegue al orgasmo y cris también por segunda vez, me recosté a un lado de Cris a recuperar el aliento, estaba súper sudada y agotada, pero aun quería más. Cris se paró de la cama y fue a sacar algo de un cajón.

C: Me toca a mi amor.

En eso veo como se pone en medio de mis piernas y mete el juguetito con el que jugamos la otra vez. Cris lo comenzó a mover de una manera increíble y mientras lo hacía estimulaba mi clítoris. No tarde mucho en llegar a mi segundo orgasmo, pero eso a ella no le importo y siguió. No paro hasta como unos 15 min después. Esta mujer me iba a matar de placer algún día.

Esa noche en realidad no dormimos más de 2 horas. Al día siguiente apenas los levantamos para ir al aeropuerto. Claramente en el vuelo nos dormimos, caímos rendidas. Cuando estábamos por aterrizar la azafata nos despertó para prepararnos para salir. 

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Un pequeño extra, estas niñas se pusieron cachondas jaja.

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