Brote

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LU

Joana después de la bofetada que le día solo se tomó de la cara.

L: ¿Por? Pff Joana te apoye en todo. Me mude contigo. Deje mi ciudad para venir contigo, para que tu carrera creciera. Deje amigos allá en Barcelona y ¿así me pagas? Es que eres una mierda de persona.

J: Lu, perdón. – se le cortaba la voz -

L: Una simple disculpa no arregla esto. Me lastimaste, ¿Qué eso es normal en ti? ¿Lastimar a la gente que quieres? ¿Me quieres?

J: Claro que te quiero. Pero es complicado.

L: Pues hazlo sencillo.

J: La amo. Te quiero pero a ella la amo.

Esas palabras me habían dolido hasta el hueso. Estaba muy lastimada y enojada por la situación. La verdad no pensaba claramente y probablemente estaba diciendo cosas de las que después me arrepentiría.

L: La amas... Yo te apoye en todo Joana, te acepte con tu TLP, acepte tomar el riesgo de estar con alguien como tú.

J: ¿El riesgo? – No tenía que decir eso, pero ahora solo mi ira hablaba –

L: Si, pff pude haber estado con alguien normal y te elegí a ti. Sabes que no se ni por qué lo hice. Pero bien me haces un favor. Me libre de una puta loca inestable, espero que Cris te acepte así de averiada. Aunque debería quedarse con Sara, al menos así tendría alguien normal en su vida.

J: ...

Dije todo eso sin pensar, no había estado bien y vi algo en los ojos de Joana romperse, pero no podía más, mi corazón estaba roto. Salí de casa y me fui de ahí. No sabía a donde pero salí de ahí, deje a Joana en la casa sola.

JOANA

Estaba muy mal en ese momento, todo lo que me había dicho Lu me mato. Lo peor es que todo era verdad, era una mierda de persona, lastimaba a las personas que me querían y Cris probablemente esté mejor con Sara. Mierdaaaaaa, básicamente todo lo que había trabajado en tanto tiempo se vino abajo ese mismo día. Me volví a sentir como un monstro. Las voces en mi cabeza empezaron a atacarme, la ansiedad empezaba a trepar por todo mi cuerpo. Las palabras de Lu me retumbaban una y otra vez en la cabeza. Me senté en el suelo y me agarre la cabeza lo más fuerte que pude, quería que las voces se fueran, quería silencio. Me puse de pie y comencé a caminar mucho y a tirar y romper cosas. Las cosas se veían borrosas, necesitaba a alguien, aun no llegaba el brote fuerte del todo pero no quería que llegara. Necesitaba a alguien, necesitaba marcar a alguien. Tome mi teléfono y marque a mi número de emergencia.

Ch: Hola Joa, ¿Qué tal?

J: Che- Chesko, no estoy bien. Ayúdame. – deje caer el teléfono pero aun oía a Chesko en la otra línea.-

Ch: ¿Joana? ¿Hola? JOANA CONTESTA...

Fui al cuarto y empecé a buscar mis pastillas pero no las encontraba, busque en todos los cojones, no podía pensar en ese momento, mi mente solo no acordaba donde estaban, en eso abrí un cajón encontré un cúter. Lo mire durante un rato, no dejaba de verlo mientras mi cabeza no paraba de girar.

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Creo que Lu no sabe lo que sus palabras le causaron a Joana. ¿Ustedes que piensan? ¿Lu exagero? o solo fue el enojo hablando. 

Todo fluye mejorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora