Harry Payne es un exitoso miembro de la Policía Científica. Logró el puesto deseado, convive con la mujer que ama, y disfruta de los amigos de siempre. Hasta que Virginia Wade regresa a su vida con una noticia inesperada que puede arruinar su matri...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
VOLVER A VERTE - Capítulo 14. Un puñal por la espalda
-¡Bajen las pistolas!
Todos empezaron a reír a carcajadas.
-¡Ja,ja,ja! Ya niña, vete con tus padres... esto no es un juego -espetó Marston Rakes.
-Lo mismo digo, señor, no es un juego. - murmuró, cerrando sus manitos.
-¿Oíste eso, Marston? Cree que puedes enfrentarnos - se burló otro.
-¡No puedo hacer justicia por mano propia! - expresó Kyara con vehemencia.- Déjenlos ir y no tendré que hacerlo.
-¿De dónde salió esta niña? ¿Han visto como habla? Ni dos años tiene.
-¡Tengo cuatro!
-Niña, quítate -le ordenó Drake, pero ella no lo escuchó.
-Usaré mis poderes - amenazó Kyara, furiosa.
-Esto no es una serie de Netflix, para tu información estas son armas reales.
-Mis armas también son reales - advirtió con rabia. Todos rieron socarronamente, sin creerle ni una palabra. -Bajen las pistolas o lo lamentarán. - continuó Kyara sin amilanarse.
-¡Sal del medio! -gritó Red, por primera vez aterrorizado -¡Vete, niña! - ella negó con la cabeza.- ¡Vete con tus padres, maldita sea!
-No lo haré, señor.
-¡Te quitarás por las buenas o por las malas...!-Morse se acercó dispuesto a sacarla por la fuerza; no tenía suficiente sangre fría como para ver morir a una criatura; la metería en el auto y la encerraría hasta el que el peligro pasara.
-No, déjame...¡tengo que defenderte!
-¡Que te vayas, cría! -Cuando intentó agarrarla del brazo, Kyara se soltó bruscamente, Morse y Red salieron expulsados hacia atrás, golpearon contra la pared, quedando a salvo detrás de la puerta del coche que estaba abierta. Los atacantes quedaron tan impresionados que bajaron las armas.
-Lo siento, fue sin querer, lo hice para protegerlos. ¿Están bien?
-¿Han visto lo que hizo? -reaccionó un colaborador de Colin Croft- Es de...de ciencia ficción, no puede estar pasando.
-¡Vamos, ella no fue, Rakes!
-Firmaste tu sentencia de muerte, ¡pendeja del demonio!
-No la toques, Kevin-lo detuvo Rakes jadeando, sin saber cómo reaccionar. Ninguno de sus compañeros sabía sobre la búsqueda de Esperanza, sólo él, que era la mano derecha de Croft. No se animaba a creer que la había encontrado, era inverosímil que fuera ella. Siempre creyó que los poderes de "Esperanza" era una fantasía de Colin, pero evidentemente se había equivocado.-Déjame pensar...
-¡No tienes nada que pensar, Marston!- exclamó Kevin, alterado.-¡Me cansé de perder el tiempo! Tenemos un objetivo y es llevarnos a Red y a Morse en una bolsa negra, ¡y lo más prudente es no dejar testigos!
