Capítulo 28

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Sólo una vez he visto llorar a mi padre y fue cuando me tuve que marchar a Corea para perseguir mi sueño.

Hoy no sólo sus lágrimas habían sido debido a mi partida, sino porque esta vez no me iba sola, esta vez partía de la mano de la persona que me hace sentir inmensa, la persona que se ganó mi corazón y el de mis padres.

Mi madre prácticamente le rogaba a Jennie porque estuviera en contacto con ella más seguido y que tratará que yo no olvidará llamarlos todos los días. Obviamente mi ahora novia no se opuso, por el contrario, me miró con cara de pocos amigos debido al descuido que aveces tenía con mi familia.

Yo también lloré, No lo puedo negar. Incluso mis lágrimas aún corrían por mi mejilla cuando estábamos en el avión, lágrimas que me ayudaron a estar envuelta en los brazos acogedores de mi novia que no me soltó ni un segundo y se encargó de brindar el apoyo que necesitaba en ese momento.

Ahora estábamos bajando del coche de la empresa que nos había traído directo al edificio donde se encontraba nuestro apartamento.

Pude respirar ese aire tan inherente de Corea, incluso marqué la diferencia con el de mi país. Definitivamente este no era mi hogar. Casi pude temblar cuando miré al suelo y caí en cuenta que ya habían pasado las mejores dos semanas de mi vida, donde me di cuenta de lo tan pérdida que estaba y a la vez pude encontrarme en una persona.

¿Y si todo había sido un sueño?

¿Y si en verdad Jennie y yo nunca nos hemos besado?

¿Y si ella y yo nunca estuvimos juntas?

¿Puede haber sido esta maravilla solo un producto de mi imaginación?

No

No lo és

Aún puedo sentir sus dedos entrelazados con los míos. Ella está a mi lado, ella es mía y ahora yo soy suya, nada podrá cambiar eso. Ya no somos Jennie Y Lisa dos integrantes del grupo blackpink , ahora somos Lili y Nini dos personas que se aman.

-Le contaremos a la chicas cuando estemos listas Lili- dijo mi novia apretando mi mano mientras el elevador subía para llevarnos a nuestro hogar.

Ciertamente ninguna de las dos estaba preparada para hablar con nuestras amigas , nos preocupaba más su reacción que la de nuestros padres prácticamente. Sería una sentencia, ya que todo lo que pase en el grupo nos afecta a todas. Ahora Jennie y Yo teníamos una relación amorosa, eso podía afectar nuestra convivencia, desiciones, arruinar nuestras carreras, éramos conscientes de lo que podía suceder si algún medio se enterara de nuestra relación, no sólo sería incumplir con el contrato con la empresa, eso podría siginifica un caos en el mundo del KPop donde una relación entre dos persona del mismo género estaba literalmente mal vista.

Por eso teníamos miedo de lo que pensaran Jisoo y Rosé, aunque conociendo a nuestras amigas podría costarles un poco aceptar el hecho de que ya no somos simples amigas pero al final terminarían apoyándonos, ¿Cómo lo sé? Eso está muy claro, somos una familia y nuestra  felicidad es lo primero, además todas nos queremos mucho.

-¿Quiere decir que ahora no te puedo besar?- pregunté haciendo un puchero y ella rió suavemente.

-Ni en público, ni frente de ellas por el momento Lili- confesó con frustración.- Créeme yo tampoco sé si podré aguantar no probar esos Labios tuyos- Bufó.

-Bueno al menos por la noche si me puedo escapar a tú habitación- Dije con mi sonrisa pícara mientras le guiñaba. Ella negó con la cabeza divertida.

El sonido del elevador se hizo presente, avisando que ya habíamos llegado a nuestro destino. Tomé mi maleta y Jennie hizo Lo mismo, caminamos tomadas de la mano por el amplio pasillo hasta que llegamos a la puerta de nuestro apartamento y tuvimos que cortar el contacto.

INJUSTICIA || JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora