CAPITULO 3

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DENNIS.

Tenía a Ashley en mis brazos, dormida, o eso quería pensar, la mire y note que tenía las piernas y manos sangrando, estaba sin una camiseta y su piel se sentía fría. Más allá de mirar sus heridas, me percate de esas cicatrices que parecían estar en brazos y pecho, y algunas parecían recientes porque no se habían curado del todo. 

No podía dejarla aquí, podría morir de frio, o alguien, le podría hacer más daño, estaba en un estado muy vulnerable, pero, si la llevo sería un peligro para nosotros, todos estaban locos, y querían tomar la luz, así que no podía pensar con claridad.

- Solo déjala aquí, Dennis – dice Patricia, cerré los ojos y sacudí la cabeza. Tanto Patricia como Hedwing querían la luz para hacerse cargo, bueno Hedwing solo quería ver pero yo me tengo que encargar.

- La bestia me dio la luz a mí, y debe ser por algo. – digo manteniendo la calma. Mire de nuevo las marcas que tiene en el brazo, parecían cortes y quemaduras, la bestia seguro también las vio y es por eso que la dejo viva. Secuestre a una chica y le hice vivir un infiero cuando en si su vida ya lo era. – cállense por un segundo. – grito. – tome una decisión, ella vendrá con nosotros. – todos se calmaron.

Cierro los ojos, y salgo del lugar donde estaba la luz, Hedwing, se acerca corriendo hacia el lugar pero yo, le impido el paso, me mira con miedo.

Me cruzó de brazos, y miro a Patricia, que estaba mirándome enojada. Me acerco hasta ella, pero solo se voltea dándome la espalda.

- Ella no solo nos pone en peligro a nosotros, pone en a peligro a Kevin. – dice dándose vuelta bruscamente.

- Yo sé que puedo controlar esto, es la única chica que no hizo nada malo. – Patricia me mira sorprendida.

- ¿La mucha de pelo negro y con ondas? ¿esa es la chica que ahora está dormida en los brazos de Kevin? – asiento con la cabeza. – ¿cómo es posible? La bestia le perdonó la vida eso significa que es pura. – vuelvo a asentir con la cabeza.

Patricia se tapa la boca con la mano y se le comienza a llenar los ojos de lágrimas, entiendo ese sentimiento pero creo que el llorar es demasiado para algo que no es la gran cosa.

- ¡Señor Dennis! – dice Hedwing tomándome del brazo asustado, si no fuera algo importante no haría esto, él nunca me pone una mano encima. – la bestia, la luz – dice agitado.

Con tan solo eso entendí, mire hacia el lugar donde estaba la luz y vi como la bestia se estaba acercando, aparte a Hedwing y corrí para poder alcanzar la luz antes, estaba más cerca así era seguro que iba a llegar primero.

Cuando estaba a punto de sentarme la bestia me toma y me arroja fuera del asiento, caigo al suelo y miro como este toma la luz, Patricia se pone a mi lado y comienza a preguntarme si estoy bien pero no podía hablar esta impactado sobre lo que acababa de pasar, la bestia le dio igual que yo estuviera en la luz solo me saco y la tomo, ahora Ashley esta con él, desprotegida o seguro está corriendo por todo el callejón a duras penas porque su cuerpo no pude más de dolor, pero hasta que la bestia no la vea muerta seguro no para.

- no le puede hacer nada, ella es pura. – dice Patricia mientras pone sus manos en mis hombros 

- No estoy seguro de eso, seguro no le va a dar importancia.

Me pongo de pie y paso mi mano por mi cabeza, estoy preocupado y a la vez enojado, no pensé que esto pasara, la bestia nos tiene que hacer caso o tiene que aun que sea respetar a quien tomo la luz. 

- Dame la luz, cosa peluda y horrible, deja tranquila a la amiga de mi novia. – dice Hedwing mientras trata de sacarle la luz.

- Hedwing, déjalo, no vas a poder. – digo tomándolo de un brazo y sentándolo en otra silla.

Tomo asiento al lado de él y nos quedamos en silencio esperando, bueno Hedwing solo lloraba, lo cual me molestaba pero no le puedo decir nada porque es un niño de nueve años.

Paso un buen rato desde que la bestia tomo la luz, Hedwing me estaba hablando sobre como beso a esa tal Cayse pero yo no le prestaba atención, solo miraba como la bestia se encontraba en la luz, teniendo todo el control, esto me estaba molestando.

...

Me pongo de pie y comienzo a caminar en círculos, estaba tratando de centrarme en otra cosa pero nada me distraía, solo tenía la imagen de Ashley corriendo y pidiendo ayuda muy desesperada. No puedo hacer nada por ella, ahora tengo que superarlo y dejarla ir, ella solo era una chica más, como las otras, tengo que olvidarla, olvídate de ella Dennis. Levanto mi vista y miro a Hedwing el cual tenía una mirada de miedo, tome aire y me di vuelta. Me encontré con la bestia, o mejor dicho con el pecho de él, mi respiración era agitada, tengo que admitir que el tenerlo cerca me pone nervioso.

- Más te vale que hagas bien tu trabajo si quieres seguir estando en la luz. – me dice con esa voz gruesa, que me pone los pelos de punta del miedo, solo mantuve la cabeza baja no quería ni mirarlo. – ve y toma la luz ahora, y no dejes que los otros te la arrebaten. – asentí, y me acerque a la silla, mire la Patricia la cual me miraba preocupada.

Me siento y cierro los ojos.

 Al abrirlos me encuentro enfrente de un espejo, primero miro las heridas, estaban vendadas con una tela, pero sirvió de algo. Me las comienzo a quitar con cuidado, ya que gracias a la sangre seca se habían pegado a la herida, así que dolía pero era soportable. Cuando ya las pude sacar me voltee para tirarlas pero me encontré con Ashley tumbada en la cama, me acerque a ella sin dudarlo, y me fije si se encontraba bien, por lo que vi seguía respirando, así que me calme.

- Voy a curar mis heridas y después me encargo de ti. – digo mientras acaricio su cabello con delicadeza.

Busque el kit de primeros auxilios y me puse enfrente del espejo, primero desinfecte la herida. Mientras lo hacía, Patricia y Hedwing, me pedían la luz, deje que Hedwing la comparta conmigo ya que estaba muy ansioso.

- Espera a que termine Hedwing – digo limpiando la herida del pecho.

- Carajo, esto es muy cool – dice viendo la herida. – oh, esa es la chica que secuestraste. – dice al ver el reflejo de Ashley en el espejo.

- Esta herida, así que tengo que terminar rápido. así la curo a ella.

Al terminar miro en el espejo el resultado, quería ver que todo estuviera bien, tampoco quería que por un error mío muera Kevin o mejor dicho el cuerpo de Kevin.

- ¿Cómo se encuentra la chica? – me pregunta patricia mientras la miraba por el reflejo del espejo.

- Me fije si estaba lastimada, tiene cortes y pedazos de vidrios en las manos y piernas. – me doy vuelta y la miro. – pero está dormida, su cuerpo seguro estaba muy cansado

Patricia se acerca a ella y le acaricia la cara suavemente.

- Pobre florecita, sufrió demasiado. 

– y más por culpa mía, no puedo creer todo lo que aguanto. - digo arrepentido.

 – Dennis, cuídala bien, ¿sí?

Dicho esto Patricia deja la luz y me deja a mí solo.

Busco las cosas que iba a utilizar para curar a Ashley, mientras lo hacía escuche como se comenzaba a quejar de dolor de las heridas, así que tenía que apurarme.

EL AMOR PUEDE SER ALGO PELIGROSO- (fragmentado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora