GANAS NO INDICADAS +18

29

No tengo ganas de nada, definitivamente aunque me cueste decirlo, Draco me humilló. Se acabó, no seré ningún juego para nadie. Me levanté para arreglarme y salir lo más pronto posible, una de las razones es obvia pero por otra parte necesito que los gemelos Weasley me organicen el tema de las bebidas para que puedan entrar a la fiesta de este fin de semana.

- ¡Fred y George! - los encontré en los pasillos, tramando algo seguramente.

- Justo a la chica que queríamos ver - se adelantó George.

- Tengo noticias, sé la contraseña pero a cambio deberán hablarme sobre el tema de bebidas ilegales y gracias a vosotros tengo que decorar la maldita fiesta - me crucé de brazos.

- El tema de las bebidas está complicado, las devolvimos a un sitio secreto fuera de Hogwarts y tardaremos lo justo para recuperarlas - se rascó la nuca Fred.

- Me he metido en un problema, como no consigáis el alcohol vais a tener un problema - les señalé con el dedo a los dos.

- Está bien mamá - replicó George.

- Es increíble la paciencia que hay que tener con vosotros - reía por lo bajo mientras lo decía.

- Creo que podemos adelantar tu trabajo si nos saltamos DCAO - me miraron maliciosamente los gemelos.

- Allá vamos - recordé que tendría que ver a Draco por lo que acepté.

Me agarraron los dos la mano, uno por cada lado y se pusieron a correr sin avisarme, casi me comía el suelo pero entre risas nos escapábamos a la casa de Slytherin, era divertido, todos los alumnos que nos rodeaban y nos veían ponían una cara de desagrado por el ruido que estábamos haciendo pero eso no iba a impedirnos que nos siguiéramos divirtiendo juntos.

- Me duele el estómago de tanto reírme - me dejé caer al sofá de la sala común.

- Eso fue demasiado gracioso - exclamaron los dos.

- Bueno, supongo que para la fiesta tendremos que decorarlo con tonos verdes y oscuros, creo que las bebidas podrían ir en esa esquina y en la lámpara podríamos poner luces de colores, ¿vais entendiendo más o menos?

- Tienes muchas ideas en la cabeza señorita t/a, pero te va a quedar genial si vas a hacer lo que estás mencionando - comentó George con los brazos en las caderas.

- ¿No se suponía que iba a ayudarte yo, preciosa? - apareció una voz.

- Riddle, no tengo tiempo para tus juegos - exclamé sin ni siquiera mirarle mientras movía la mesa con ayuda de Fred donde indiqué.

- Gemelos Weasley, largo, ir a por las bebidas que yo tengo que ayudar en esto - abrió la puerta.

- ¿No vas a parar hasta que se vayan? - le miré indignada mientras movía la cabeza de un lado a otro acompañada de una sonrisa.

- ¿Estás segura, t/n? - preguntó Fred.

- Estaré bien, puede que aparezca muerto un tal Mattheo pero eso no va a importar - sonreí inocentemente.

Soltaron una pequeña risa con las que se ganaron la mirada del chico con rizos. Cuando se fueron, cerró la puerta y sin decir ni una palabra me ayudó a seguir moviendo la mesa que dejé a medias.

- ¿No vas a decir ahora nada? - pregunté mientras rodaba los ojos.

- No, solo me gusta molestarte - contestó.

- Que gracioso - respondí con sarcasmo - ¿por qué no estás en clases?

- Lo mismo te tendría que preguntar yo a ti.

- Tu respondes primero, agarra ese jarrón que lo guardaremos en el almacén.

- Me quedé dormido, además, no suelo ir a clases, me aburren.

- No creo que seas el único que piense así - reí.

- Supongo, ahora te toca responder y no me sirve la excusa de la fiesta, sé perfectamente que eres una alumna aplicada y buena - no sabía que responder a eso sinceramente.

- No sabía que tenía un acosador, en realidad no he ido porque no tenía ganas, además, no tengo fuerzas para soportar el carácter de Snape a primera hora un viernes.

- ¿Cuándo será la segunda prueba del Torneo? 

- Es el domingo pero me hay rumores que la tercera prueba será a fin de curso, las dos escuelas se irán y volverán, solo faltaría que Dumbledore nos confirmara esa teoría.

La verdad es que Mattheo cae bien cuando no se comporta como un maldito arrogante, la verdad es que es bastante gracioso, nunca pensé que me agradaría su compañía. Estuvimos arreglando la sala cuando terminamos, estábamos exhaustos, nos dejamos caer al sofá los dos a la vez.

- Pensé que mi muerte estaba llegando - susurra con la mano en el pecho, nunca más volveré a mover ese armario, pesa como 100 kg.

- Exagerado - le dí un golpe en el hombro de broma - te recuerdo que cuando termine la fiesta tendremos que colocar las cosas a su lugar.

- Nosotros no lo haremos, cumplimos nuestra parte del trato y lo único que nos queda sería preparar las bebidas.

- Si las traen ahora nos beberemos una botella por el esfuerzo - reímos los dos.

Abrieron la puerta y entró la pandilla, Crabbe y Goyle tenían la boca abierta junto con Pansy y Astoria, no les iba a decir nada porque seguramente se podrían quisquillosas solo para no darme el gusto de haber hecho mi trabajo perfectamente, Blaise sonríe y se dirige hacia mi.

- Creo que para las próximas también harás la decoración - sonreímos, Zabini es un amor de persona y la más graciosa de todo Slytherin.

- La verdad es que Mattheo me ha ayudado un montón con todo esto - le miro y pasa su brazo por mis hombros.

- Ella tenía las ideas claras, es una auténtica líder - me sonrió.

- Patético - bufa Malfoy.

- ¿Algún problema, principito? - pregunta de broma el chico de rizos.

- La verdad es que sí y tú eres el causante - maldice con furia.

- Patético, bueno, me voy que he quedado con un chico - me burlo junto con Riddle con una mirada de compenetración, nos vamos a divertir juntos este curso porque tenemos una cosa en común, odiamos al hurón.

- Esa es mi chica, suerte con el chico - me guiña un ojo Zabini.

Llego temprano a la biblioteca para reunirme con el hermano de los gemelos Weasley, me parece extraño que todo esté tan tranquilo, no encuentro ni a Hermione ni a Hestia, supongo que estará con Neville.

- Hola Ron - saludé mientras me acercaba a él.

- ¿Dónde has estado en todo el día? - preguntó - no pienses q-que soy un acos-sador o algo, solo que no te he visto ni en clases ni en el Gran Comedor en la hora de la comida y he pensado en traerte algo por si tienes hambre...

- Que mono, gracias, estaba ocupada con la decoración de una fiesta mañana por la noche, si quieres puedes venir e invitar a Her t Harry - agarré el táper y me fijé en su carita, sé que le encanta comer - ¿quieres? Si quieres no hace falta que me preguntes, solo coge con el otro tenedor.

Estaba comiendo unos espaguetis de tomate, muy buenos por cierto, nunca me quejaré de la comida del Gran Comedor, realmente deliciosa. Estábamos comiendo cuando agarramos los dos el mismo fideo, casi nos damos un beso pero yo lo corté.

- Gracias por el detalle, Ron - le dí un beso en la mejilla - pero bueno, vamos a estudiar que se nos va el tiempo.

- Está bien - estaba ligeramente sonrojado...

------------

Espero que aún disfrutéis con la historia...

Byee!!