Pansy Potter, de soltera Parkinson, se encontraba sentada en una cómoda silla tomando una refrescante limonada bajo una sombrilla en el patio de la mansión Potter, miraba como su esposo estaba siendo un buen anfitrión mientras ellas descansaba, tener 7 meses de embarazo era bastante cansador, aunque no podía estar más feliz. Estaba esperando a su segunda hija. Como corría el tiempo, hace 7 años habían salido de Hogwarts, hace 5 años se habían casado y ahora tenían una linda familia mientras cumplían sus sueños, porque si, ambos habían logrado sus objetivos al salir de Hogwarts. Harry fue el mejor aprendiz de auror y en poco tiempo se volvió en uno oficial, no acepto ningún tipo de preferitismo por ser Harry Potter, tomo el mismo camino que todos sus compañeros y de apoco había estado escalando posiciones, ahora solo era un auror y jefe de misiones, pero Harry era ambicioso y estaba apuntando para ser Jefe de Aurores. Pansy y sus amigos sabían que lo iba a lograr. Mientras que Pansy junto con Theo y con la ayuda de Neville logro hacer un perfume que ocultaran las feromonas y era un verdadero éxito, ella se sentía sumamente orgullosa de su logro, pero no se había quedado solo en ello sino había creado distintas esencias para las tres subcategorías de sexo, que eran muy famosas entre los betas.
-Tía Pansy-una pequeña voz la saco de sus pensamientos. Era Teddy Lupin, quien cada día se parecía más a su padre, aunque eso para las personas no tan cercanas no lo podían ver porque siempre cambiaba su color de cabello, como ese día que tenía el cabello azabache al estar en la casa de su padrino. -Mi abuelita me dijo que no debía molestarla, pero ¿Cuándo va a nacer mi primita? -pregunto poniendo su manita en el abultado vientre.
-En menos de dos meses, Teddy-contesto regalándole una sonrisa. Ted se emocionaba mucho con sus embarazos.
- ¿No puede ser antes? -un ligero puchero apareció.
-No, cariño.
-Ted, no molestes a tía Pansy-la fuerte vos de un niño se hizo presente. Regulus Snape corría hacia ellos con el ceño fruncido. -Ella esta cansada y la vienes molestar con tus tontas preguntas.
-No son tontas, Reg.
-Claro que la son.
Disfrutaba tanto de la compañía de los dos ahijados mayores de su esposo. Se llevaban por dos años y a pesar de que peleaban mucho siempre están juntos haciendo de las suyas. Regulus Remus Snape había heredado el cabello negro y un poco de la seriedad de su padre, mientras que de su madre había heredado sus ojos heterocromáticos violeta y dorado, además del carácter, era un niño bastante particular que le gustaba mucho los libros y estar al aire libre, que para sorpresa de muchos se complementaba muy bien con el humor y espíritu libre que Ted había heredado de su madre. Los dos chicos eran muy especiales.
-Niños, no molesten a Pansy-apareció Ginny, quien cargaba un niño de un año. Su ultimo hijo. -Me dijo un pajarito que tío Blaise tiene ranas de chocolate-ante las palabras de la pelirroja, los niños salieron corriendo en búsqueda de su tío.
-No van a dejar en paz a Blaise-dijo Pansy riéndose.
-Esa es la idea, amiga, esa la idea-dijo tomando asiento al lado de la pelinegra. - ¿Necesitas algo?
-Nada, estoy bien por el momento-sonrió. -Lucian no te suelta.
-Para nada, aun no se acostumbra a estas reuniones-comento besando el castaño cabello de su hijo.
Ginny y Blaise fueron los primeros en tener un hijo, Leonardo Thomas, quien ahora tenia 6 años, pero aun así no se casaron hasta que Leo cumplió los dos años para que al año llegara la consentida de la casa, Segal Lucia. Ellos heredaron el cabello pelirrojo de su madre, aunque mas oscuro, mientras que heredaron la piel morena y los ojos cafés de su padre. Ahora eran una feliz familia de cinco. Tanto Ginny como Blaise cumplieron con sus metas, Ginny se volvió Buscadora de las Arpías por 4 temporadas completas, al final colgó a escoba al tener a Segal y se dedico a ser la corresponsal de deporte en el Quisquilloso, un trabajo que le daba tiempo para disfrutar del Quidditch y de disfrutar de su familia, mientras que Blaise refundo la joyería de su familia, RED GODNESS, y logro con la ayuda de Hermione y de la profesora McGonagall crear joyería para la protección de omegas, prontamente se volvió un éxito en la comunidad mágica y no solo en Inglaterra. No podía estar más orgulloso de todo lo que había logrado.
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Mi serpiente -HANSY-
Hayran KurguHarry al volver a cursar su último curso en Hogwarts después de casi dos años de derrotar a Lord Voldemort, se reencuentra con una serpiente en particular que siempre a hecho revolotear su corazón, pero lo que no se esperaba que esa hermosa serpient...