CAP 5 Una historia

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"SEGUIMOS ENTRE LAS BESTIAS IGNORANTES,
APARENTANDO SER ÁNGELES"

<<LAS CUATRO REINAS>>

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–—No puedo creer que volviera de la muerte.

Puse una mueca al escucharlo. Reconocía esa voz como una extensión mas de mi cuerpo. Era Carlos el gemelo de Peter y mi viejo mejor amigo, lo extrañaba pero el había decidido dejar de hablarme y no podía hacer nada, era su decisión.

Valla sorpresa me llevo por andar despertando temprano.

–—No digas eso - lo reprende Diana–—ella no volvió, nunca se fue. Si hubiera muerto no estaríamos aquí.

¿Por qué está él aquí con ella?

–—Pero.... - veo que quiere refutar pero al final decide callar y yo decido que es mi momento de entrar.

–—Buenos días, Diana - entro como quien no sabe la cosa y me siento al lado de ella dándole un beso en su mejilla –— ¿qué hay para desayunar?

–—Buenos días, un especial –—sonríe y se yo la acompaño.

Un especial es lo más rico del mundo, bueno tal vez exagero pero a mí me encanta. Es pan tostado con huevo, jamón, queso, tomate y salsa roja y rosada. Una delicia.

–—¿Te he dicho antes que te amo? Porque enserio te amo.

Ella ríe mostrando sus dientes perfectos.

–—No, pero deberías hacerlo más seguido.

–—Nota mental –— finjo escribir algo–— listo, Baby. ¿Sabes dónde está la tía?

–—Bueno, ya me voy. Se me cuidan - nos dice Carlos despidiéndose.

–—Chaoooo - decíamos las dos al mismo tiempo –— nos quedamos calladas hasta que escuchamos la puerta cerrarse–— ¿No le hablas?

Cuestiona.

–—No es eso, por mi yo le hablara normal pero... El prefiere no traicionar a su hermano.

–—No deberían perder una amistad porque las cosas entre ustedes no funcionaron.

–—Es que eso es poco, Diana, las cosas entre nosotros terminaron en un cataclismo.

Niega.

–—¿Qué haras hoy?

–—Nada, volverme uno con la casa es una buena opción.

–—¿Quieres venir conmigo? Puedo presentarte a mis nuevos amigos.

Los misteriosos amigos de Diana me tiene en incógnita, no estaría mal conocerlos y quitarme un poco de curiosidad.

–—¡Al fin!, pensé que jamás me los presentarías.

–—Todo a su tiempo.

Claro eso es lo que me dicen todos: todo a su tiempo, todo a su momento. La frase me deja un sabor amargo pero finjo mi mejor sonrisa de entusiasmo para Diana.

•••

Miró las calles pasar mientras voy en el auto de la tía con Diana al volante cantando una de sus canciones favoritas mientras yo voy aburrida queriendo lanzarme del vehículo por los graznidos de Diana al cantar.

Nos dirigimos al bosque a un pequeño campamento que harán sus nuevos amigos y así poder conocerlos, según ella están emocionados por conocerme pero hay algo que no me da buena espina sobre esa gente, tal vez estoy juzgando sin conocer pero es un presentimiento que no me puedo sacudir por más que lo intente. Llegamos a medio día cuando el sol está en su punto más alto, estacionamos a mitad de la carretera.

Corazón De FuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora