Wakanda Forever

Capítulo Doce

     El ambiente se podía cortar con un cuchillo, la familia real, Nakia, las Doras, Bucky y Azari se encontraban en uno de los muchos salones del palacio. El pequeño había corrido emocionado a los brazos de Bucky anhelante de su afecto y aroma pero pronto se todo el rompecabezas empezó a mostrarse delante del omega y eso fue demasiado. Azari le relato todo, desde su malestar hasta la ceremonia de Dakari, Bucky lo escucho atentamente y se dedicó solo a él de manera que supiera que nadie más robaría su atención.

     Para cuando el mayor levantó la mirada enfocando a T'Challa con algo que el rey no pudo descifrar, probablemente se estaba debatiendo entre culparlo o no; por otro Nakia sintió la fuerza del desprecio del de cabello largo de manera tan intensa que incluso se sintió ruborizar. Pero eso no iba a amedrentarla, sus creencias eran firmes y ella era parte de esta manada el soldado no, él era el intruso y debía aprender su lugar.

     O eso pensó al principio pero el claro malestar del omega solo iba en aumento cuando T'Challa le quiso explicar la situación, que él no había estado de acuerdo con la separación y que no había querido forzar a Azari a permanecer en palacio si el menor no se encontraba cómodo después de lo ocurrido. El alfa se estaba disculpando, parecía realmente culpable por algo que la mujer no entendía, al mirar a Ramonda esto no parecía desconcertada por la reacción de su hijo como si el gran rey hubiera cometido alguna clase de gran equivocación por la que tuviese que pedir perdón.

     Para cuando el rey terminó de hablar el omega se veía tranquilo de nuevo, con su aparecía de que nada le importaba que la estaba comenzando a molestar, es que era la única que veía de mala manera la forma en que el rey, el alfa de todo Wakanda estaba arrastrándose de manera decepcionante y de pronto, el intento de omega le sonrió al otro hombre de una manera que Nakia jamás había visto ni creía posible, empapando todo con su esencia cubriendo el aroma de la reina madre y el suyo propio incomodándola y Ramonda no hizo nada al respecto no se encargó de recordarle que ella era la omega de la manada mientras T'Challa no tuviera pareja.

     Shuri fue la única que noto la conmoción de la mujer, tanto ella como Ross habían viajado tan pronto se enteraron que Bucky regresaría para así empezar su brillante plan, a sus ojos Nakia parecía molesta por el lugar que su hermano le estaba dando al lobo blanco y por cómo veía a su madre no entendía como ella lo estaba permitiendo.

     Para ella como beta las jerarquías realmente nunca le habían interesado, sabía qué su lugar era el de prestar asistencia a la manada y eso podía hacerlo de maravilla, amaba su género secundario, había visto celos y le parecían dolorosos e innecesarios, sabía que los alfas debían proteger a la manada pero al contrario de lo que estos creían no eran la raza superior, habían hecho a lo largo de la historia pensar a los omegas que eran los últimos en la cadena, pero cuando un omega suelta feromonas de miedo el ochenta por ciento de los alfas salen en su rescate, cuando un omega estaba embarazado los instintos protectores del alfa lo vuelven una amenaza para todos menos la madre y ni hablar cuando utilizaban su feromonas para controlar el libido de los alfas, tenían tan subestimados a los omegas que cuando uno como Bucky, Stark o incluso Loki se mostraba tal cual era todo indómito y poderoso solían considerarlos defectuosos.

     Veía esto en Nakia, que no podía comprender como el lobo blanco tenía un control total sobre su hermano incluso sin que ambos fueran conscientes, el alfa sabía que le había fallado a su omega y rogaba su perdón era simplemente el instinto animal que residía en ellos, su madre lo sabía, ella misma había sido consciente de su poder como omega pero al ser consciente jamás había utilizado de esa forma su poder sobre su esposo T'Chaka, por la forma en que algunas doras habían bajado la cabeza de manera inconsciente sabía que había feromonas intensas en la habitación, debido a que James había empezado a liberarlas no poseía el control sobre ellas pero no parecía incomodar o molestar a su hermano. Si esos dos no comenzaban su relación pronto juraba que iba a gritarles en la cara y apostaba todo a que Ross le haría los coros.