Capítulo Veintidós

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     -Sam llámala- le dijo por décima vez Bucky. Se encontraban en la habitación del omega en el palacio, el beta había arribado por cerca del medio día junto con Fury que le hacía honor a su nombre gruñendo por lo bajo. El equipo también había venido y desde allí se tomaría el plan de acción. Azari había estado contento y saludado a todo el mundo encantado de recibir tanta atención, el equipo estaba encantado con él.

     Todos habían visitado la choza he incluso habían hecho un asado y disfrutado un almuerzo tranquilo, aunque en un principio tenso por la presencia del rey y algunas doras todo fue relajado, había sido extraño para el grupo ver a Bucky comportándose como un omega lleno de sonrisas, atendiendo al pequeño niño y coqueteando con el rey delante de todos algo simplemente magnífico, todos y cada uno le relató a Azari una historia donde de una u otra forma Bucky le había salvado la vida a lo cual pareció maravillar más al pequeño.

     Luego se habían dispuesto a lo importante y serio del asunto, el que Conrrad estuviera trabajando con los malos le cayó como un balde de agua fría, luego comenzaron a sospechar del pobre Galael el pobre muchacho estaba paralizado como cervatillo encandilado para cuando se desestimó que el fuera también un infiltrado ya tenía una lagrimas retenidas en sus vidriosos ojos, confirmando que el hombre no estaba hecho para este trabajo pero Bucky no sería quien se lo dijera.

     Shuri junto con Fury se dispusieron a rastrear a Conrrad incluso si eso le llevaba toda la noche, el resto se había retirado a sus habitaciones después de la cena e incluso contra los deseos del rey y la mayoría de las doras todos unos posesivos Sam se internó en la habitación de Bucky y Azari, el menor había caído rendido hacía horas luego de terminar una tarea de lengua mientras los adultos se sentaban en los bancos cómodos del balcón.

     -No estoy seguro hermano, ella es increíble pero esta vida es difícil-

     -Eres un idiota, ella quiere que la llames, ella tomó una decisión- Bucky estaba solo algo molesto- Anda llámala, es casi medianoche no pierdas esta oportunidad.

     -¿Desde cuándo eres taaaan sabio? Creí que ese era el papel de Steve-

     -Aunque no lo parezca tengo ciento siete años, se algunas cosas, a parte Robert no parece tener problemas para equilibrar todo y tiene varios hijos.

     -Ella es radiante...- Sam miró sus manos, no había sido difícil alentar a Bucky para que viviera una vida, incluso para que atreviese a estar con T'Challa pero era más fácil dar consejos que seguirlos.

     -Tú también eres radiante Sam, mereces esto, realmente lo haces.

     -Bien, lo haré...- el hombre se paró seguido del omega ambos chocaron puños- Ya te diré como termina todo, me queda poco tiempo para llamarla.

     Sam se sorprendió cuando al salir encontró a una dora armada fuera de la puerta de Bucky, mientras que este solo negó con la cabeza mientras reía ligeramente y aunque le interrogó con la mirada solo lo desestimó abrazándolo y dejándolo ir no sin antes amenazarlo de que debía hacer esa llamada, luego se despidió de la dora con un gesto de manos y eso fue todo.

     Bucky miro a Xolliswa, preguntándose si era por decisión propia o por orden del rey, entendía que probablemente no sería bien vista la presencia de Sam en sus aposentos incluso la necesidad de las doras de resguardar a la familia real, que ahora los incluía a ellos, también la cuestión de decoro y protocolos que Romonda había estado explicándole pero le parecía un poco excesivo y ya había obedecido bastantes protocolos en su vida.

     -Azari duerme ¿puedes cuidarlo?- la mujer se paró firme y orgullosa como toda dora con expresión leal.

     -Sería un honor...- luego dudo- pero permítame decirle que el rey se encuentra patrullando-¿acaso el lobo blanco había soltado un risita coqueta? La dora se sintió sonrojar.

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