¿TE ANIMAS?

NO LO SÉ

- Hey demonio HELLO!!!

Heyne había llegado de improviso a mi habitación, no me había avisado que vendría a visitarme.

- Hola ángel.
- ¿Por qué estás así? ¿Te encuentras bien?- preguntó preocupada.
- Tranquila, estoy bien. Tu hermana siempre está bien.
- No haz ido de fiesta ¿quién eres?
- No quiero más problemas, eso es todo.
- ¿Problemas? ¿Qué demonios hiciste?
- ¿Cómo te lo explico sin que te molestes?
- ¿Mataste a alguien?
- No, no cometí ese tipo de delito.
- ¿Entonces?
- Lastimé a tres mujeres que me caían muy bien.
- ¿Cómo así? ¿Desde cuándo tienes amigas?
- Bueno... me acosté con ellas, lo admito, pero me caían muy bien las tres, me seguían la conversación y nos divertiamos.
- Pero...
- Pero se enamoraron de mí las tres.
- Wow... Si que les diste duro demonio.
- No estoy jugando Heyne, habló enserio, las lastimé mucho.
- Lo siento unnie... Pero sabías que tarde o temprano una o varias se enamorarían. No sólo tuviste sexo con ellas, también socializaste y eso las enamoró.
- No entiendo sinceramente eso del amor y lo sabes, no creo en él, pero de todas maneras ellas si y se me fue de las manos.
- Tranquila unnie... tan sólo deja de seguir jugando y trata de volver a ser su amiga.
- Dudo que quieran volver a ello. Una dejó el trabajo, la otra ya no viene a verme y finalmente Hyejin no va a renovar el contrato, estoy perdida.
- ¿Por qué sólo mencionas a una de tres?
- ¿Eh? No lo sé.
- ¿Y si lo sabes?
- No lo sé, tampoco quiero pensarlo, quizás me caía mejor. No sé.
- Tendrás que averiguarlo, quizás ella te gusta.
- No me gusta ninguna de las 3, juro que si me sigues metiendo ideas en la cabeza te llevas a Ggomo.
- Esa es una buena oferta.
- Mentira, deja a mi hijo conmigo.