¿TE ANIMAS?

NO HAGAS ALGO DE LO QUE TE ARREPENTIRÁS DESPUÉS

Luego de haber pasado el día con el par de mocosas era hora de descansar, pero antes de que suceda ello escuché el llamado de mi ángel:

- Ya es hora de que hablemos...
- Estoy lista para las gritaderas y golpes, dale con todo pequeña hermana.
- No voy a golpearte unnie... no quiero tocar tu lindo rostro, una perra de la cárcel ya lo tocó.
- Puedes golpear mi sexi cuerpo.- bromeé.
- Pero que gran nivel de ego tienes demonio.
- No es ego, tan sólo digo la verdad.
- Bueno, seamos serias Wheein, no quiero bromas ¿ok?
- Ya te pareces a mamá ¿tan mal te han caído los años?
- Wheein!!!
- De acuerdo, de acuerdo. Me comportaré.

Luego de unos segundos en silencio la pequeña tomó un gran respiro para comenzar:

- ¿Sabes? Adoraría que las cosas entre Hyejin y tú sucedan.
- ¿Eh? ¿En qué sentido?- me había  sorprendido por lo dicho.
- Ya lo sabes, en el sentido amoroso unnie, enserio harían una linda pareja.
- Ya sabes que es lo que pienso Heyne, no insistas.
- Tranquila, no lo haré. No diré mucho al respecto, sólo te quiero pedir algo.
- ¿Qué cosa?
- Tan sólo aléjate de ella.- me pidió seriamente.

Me había agarrado fria, no esperaba tanta seriedad en esa frase, pero yo no quería hacer eso, de una u otra manera me gusta pasar tiempo con Hyejin, era complicado pensar racionalmente.

- ¿Por qué? Comenzaré a trabajar con ella en la empresa.- busqué una excusa.
- No es necesario que el CEO supervise las sesiones de las modelos.
- Me gusta la perfección.
- Pues habrá otra persona que le guste la perfección para que no salgas de tu oficina.
- ¿A qué se debe tu pedido?
- Quiero que ella sea feliz unnie. Tú eres feliz viviendo de tu soltería y juegos, ella merece alguien que la ame tal y como ella te ama a ti. Le he dicho millones de veces que deje de insistirte y enserio es más terca que una vaca.

NARRADOR

Wheein inconscientemente formó un par de puños en sus manos sin que su hermana lo notara ¿Le enojaba? Sí ¿Por qué? No tenía respuesta a ello.

- Unnie... ella no te va a dejar de insistir si sigues viéndola y dándole falsas esperanzas.
- Se lo he dicho miles de veces ¿qué tiene de malo?
- Mucho, lo que haces está mal y lo sabes Wheein, no te hagas la que no sabes, le haces daño a pesar de que no lo hace notar.
- Ella dijo que estaba bien.
- ¿La has visto llorar Wheein?
- ¿Tú lo has hecho?
- Sí y he tenido que consolarla. Si yo no estuviera enamorada de Ailee te juro que hubiera hecho que ella se olvide de ti como a de lugar y la hubiera hecho mi novia ¿sabes por qué? Porque es una persona de sentimientos sinceros.

¿Se la hubiera arrebatado? ¿hubiera hecho de todo para alejarla? ¿la hubiera enamorado? ¿en estos momentos si su hermana no tuviera novia la estaría viendo caminar al lado de la mujer que la confundía?

- Vamos Wheein, di algo.- exigió la menor.
- Hubiera sido imposible que lo hagas.- fue lo que atinó a decir.
- ¿Qué cosa?
- Dejar que me ame, no hubieras ganado esa batalla nunca.- dijo con una sonrisa fría.

La menor la examinaba, notaba la frialdad de esas palabras por los celos que le había causado, había cumplido con ello.

- ¿Cómo puedes creer eso? ¿Sabes cuántas veces la he hecho flaquear? - le estaba metiendo leña al fuego en definitiva.
- ¿Que tú qué?- se levantó de golpe furiosa.

Heyne hizo lo mismo, estaban en su habitación, Ailee había salido de la casa para dejarlas pelear, con anticipación Heyne le había comentado sus maléficos planes para que cuando Wheein le dijera algo no crea que es verdad.