¿TE ANIMAS?

VINO A VERTE

- Me había olvidado decirte algo Wheein.
- ¿Qué cosa?
- Vino Hyejin.
- ¿Qué? ¿cómo sabe que estamos aquí?

Me había sorprendido demasiado aquello ¿Cómo sabía lo que había pasado? ¿qué quería?

- No lo sé, le pregunté quien era y me dijo que era una conocida tuya y que necesitaba hablar contigo.
- ¿Qué más te dijo?
- Se sintió mal al saber la condición de Heyne, me dijo que debía de ser fuerte y hablar con ella seguido para que despierte.
- Eso es lo que tratamos de hacer de todos modos.
- Vi que se sentía muy mal, lo vi en sus ojos, se fue antes de llorar.
- ¿De llorar? ¿qué le dijiste? ¿le dijiste lo que sucedió?
- No, no le dije eso. Tan solo estaba un poco abrumada al ver la situación. Me dijo que la llames.
- No lo haré. No quiero darle explicaciones y mucho menos que sienta compasión de mi.
- Se ve buena persona.
- Por cierto ¿Cómo sabes su nombre?
- ¿Quién no conoce a Ahn Hyejin?
- Me había olvidado que era modelo.
- Sé que trabajaba en tu empresa. Además Heyne me dijo que le gustas a ella.
- ¿Qué tanto te cuenta mi vida mi hermana?
- No me da detalles, sólo lo básico. No tiene con quien más desquitarse.
- ¿Cómo así?
- Se frustra a cada momento porque no puede lograr que cambies tus pensamientos y aceptes los sentimientos de alguien.
- Cuando despierte creo que la mataré yo misma.
- Tan sólo se preocupa por ti, no te enojes por ello.
- Lo sé, lo sé.