EL CAMBIO NO ES MALO

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Ya no tenía con quien pasarla en el trabajo para nada, no tenía a ninguna de las chicas, ninguna lo tomó saludablemente y nos separamos por así decirlo porque ellas fueron las que se alejaron a pesar de que yo quería continuar como su amiga de cada una.

- Hola hermanita.
- Hola ángel ¿qué haces por aquí?
- Venía a hablar contigo ¿Estás ocupada?
- Sabes que para ti tengo todo el tiempo del mundo. Toma asiento.

Nos sentamos en el sofá juntas, apoyé mi cabeza en su hombro y comenzamos:
- ¿Sucedió algo?
- Nada malo o bueno sí.
- Dime en qué puedo ayudarte.
- Ailee me dijo que le gusto y yo me quedé en shock, hui del lugar y ahora me da vergüenza ir a nuestro dormitorio.
- ¿Así se llama la chica que te gusta?
- Sí, es ella.
- ¿Y por qué huiste?
- Me puse nerviosa.
- Sí tu crees en el amor Heyne creo que deberías de corresponderle ¿no? Ella te gusta mucho.
- Lo sé, fue el momento medio raro ¿Sabes? No me lo esperaba nunca.
- Yo tampoco me esperaba que muchas mujeres me dijeran lo mismo y mírame.
- ¿Cómo te sientes? Ya ha pasado un mes.
- ¿Qué te puedo decir? Ya no las veo ángel, ya no salgo tampoco, me estoy matando por aquí para distraerme.
- Estas cambiando, eso es raro, me preocupas.
- El cambio no es malo, creo que me tomaré un tiempo en las jugadas, creo que es lo mejor.
- Si lo dejas de por vida sería mucho mejor.
- La vida sería aburrida.
- Ggomo necesita otra madre urgente.
- Creo que vendrá conmigo al trabajo mi bebé.
- Espero que no se vuelva aburrido con los cálculos.
- Será mejor que su madre y trabajará antes que su tía.
- Estoy estudiando.
- El estudiará y trabajará a la vez, te ganó.
- Demonios.
- Es mi hijo.

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