El Zhukulento Lobo Negro Solitario Es Mío

[Capítulo 143]

- Eras tan lindo en ese entonces.

- Todavía soy lindo.

- Dios mío.

Giré la cabeza para reírme de Lucas en lugar de hacer estallar las burbujas. ¡Pero no fue el joven Lucas quien apareció en mis ojos al momento siguiente!

- Ja, no importa lo lindo que sea, no te enamores de mí. Estoy cansado de ser popular.

 Lucas, que se convirtió en un niño de 10 años, me lanzo una mirada triunfal mientras yo lo miraba con la boca abierta y sorprendida. Sin embargo, las expresiones faciales que normalmente parecerían desafortunadas, y los movimientos de fingir estar orgulloso y deslizar su cabeza no eran tan malos como ahora.

¡Esta es la versión completa de mini Lucas!

La ternura del pequeño Lucas, a quien había olvidado, me golpeó. ¡Eh eh, esa estúpida característica! ¡Eres tan lindo que haces que quiera morderte! El Lucas miniatura estaba realmente orgulloso de su ternura asesina.

Pero fue la curiosidad que me golpeó con más fuerza.

- ¿Puedo cambiar mi edad corporal a voluntad como tú?

- ¿Tú?

Lucas miró mis ojos parpadeantes y tocó su barbilla con su mano. Luego, un dedo meñique sobresalió de su manga. ¡Uf, incluso tus movimientos tienen que ser tan lindos!

- Veamos, tal vez ... 

Observé con emoción cuando sus ojos mi cuerpo de abajo a arriba. Y sentí que mis expectativas se enfriaban con las palabras que siguieron.

- Será posible cuando tengas unos 100 años.

¿100 años de edad? ¿Tienes 100 años?

A ese paso seré una abuela de pelo blanco. Además, ¡no se si moriré repentinamente mañana! ¡O hasta cuando si es posible!

Uf, sin embargo, con la personalidad de Lucas, debe haber querido decirme que es imposible aunque muriera, sí.

Entonces, ¿no está bien decir que es posible a los 100 años demostrar mi talento mágico? Uh, pero es como si...

- ¿Desde cuando has podido hacerlo?

- ¿De verdad quieres saber?

Lucas me miró como si fuera una mezquindad. Era como si estuviera diciendo: "¿Te estas comparando conmigo ahora?" O "¡Si lo sabes, te sentirás frustrado!"

¡Ugh! Me acuesto en el sofá.

¡¿¿100 años, 100 años ??! No es que me vuelva senil, y al ser una abuela quiera convertirme en un niño así como así. ¡Ríndete, ríndete!

Como resultado, Lucas también era lindo, así como Zenit o Ezekiel eran lindos de jóvenes. Por supuesto, es natural que fueran lindos.

- Fue un poco extraño de ver entonces.

Recordé a Zenit que había visto en la fiesta del té.

Zenit, que regresó después de salir del jardín más de lo esperado, siguió sonriendo. ¿Pero fue solo mi imaginación ver a Zenit con una rostro lleno de soledad?

- ¿Extraño? ¿Qué cosa?

Moví mi mirada hacia Lucas, quien cuestionó mi diálogo interno. Todavía tenía la forma de un niño, inclinando la cabeza hacia un lado.

Miré el rostro de Lucas y moví mi mano a la velocidad de la luz.

- ¡Ah, tan lindo! ¡Tus glutinosas mejillas de pastel de arroz me han hecho emocionarme desde antes!