El Zhukulento Lobo Negro Solitario Es Mío

[Historia paralela 52: Lucas del mundo paralelo cruza las dimensiones]

- Bueno, eso es....

La gente que estaba agachada como si hubieran visto un fantasma, respondieron rápidamente.

Al escucharlo, Lucas se teletransporto sin mirar atrás.

El destino era la boda de la princesa Athanasia, que comenzaría en breve.

***

El pasillo que conectaba a la sala de espera de la novia, estaba decorado con flores fragantes, encajes de colores y joyas brillantes.

Un momento después, unos pasos pesados sonaron por el lugar.

Eran Claude y Félix, que aparecieron detrás la esquina del pasillo.

Hoy es la boda de Athanasia, la única princesa de Obelia, y se celebrará a lo grande bajo las órdenes del emperador Claude.

Pero en este bendito día, el ánimo de Claude estaba por los suelos.

Por supuesto, no era tan desconsiderado como para hacerlo evidente delante de su hija, pero Athanasia, con quien acababa de encontrarse en la sala de espera de la novia, no parecía haberlo notado.

- Félix.

- Sí, Su Majestad.

- Parece que no es en vano decir que hasta un caracol tiene habilidad para rodar.

Murmuró Claude como si estuviera escupiendo, recordando al bastardo que encontró después de ver a Athanasia.

- Él, que ha estado deambulando delante de mi hija como un perro, finalmente fue elegido. ¿No seria bueno decir que la suerte es lo mejor del mundo?

La furia de Claude se debía a que no le gustaba el novio de su hija.

- En primer lugar, no debería haber colocado a ese bastardo al lado de Athanasia.

Se culpaba de sus malas acciones en el pasado por haber puesto a ese descarado junto a su  amada hija.

Pero era demasiado tarde para arrepentirse de todo.

Félix, que estaba a su lado, le sonrió a Claude.

- Pero estoy seguro que no importa a quien elija la princesa, no sería del agrado de Su Majestad.

De hecho, lo que dijo Félix era verdad.

Quienquiera que vaya a casarse con Athanasia hoy, Claude lo despreciaría de todos modos.

Claude dejó una horrible amenaza al futuro novio, a quien vio hace un rato, diciendo: "Si los ojos de mi hija lloran por tu culpa, morirás de todas las maneras posibles".

Sin embargo, el chico incluso le sonrió tranquilamente a Claude con la misma expresión. Luego, sin miedo frente a él, dijo que viviría feliz con Athanasia en el futuro.

La cara de Claude se arrugó como una hoja de papel al recordar lo que acababa de suceder. La energía que emanaba su cuerpo se volvió más violenta.

Pero Claude se esforzó por controlar su feroz corazón.

¿Y si me convierto en un padre que no puedo desear plenamente la felicidad de su hija en un día como éste?

Aun así, pensar en la boda que se celebrará en breve, hizo que Claude se moviera lentamente, recordando a la difunta Diana.

***

¡Swoosh!

Lucas llegó justo a la puerta de la sala de espera de la novia. Las doncellas que custodiaban la puerta se sobresaltaron. Pero pronto se inclinaron como si reconocieran el rostro de Lucas y lo saludaron cortésmente.