BAD Girl | Zayn Malik

24. I Wish

AVRIL:

Me di la vuelta y me encontré con el chico de ojos marrones mirándome fíjamente.

—¿Qué quieres Liam? —Dije yo.

—Oye, mira, siento lo que dije, ¿vale? —Se disculpó él. —Pero quería entablar conversación contigo y no sabía qué decirte. —Se excusó.

—Ya. ¿Y tenías que decir todas esas cosas malas de Zayn? —Dije yo con el entrecejo arrugado.

—Como dijiste eso... yo pensé... que sólo te daba pena. —Dijo con ojos sinceros.

—Pues sí, me daba pena... pero Zayn para mí es muy importante. Y no voy a dejar que nadie le haga daño. —Dije yo segura.

—Lo siento ¿Está bien? —Dijo él arrepentido y yo suspiré interiormente.

—Louis, ¿vamos ya? —Dije y él asintió desorientado.

Ambos fuimos a comprar las entradas, las palomitas y las bebidas y entramos.

La película terminó y salimos de la sala.

—¿Qué te ha parecido? —Me preguntó Louis.

—Bien. —Dije yo con una sonrisa.

—¿Ves? Es bueno salir algunas veces. —Dijo Louis.

—Sí. —Dije yo sonriendo con un poco de tristeza.

—Deja de pensar en Zayn, ¿quieres? Es un idiota si no te llama. No sabe lo que se pierde. —Dijo Louis mirándome y yo lo abracé.

—Gracias Louis. —Dije abrazada a él.

—¿Para qué están los amigos? —Dijo mientras nos separábamos.

—No sé qué haría sin ti. —Dije yo.

—Yo tampoco. —Dijo y yo reí y lo golpeé levemente en el hombro.

—Qué modesto. —Dije negando con la cabeza y él rió.

—Venga, vámonos. —Dijo él cogiéndome de la mano.

Andamos hasta una pequeña heladería que había en una esquina y Louis se paró allí.

—¿Qué desea? —Le preguntó la chica coqueta a Louis.

—Uno de vainilla y otro de chocolate por favor. —Pidió él ignorando su coqueteo.

—Louis. —Lo llamé. —No es necesario que pagues el helado también. —Dije yo.

—Aquí tienes. —Dijo la chica comiéndose a Louis con la mirada. Louis cogió los helados y me dio uno a mí. La chica de los helados me fulminó con la mirada y yo sonreí a Louis.

—Gracias Lou. —Dije yo cogiendo mi helado de vainilla.

—Yo pagaré todo. Sé que cuando estás depre necesitas tu helado especial de vainilla. —Dijo él y yo sonreí.

Louis me conocía muy bien. Desde siempre él estuvo allí apoyándome en las buenas, y en las malas.

—Gracias. —Dije y me senté en un banco que había en la acera. Él se sentó a mi lado y sonrió.

—Sabes que cuentas conmigo para cualquier cosa. —Dijo él rodeándome con el brazo por los hombros.

—Lo sé. —Dije apoyando mi cabeza.

Terminamos nuestro helado en silencio, pero era un silencio cómodo.

—Louis. —Lo llamé y él me miró.

—¿Qué pasa? —Dijo él mirándome.

—Sé que no te gusta que hable de él... —Dije y Louis suspiró. —Pero de verdad, estoy preocupada por él. —Dije y baje mi mirada.

—Estará bien. —Dijo él alzando mi mentón.

—Pero... ¿y si no? ¿y si le ha pasado algo? —Dije mientras la preocupación invadía mi ser.

—Tranquila. Si le pasara algo sus padres te avisarían, ¿no crees? —Dijo Louis.

—Ellos no tienen mi número de teléfono. —Dije yo.

—Pero Zayn sí. —Dijo él y yo asentí. —Tranquilízate, ¿quieres? ¿Qué ha sido de la chica mala del insti? —Dijo y yo lo miré.

—Que la han expulsado del insti permanentemente y... —Dije y me callé.

—Y... —Dijo para que siguiera. Yo suspiré y cerré los ojos.

—Y se ha enamorado. —Completé en voz baja. Al ver que él no decía nada lo miré. Tenía la mirada fija en el suelo. —¿Louis? —Lo llamé, pero él seguía sin mirarme.

—¿Qué tiene él que no tenga yo Avril? —Dijo mirando al suelo. Yo me sorprendí al oír eso.

¿Qué? No. Louis no.

—Louis. —Dije sorprendida y él por fin me miró.

—Avril, ya no sé qué más hacer para enamorarte. ¿Qué tiene él que no tenga yo? No lo entiendo. —Dijo él negando con su cabeza.

—Nada Louis. No lo sé. Yo... pensaba que había quedado claro que lo nuestro no podría funcionar. —Dije yo.

—Pero no. Avril, tú me gustas. Desde siempre, y yo no he podido dejar de lado mis sentimientos. —Dijo mirándome fíjamente. —Lo he intentado. Pero no puedo. —Concluyó y bajó la mirada.

—Louis yo... lo siento. No sabía que sentías eso por mí. Pensaba que sólo me veías como una amiga, o como a una hermana. —Dije yo. —Pero... yo... Louis, yo amo a Zayn. —Dije y él me miró.

—Pero él ni siquiera te llama. Si fuera yo, te llamaría cada día si estuviera lejos. Pensaría en ti... Avril, no sabes cuánto desearía ser yo. —Dijo él y yo tragué saliva.

Mierda no. Ya tengo suficientes problemas. A Louis le gusto. No quiero hacerle daño.

—Louis... eres muy importante para mí. Y yo no quiero herirte. —Dije mirándolo a los ojos. —No podría mentirte. Yo sólo te veo como un amigo, o un hermano. Y darte una oportunidad sería crearte falsas esperanzas. Y yo no quiero eso. —Dije y él asintió.

—Lo entiendo. —Dijo él en voz baja y luego suspiró. —Avril, sé que no sientes lo mismo que yo. Pero... ¿puedo besarte? —Dijo y yo parpadeé varias veces.

¿Un beso? Bueno, sólo es un beso.

—Sí. —Afirmé yo. Él se acercó a mis labios y cerró los ojos para luego juntar nuestros labios en un beso tierno, y con amor por su parte. Por la mía sólo había confusión.

Nos separamos del beso y Louis sonrió a medias. Yo acaricié su mejilla y le di un beso en la otra mejilla.

—Gracias... por ser mi amiga después de todo. Y por ser sincera. —Dijo él y yo sonreí.

—Siempre serás mi amigo. —Dije yo.