Expediente Manila (COMPLETA)

Sin aire

06/09/2016

Los pajaritos comenzaban a cantar. El sol hacía aparición por la pequeña parte descubierta que la persiana no llegaba a cubrir. Un rayo daba justo sobre los ojos de Jimin, quien se despertó pensando que el menor seguía detrás suya, abrazándole. Casi siempre se levantaban juntos. Normalmente, Jimin  era el que tenía que quitarle las sábanas de encima a JK. El mayor deseaba volver a repetir esas escenas mañaneras, en las que una pequeña lucha de fuerzas le hacían caer bajo el embrujo de su menor, comenzando un juego sexual que le impedía salir de la cama. Sin embargo, se quitó las legañas de los ojos, frotándose con el antebrazo y giró la cabeza. No había nadie, ni rastro del maknae. La mirada del rubio se percató de que la puerta se estaba abriendo ¿sería Jungkook?

-Jimin-ahhhhh...

Un feliz Hobi entró por la puerta, abalanzándose sobre el joven y cogiendo sus cachetes como si fuera un niño de cinco años. Jimin aún estaba medio dormido, no sabía cómo reaccionar. El peso de su mayor lo había arrollado inesperadamente, su cara se convirtió en un slime de color rosa con el que Hobi jugaba y, además, estaba totalmente inmovilizado, por lo que no se lo podía quitar de encima.

-Cómo me alegro de que no te hayas ido.

-Hyung...

-Pensaba que... No sé. Estoy feliz de que decidieras quedarte.

-Hyung... Me ahogas.

Hobi, quien tenía la cara pegada a la de Jimin, reaccionó. Estaba aprisionando el pecho del recién despertado y casi no era capaz de respirar.

-Ups... Perdona -se levantó de forma apresurada, quedándose de pie mientras Jimin se levantaba lentamente, intentando reponerse.- Bueno, venía a despertarte, a quererte mucho y a decirte que nos vamos en una hora. Algunos ya se han ido al ensayo.

-¿Ya?

-Sí, RM estaba ansioso por probar unas cosas que no iban bien y se ha llevado a Jungkook con él.

-Ah...

Hobi se dio cuenta de que dijo el nombre de la discordia, pero de repente Jimin sonrió feliz y fue hacia el baño ansioso por salir.

-Hobi, me ducho y vamos.

-¿Vale...?

Jimin canturreaba la canción de I need you mientras Hobi lo veía marcharse dando saltitos como si fuera Heidi en las montañas. ¿Qué pasó la noche anterior? ¿Lo habían arreglado?

__

La puerta que daba al otro extremo del pasillo también se abrió. Unos pasos serenos y tranquilos aparecieron dentro de la habitación, pisando el parqué como si los pies se deslizaran. Miró el bulto bajo su cama, se posicionó a un lado de ella y atrapó con sus manos el nórdico, arrastrándolo por completo para dejar al descubierto el cuerpo de Tae. Este se retorció al comprobar que le estaban despertando.

-¿Qué haces en mi cama? -dijo la voz serena de Suga.

Tae no quería levantarse. Se movió hasta quedar boca abajo.

-Tae...

Suga se acercó a la oreja de su amigo.

-O te levantas o vuelco el colchón.

-Hyung... -decía la voz pesada del joven-. Quiero dormir.

-Y yo que me devuelvas mi cama. Tú verás.

Suga podía ser muy bueno, pero tenía muy mala leche cuando le tocaban sus cosas. Odiaba que se acostaran en su cama. Tae no hacía nada por moverse por lo que el chico cumplió su promesa. Metió las manos bajo el colchón, volcándolo junto con el joven.