capítulo 9

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Tras la larga noche con Diana y al hacerse tarde, la invité a quedarse a dormir y aunque al principio ella se negó finalmente logré convencerla.
LA presté uno de mis pijamas y aunque ella tenía más pecho que yo, le quedaban bastante bien.
Durante la cena estuvimos hablando con mis padres y el ambiente parecía menos tenso que por la mañana, quizás se debiera a la presencia de Diana
Diana y yo nos quedamos en el salón viendo una película y una vez que terminó subimos a la habitación a dormir.

-ME lo estoy pasando muy bien - dijo Diana sonriendo
-Yo también, me alegro mucho que te hayas quedado - dije con una gran sonrisa
-Bueno, alguien insistió mucho y no tuve más remedio - dijo con una mueca
-NO podía dejar que te fueras tan tarde a casa - dije sonriendo - ¿Y si te pasa algo? Ya no podremos ir de vacaciones juntas
-Eso es lo que te importa, ¿las vacaciones? - dijo Diana molesta
-Bueno me importas tú, pero quiero pasar el verano contigo - dije sonriendo
-Bueno, te perdono - dijo Diana riendo

Nos quedamos dormidas en seguida, Diana estaba en una cama supletoria que teníamos para los invitados, la habíamos puesto al lado de la mía para poder dormir mejor las dos juntas
Diana era una buena amiga, siempre que la he necesitado ha estado a mi lado.
Aunque el paso del tiempo puede estropear una amistad, la mía con Diana durará muchísimo tiempo.
Una pequeña luz me despertó lentamente, no sabía de dónde venía y me senté en el borde de la cama buscando el origen de esa luz
Busqué por todos lados y tras palpar toda la habitación conseguí encontrar el portátil.
LA webcam se había quedado encendida.

-Qué raro, nunca la enciendo - pensé para mí

ME aparte de la webcam para que siguiera apuntando a la oscuridad y no se viera nada.
La pantalla estaba bloqueada y no conseguía que se encendiera.

-Bueno, solo debo bajar la tapa y listo - dije cerrando el portátil.

Un pequeño zumbido apareció en el silenció de mi habitación.
Busqué por los cajones y conseguí encontrar el móvil sonando como un loco.
Miré la pantalla.

-Raúl...- dije mientras el móvil caía al suelo

Estaba viviendo en una pesadilla constante, este chico me estaba volviendo loca. Un fuerte ruido sonó y la puerta comenzó a ser golpeada violentamente

-¡Aria abre la puerta! - grito una voz mientras golpeaba la puerta

Busque por todos lados algo que poder lanzar o para defenderme. NO había nada y Diana dormía plácidamente.
Los golpes fueron más violentos y tras un segundo de calma la puerta cayó al suelo.

-¿Qué haces aquí? - dije asustada
-Vengo a por ti - dijo Raúl entrando en la habitación

EL pulso se me aceleraba estaba a punto de desmayarme y de repente todo desapareció. Estaba en la nada flotando. MI mente abandonó mi cuerpo

-Aria despierta soy Diana, estas teniendo convulsiones - dijo Diana a lo lejos

Abrí los ojos lentamente y me encontré cara a cara con Diana.

-Tranquila, es por la medicación, estás en casa - dijo Diana sonriendo

Al borde del abismoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora