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Narrador omnisciente.

Jungkook había quedado atónito con las palabras de Rose nombró "Creo qué me he enamorado de Lisa" quizás andaba de broma pero ella jamás jugaría con algo cómo eso. Y su tono de nerviosismo reflejaba qué sus palabras eran acertadas.

El azabache pudo jurar casi caerse al suelo al escuchar esas palabras. Sólo que Rose lo había agarrado de el hombro apenas de tropezó con el acera dé la las calles.

Levantó su mirada con los ojos tan abiertos cómo platós de la sorpresa reflejada ante unas cuántas simples palabras. ¿Rose y Lisa? Eran completamente dos polos opuestos los cuales quizás no deberían juntarse. Lisa era una mala influencia y Rose increíblemente inocente y dulce, lo cual no reflejaba muy bien en la personalidad de la rebelde. Pero sabía qué la peli rosa no podría contener sus sentimientos y el tampoco podría coivirselos haciendo que se los guarde para ella, la decisión era de su parte y el debía apoyarla con lo qué eligiera, era su mejor amigo después de todo ¿Y qué clase de mejor amigo no apoyará en el amor a su mejor amiga? Definitivamente ninguno lo haría y lo tenía demasiado en claro.

- Tu... ¿Estas seguro de eso Rose? Sabés que no quiero qué acabes lastimada -tomo de los hombros a la menor mirandola, definitivamente está vez debía asumir él papel de hermano mayor qué Rose no tenía reflejado en su vida, debía cuidarla y no quería qué sufriera un desamor.

Una desilusión cómo sí fuera algún amor de secundaría él cual fue separado por el destino. Ella no debía pasar por eso. Sabía como lo tomaría y no sería nada bueno.

Era una niña todavía después de todo, o al menos a sus ojos lo era. Una dulce jovencita la cual estaba atravesando por su primer amor aunque esa persona fuera la menos indicadas de todas aquellas en éste universo y los siguientes.

La menor sólo pudo asentir varías veces con un poco de desilusión y temor a las respuestas de su amigo, no sabía sí lo próximo qué escucharía le gustaría o no, o la reacción qué esté tomo realmente, aunque sólo la trató como un hermano mayor para ella aquello era algo desconocido. Y quizás pensó en la molestia de el azabache.

El asintió y se separó un poco de Roseanne soltando sus hombros aún siguiendo frente a ella.

Era la desición de ella el quien gustarle.

- Esta bien Rosie, no te diré nada por lo de Lisa, después de todo no controlo tus sentimientos y jamás los cambiaría. Sólo no quiero que juegue con tus sentimientos, debés avisarme cualquier cosa ¿Sí? -ella asintió repetidas veces, fue suficiente para él cómo para jalarla hacia él y abrazarla con su brazo derecho dejando uno libre dándole un medio abrazo mientras caminaban de nuevo por las calles.

Las risas no tardarían en hacerse aparecer trás él pequeño silencio que hubo entre la pareja de amigos antes de hacerse ido juntos hacia la casa de la peli rosa.

...

La mañana había comenzado de nuevo, la luz se colaba a través de las cortinas de la habitación iluminado el rostro de una recién despertada Rose, sus puños se cerraron y fueron directo a sus ojos frotando estos mientras se sentaba en medio de la cama.

Un minuto después su mirada inspeccionó la habitación, todo estaba hecho un desastre gracias a las últimas semanas de estudió que tubo. Se levantó poniéndose sus zapatos de andar en casa y salió de la habitación escuchando el sonido de el timbre venir desde la ventana. Estaba un poco confundida ante ello ¿Quién vendría a verla tan temprano por la mañana? Nadie, no conocía a nadie así, a menos qué fuera algo importante. De todos modos pocos lo hacían, eran las siete y media de la mañana.

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