t h e n t y f o u r

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Narrador Omnisciente.

Aquellos días de lluvia siempre habían sido los más deprimentes para Rose. El estar sentada en el marco de madera que te permitía estar allí con comodidad gracias a su grosor y el espacio que te daba mientras gotas de lluvia caían del cielo empapando todo a su paso no era algo que había considerado tan feliz.

"Aveces las personas que te aman pueden llegar a hacerte daño, pero el amor que sienten por ti jamás desvanecerá, porque aquel sentimiento interno siempre permanecerá ahí si en verdad te ama".

Leyo en aquel libro de portada azul al cambiar de página.

"Aveces para darse cuenta de la realidad hace falta alejarse del pasado, de todo lo que te hicieron sentir en un pasado, pues si esa persona aún sigue siendo la indicada, hara lo que sea por ti".

Dejo inmediatamente su lectura en el momento en que la puerta de la habitación que compartía con su prometida se abrió, haciendo que cerrará el libro lo más pronto posible y lo colocará en su lugar.

Volteo rápidamente en dirección a la puerta viendo a Jennie allí parada.

—¿Interrumpo algo? —cuestiono Jennie apartando la mirada de su celular —. Pensé que Lisa habías ido con Lisa a la reunión hoy.

Rose rápidamente nego. —Ella me ofreció ir pero yo decidí quedarme sola —aclaro rápidamente recibiendo una pequeña sonrisa por parte de la castaña de ojos felinos.

—Rose, está es tu casa, no tienes porque darme explicaciones —aclaro rápidamente con una pequeña sonrisa —. Solo venía a ver si ya los decoradores habían terminado todo y veo que hicieron un buen trabajo.

—Lo se —hablo con una pequeña sonrisa la pelirosa —. ¿Cuando podre volver ver a Jungkook? llevo más de una semana sin poder verlo.

—Jungkook y su pareja tuvieron un pequeño problema al venir, están en este momento en su hogar junto a sus padres pero por lo que el señor Kim me dijo no vendrá en unos días —Rose abrió sus labios formando una perfecta 'o' con ellos antes de asentir.

—Comprendo. ¿Necesitas algo más JenJen? —dijo esta vez dirigiéndose a su nueva y muy cómoda cama para sentarse sobre esta aun sin apartar su vista de la chica de ojos felinos.

—De hecho, si, los Manoban quieren verte este sábado para discutir sobre la decoración que abra en su fiesta de compromiso, a la señora Jiwoo me comento que le parecía una buena idea que los colores de la fiesta fueran el blanco y el dorado, pero se necesita saber la opinión de Lisa y la tuya por supuesto sobre eso así que hemos decidió... —y ahí su cerebro se desconecto por completo.

Quería a Jennie, obviamente, pero no estaba lo suficiente concentrada como para escuchar un montón de cosas que le daban igual para una simple boda.

Mucho pensar le daría dolor de cabeza.

Miro a algún punto perdido en la habitación, sus ojos se toparon con uno de los libros de la biblioteca leyendo en las letras grabadas en su costado "propiette Lalisa Manoban" adornando su sencilla cubierta que sólo consistía en semi cuero de color negro haciendo que tuviera un aspecto a diario, su cerebro hizo un pequeño tick en ese momento.

El club de lectura. Pensó mordiéndose el labio sin quitar la mirada de aquel libro.

—Rose ¿Estas prestandome atención? —hablo Jennie frunciendo levemente el ceño dirigiendo su mirada hacia el libro que estaba viendo, una perfecta 'o' se formó en sus labios antes de mirarme —. No me digas que estas pensando en echarle un ojo a ese libro, jamas se lo a dejado ver a nadie.

EUPHORIA © #1 [✔️]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora